Claro y VTR representan un 98,4 % de todas las conexiones con HFC. En cambio, en fibra óptica tienen un 2,7%.
Semanas atrás las compañías Liberty Latin America y América Móvil, matrices de VTR y Claro Chile respectivamente, anunciaron un joint venture. A diferencia de las fusiones, los joint venture tienen la particularidad (explicado muy en simple) en que las compañías que se «unen» y aportan cada uno con lo suyo, pero sin perder sus identidades propias. Es decir, se «unen» con un objetivo en común y crean una nueva empresa con lo entregado por ambas.
En el caso de VTR y Claro, la primera entregará su base de clientes fijos y la segunda hará lo mismo, pero principalmente con los usuarios móviles. A eso se suma el aporte de deuda de US$ 1.500 millones de parte de Liberty (VTR) y de US$ 400 millones de América Móvil (Claro). Además de un pago de Liberty a América Móvil por US$100 millones.
Algunos ejemplos de joint venture en el mundo son el de Nokia con Siemens, el que dio paso a «Nokia Siemens Networks» una compañía que fabrica equipos de red. El otro caso es el de Sony con Ericsson, esta última compañía enfocada en los equipos de redes de telecomunicaciones, la cual al juntarse con Sony comenzaron a trabajar con los teléfonos Sony Ericsson.
Para la abogada Francisca Labbé, y según señaló a Emol, «la asociación probablemente obedece a que esta es la mejor forma que tienen de competir estas compañías en esta línea de negocios. Es decir, si no operan en conjunto, no son competitivas y eso disminuye la competencia, por lo tanto, los consumidores recibimos peor servicio a mayor precio”, expresó respecto a la situación de Claro y VTR.
Entre los objetivos que tiene el joint venture de Claro con VTR, está el crecer en el despliegue de fibra óptica y la nueva red 5G. En cuanto a la fibra, las empresas esperan contar con 6 millones de clientes pasados con esta tecnología.
Del mercado del Internet fijo, VTR cuenta con 1.266.517 clientes, lo que equivale al 31% del mercado total en los servicios fijos, y sólo detrás de Movistar con 1.143.187 (28%). Primer lugar que sigue manteniendo a pesar de haber perdido un -6,2% de este durante el 2020. En el caso de Claro Chile, la compañía de origen mexicano tiene menor participación, un 11,5% y 470.490 clientes. Esta última también ha perdido un -0,6% de participación según el último informe de la subsecretaría de Telecomunicaciones (Subtel).
En cuanto a la telefonía fija, Claro representa el 5% del mercado con 128.220 clientes. Sin embargo, la compañía ha perdido un -11,8% de este. Misma situación, con un -2,4% del mercado perdido tiene VTR, quien representa el 20,8% del total del mercado de la telefonía fija.
El acuerdo podría significar que ambas empresas podrían concentrar el 42,6% del mercado fijo total.
Si hablamos de la tecnología empleada por las empresas para distribuir sus servicios, ambas tienen presencia en diferentes tipos de estas. De hecho, Claro aún cuenta con 221 clientes empresa conectados a través de ADSL. El mercado del HFC es donde las dos compañías tienen gran parte de sus servicios, aunque VTR concentra gran parte del uso de esa tecnología.
La compañía de propiedad de Liberty, VTR, cuenta con 1.233.176 clientes conectados a través de HFC. Cifra que representa al 73% de los usuarios de todo Chile que reciben servicios de telecomunicaciones por medio de esta tecnología. En el caso de Claro, la compañía mexicana cuenta con 429.102 clientes pasados con HFC, un 25,4% del mercado. Juntas representan un 98,4 % de todas las conexiones con ese cable en el país.
En el caso de la fibra óptica la situación es diametralmente opuesta. Claro tiene 19.089 clientes con esa tecnología, lo que representa al 1% del total nacional. VTR por su parte, se encuentra desplegando fibra en las zonas donde está llegando con su servicio, sin embargo, hasta el último informe de Subtel tienen pasado a 33.341 clientes, lo que representa el 1,7% del mercado de la fibra en Chile. Las dos empresas suman 52.430 clientes con fibra óptica.
