Review Samsung The Frame

En Pisapapeles quisimos adentrarnos en una nueva categoría para nuestros reviews, el de los televisores, es por eso que hace un par de semanas te trajimos el completo análisis del Smart TV C8 de LG, el televisor de gama alta de la empresa surcoreana, y el día de hoy te traemos uno de su competencia, el nuevo Samsung The Frame de 55’ pulgadas que gracias a su tecnología, promete que nuestro televisor se transforme en una hermosa obra de arte al estar “apagado”.

El The Frame incluye una pantalla LCD de 55 pulgadas con resolución 4K, sistema operativo Tizen, sistema de audio de 40W,  pero sin duda que es su diseño el que dejará boquiabiertos a más de uno, pero ¿será eso suficiente para justificar su precio? 

Es importante destacar que este televisor está pensado para que sea utilizado en una pared, adaptándose al entorno en el que la colocamos, sin embargo, ya que debo entregarla de vuelta, en mi hogar no la he podido instalar por un tema de espacio y es por esto que nuestros amigos de Samsung me han facilitado el TV Studio Stand, un trípode que nos permite colocar el televisor en el piso, manteniendo la esencia artística del producto.

Hemos pasado algunas semanas utilizando el The Frame a diario y te contamos nuestra experiencia. ¡Vamos con el review!

ESPECIFICACIONES

Modelo disponibles en Chile:
– 55 pulgadas
Panel de la Pantalla:
– Tipo: LCD
Procesador:
– CPU de 4 núcleos
Resolución máxima:
– 4K (3840×2160 pixeles)
Video:
– Motor de imágenes UHD Mastering Engine
– Tasa de movimiento: 240
– HDR10+
– HLG
– Dynamic Crystal Color
Audio:
– 2.2 canales con woofer de 40W
– Dolby Digital Plus
Conectividad:
– WiFi 2.4Ghz y 5Ghz
– Bluetooth
– Ethernet
– 4 puertos HDMI (HDMI-CEC)
– 3 USB
Sistema Operativo:
– Tizen
– SmartThings App
Energía:
– 155W de Consumo de energía máximo
– Suministro de energía: 100-240V~AC 50/60Hz
Dimensiones y Peso:
– TV sin soporte: 1235.0 x 707.8 x 42.5 mm
– TV con soporte: 1235.0 x 750.7 x 200.0 mm
– De la caja: 1372.0 x 849.0 x 237.0 mm
– TV sin Base: 18.6kg
– TV + Base: 19.1kg
– De la caja: 31kg

CONTENIDO DE LA CAJA

Por si no fuera obvio, la caja es bastante grande, pesa 31kg y en su interior incluye todo lo que vamos a necesitar para la instalación, que será imposible que hagas solo. por lo que te recomendamos estar acompañado a la hora de instalarla.

En cuanto a lo que se incluye en la caja, tenemos el The Frame, la One Connect Box –que permite realizar todo tipo de conexión con el televisor–, el No-Gap Wall Mount para poder colocarlo en una pared, el marco color Nogal y por supuesto, su control remoto, patas y manuales.

DISEÑO

Como ya podrías esperar, el principal atractivo del The Frame es su diseño, el cual es único en la industria de televisores en Chile.

El televisor está diseñado para simular un cuadro cuando está colgado en la pared, ofreciendo distintos tipos de marcos para que sea vea bien en cualquier tipo de pared o decoración. Debido a que yo no he colgado el televisor en mi casa, he ido a las oficinas de Samsung Chile y me han permitido tomarle fotos a una unidad de The Frame para el análisis.


El marco del dispositivo, –el cual simula ser un cuadro, sobresaliendo un poco de la pantalla–, es de color negro y se alarga hacia los costados del dispositivo para así ocupar la totalidad del grosor del The Frame, el cual alcanza solo los 4.7 cm. Estos centímetros son uniformes en la totalidad de la parte trasera, a diferencia de la mayoría de televisores, que ocupan una caja de componentes que sobresale de la parte posterior.

Este grosor está diseñado así intencionalmente, ya que cuando está montada en la pared, el “No-Gap Wall Mount” que viene incluido permite que el televisor quede pegado en un 100% a la superficie. Además, en la parte trasera no se incluye las conexiones tradicionales, por lo que no habrá ningún cable que entorpezca el maravilloso diseño de este televisor.

Esta es la única conexión que encontramos en el posterior

Por supuesto que se puede comprar por separado distintos tipos de marcos que se ajustan al televisor con la ayuda de imanes que se encuentran presentes en el marco por defecto, colocándose sobre éste y que se adaptan a los diferentes ambientes. Samsung me ha facilitado dos, uno en color madera nogal  –que viene incluido con la compra– y otro en color blanco que se puede comprar por separado. Las otra opciones son el color madera Beige y el negro, que luce similar al marco por defecto del televisor. Gracias a los imanes, intercambiarlos es extremadamente fácil, ya que éste hace que se ajuste automáticamente, sin necesidad de andar probando si una pieza está bien coloca o no.

En caso de que no puedan colgar el televisor en la pared –lo cual es  absurdo– Samsung ofrece dos opciones. La primera, que viene incluida en la caja, es un par de patas clásicas, similares a las que vemos en cualquier televisor convencional, construidas en metal y que se ajustan a presión en la parte inferior, pero que hacen que el The Frame pierda su hermoso diseño inspirado en el arte.

La segunda opción, la cual he utilizado yo, y que se vende por separado, está pensada acorde al diseño del televisor, ya que es un trípode que simula ser una obra de arte en proceso. Este trípode no tiene una altura regulable y coloca el televisor a una altura de un metro, por lo que si lo quieres colocar frente a una cama resulta algo incómodo. Yo lo he utilizado a un costado de la cama y no he tenido problemas, la altura me ha parecido la adecuada. Este trípode lleva el nombre de TV Studio Stand, es de color negro y está construido en metal. La instalación se realiza en la parte trasera del The Frame, utilizando tornillos.

CONECTIVIDAD Y CONTROL

Como ya se habrán podido dar cuenta, el televisor cuenta con una sola conexión en su parte posterior, esta conexión es la que une al The Frame con el One Connect Box, dispositivo que incluye todo tipo de puertos y que permite que el The Frame esté libre de los cientos de cables que conectamos a nuestros televisores hoy en día. El cable que los une es un delgado cable de color gris, que puede viajar a través de los bordes del TV para así ocultarlo de mejor forma. En una pared de color blanco pasará casi desapercibido.

El One Connect Box incluye los siguientes puertos de izquierda a derecha: Entrada de poder, Antena, Audio Óptico, Ethernet, 4 HDMI (1 CEC) y la conexión con el televisor. En el costado tenemos 3 puertos USB 2.0 de 5V. Su diseño es bastante minimalista, una caja rectangular de color negro y con el logo de Samsung en la parte superior.

En el control remoto han apostado por un diseño minimalista, como viene siendo la tónica en los televisores de Samsung. La conexión es automática y a través de Bluetooth, por lo que no tendremos que apuntar al televisor o la caja para poder controlarlo. El botón de encendido se encarga de cambiar entre el Art Mode y el modo televisión, operado por el sistema operativo Tizen. Si dejamos presionado el botón de encendido el The Frame se apagará completamente. También tenemos botones para el pad numérico, micrófono, botonera de colores, dirección, volumen, canales, inicio, medios y atrás.

Si vamos a la conectividad inalámbrica, tenemos la opción de conectar el The Frame a través de Bluetooth a nuestro smartphone, por lo que podemos transformar el televisor en un clásico “parlante” Bluetooth mientras se encuentra en el Art Mode.

PANTALLA Y VIDEO

A pesar de que el The Frame cuenta con un precio de alta gama, el panel que incluye en su frontal no hace uso de la última tecnología de Samsung, que conocemos como QLED.

Nuestro protagonista integra un panel LCD con resolución 4K (3840 x 2160), que a pesar de ser de una generación anterior, se comporta de buena manera. En caso de que no sepas la diferencia entre un panel LCD y un panel OLED, el primero no puede reproducir negros perfectos debido a su sistema de retroiluminación, sin embargo, es imposible que el The Frame sufra del temido efecto fantasma de los OLED.