En resumen, ambas compañías representan en 2,7% de los clientes conectados a través de fibra óptica en Chile, muy por detrás de la líder: Movistar. Dicha compañía representa el 47,7% de todo el mercado de la fibra, seguido de Mundo con el 24,3%. El porcentaje del mercado de Claro y VTR es incluso menor al de WOM, una de las últimas compañías en desplegar ese tipo de servicio y quien ya tiene 63.112 y representa un 3,9%.
El aporte de Claro será, como ellos mismos lo señalaron, principalmente en la red móvil. En dicho mercado la compañía de origen mexicano tiene 5.593.075 clientes, lo que representa un 21,76% de participación del mercado. Muy atrás está VTR con 258.517 clientes, un 1% del mercado y con una pérdida de -11,3% durante el último año.
En el detalle de los clientes, Claro tiene un 30,8% del mercado de los usuarios prepago, mientras que VTR lo hace con un 0,1%. Ambas empresas han perdido -10,3% y -37,5% de participación en este segmento, respectivamente. En la modalidad pospago, Claro se lleva el 16,7% del mercado y VTR un 1,5%. En cuanto a las conexiones a través de 4G y 3G, Claro representa un 12,3% del total de conexiones en el país. VTR hace lo suyo con un 0,8%.
Si hablamos de espectro radioeléctrico, Claro cuenta con espacio en la banda de 700 MHz (20 MHz), 850 MHz (25 MHz), 1,9 GHz (40 MHz), 2,6 GHz (40 MHz) y en la polémica 3,5 GHz tiene 30 MHz, además de los 30 MHz que podría sumar con la compra de lo que se desprenda Entel, aunque aquello debe ser autorizado. A todo lo anterior se suman los 400 MHz en la banda 26 GHz ganados en el concurso de la red 5G.
VTR por su parte cuenta con 30 MHz en la banda AWS y otros 50 MHz regionales en la banda de 3,5 GHz. Todas cifras que en conjunto le abriría una puerta para competir en la red 5G, de la cual Claro salió más damnificada tras no conseguir espectro en el concurso en la banda 3.500 MHz y que es fundamental para el despliegue de esta red.
Claro cuenta con más de 3 mil torres en todo el país, lo que sería un llamativo negocio de incluirse en el joint venture con VTR. Sin embargo, la compañía decidió dejar fuera del acuerdo este segmento de negocio, ¿la razón? Apostaría por una iniciativa propia.
Según reveló Diario Financiero, Claro habría decidido crear una filial que agrupe las torres y consigo pueda entregar servicios mayoristas en este servicio. Con esta filial propia la compañía podría competir directamente con American Tower, quien es la líder de ese mercado y que le permitiría subarrendar su infraestructura a otras compañías.
El otro segmento fuera del acuerdo es el de la televisión satelital, mercado en el cual no podrá ingresar VTR. Lo anterior debido a las restricciones impuestas por el Tribunal de Defensa para la Libre Competencia (TDLC) luego de la compra de Metrópolis en 2005.
Sin embargo, VTR ingresó el 2019 una consulta al mismo tribunal sobre la posibilidad de levantarles esa restricción ante los cambios en ese mercado. Hasta ahora no ha recibido respuesta del TDLC, por lo que el negocio satelital queda fuera del acuerdo, al menos si las restricciones siguen vigentes cuando se materialice el acuerdo, que se estima sea el 2022.
Debido a la magnitud del acuerdo y según estipula el Decreto Ley N°211 de 2016, las compañías tendrán que notificar el negocio a la Fiscalía Nacional Económica (FNE). A partir de aquello esa entidad comienza una investigación y podría ser aprobado el acuerdo comercial dentro de los primeros 30 días hábiles de la investigación.
De no ser así, la FNE podría determinar que la operación debe ser revisada con profundidad, para lo cual extenderá la investigación en una segunda fase, proceso que podría durar hasta 90 días hábiles. El foco de la FNE podría ser puesto en el mercado del Internet fijo.
Dicha resolución podría darse a mediados de 2022 y puede ser aprobado sin ningún tipo de observación o con recomendaciones que descarten un daño a la libre competencia.