Es importante destacar que si bien el panel no está a la altura del resto de televisores en su rango de precio, eso no quiere decir que la pantalla del The Frame sea una mala pantalla, de hecho, gracias al diseño general del televisor luce espectacular en cualquier pared, el contenido en SD, HD y 4K se ve sin ningún tipo de problema o lag, aunque si nos vamos a los tecnicismos, se queda algo detrás.

Lo primero, su nivel de brillo alcanza los 500 nits, lo cual está por debajo de los 1000 nits que alcanzan algunos TV en su rango de precio, aunque para serte sincero, estando entre cuatro paredes y con la opción de brillo automática activada no tendrás ningún tipo de problemas con el brillo, incluso me ha llegado a molestar al activar el modo juego, que sube el brillo del televisor.

El color negro es bastante uniforme y se ve excelente, si bien no es perfecto, las escenas oscuras se ven realmente bien, sin mucha iluminación artificial típica de los televisores LCD, y aunque la tecnología QLED más reciente de Samsung ayuda a que los negros se vean aún mejor, el The Frame cumple en este apartado.

Por otra parte, al iniciar el The Frame por primera vez, me he percatado que su nivel de contraste era bastante pobre, por lo que he ido a la configuración experta del dispositivo y he encontrado una opción llamada “Mejorador de contraste” que ha equilibrado el contraste para evitar así una diferencia excesiva entre la luz y las zonas oscuras.

Punto aparte para los ángulos de visión, que no son destacables como uno podría esperar de un televisor de alta gama, no están mal, obvio, pero uno espera perfección por el precio. Samsung no ha puesto un panel de última generación en este “Marco” y en algunas ocasiones se nota.

Por último, la frecuencia de funcionamiento del The Frame es de 120Hz para la versión de 55′ –que es la que se vende en Chile–, por lo que notarás que todo se mueve un poco más rápido de lo normal, y esto ayudará a que nuestros ojos no se cansen tan rápido de mirar la pantalla.

Configuración

TIZEN Y ART MODE

Como no podía ser de otra forma, Samsung ha incorporado su propio sistema operativo en The Frame. Tizen 3.0 es el encargado de dar vida a este televisor y la verdad es que se comporta muy bien.

La navegación es extremadamente simple, si presionamos el botón Home del control remoto aparecerá en pantalla un menú en la parte inferior de la pantalla con todo lo que necesitamos. De izquierda a derecha tenemos: Notificaciones, Configuración, Origen, Búsqueda, Apps y Art Mode. Luego viene una zona personalizable con nuestras apps y fuentes de entrada favoritas, como puede ser nuestra consola o Chromecast y aplicaciones como YouTube, Netflix, Spotify o DirecTV GO, servicio que se encuentra presente de forma exclusiva en televisores Samsung con Tizen.

Logos oficiales en el apartado de Entradas

La interfaz es bastante simple y es muy fácil acostumbrarse a usarla, sin embargo, es tan simple que llega a quedarse bastante atrás en funciones, cantidad de apps y juegos respecto a Android TV –sistema presente en los televisores de Sony– y su sistema de búsqueda es una muestra más de ello.

Como les comentaba antes, en el control del The Frame tenemos un botón de búsqueda por voz, éste nos permitirá realizar algunas acciones como apagar la TV, abrir la configuración o cambiar al canal anterior, pero la verdad es que todo eso resulta bastante absurdo si presionando un botón del mismo control activator de los comandos de voz logramos las mismas acciones. La búsqueda por voz es muy limitada, y no podemos hacer preguntas de conocimiento general o reproducir contenido de aplicaciones como Netflix o Spotify, aunque si buscamos algún video en YouTube si funcionará.

Guía de comandos de voz

Art Mode

No cabe ninguna duda de que el Art Mode es la característica más importante y diferenciadora del The Frame.

El Art Mode es el modo al que entra el televisor al presionar el botón de apagado –o a través del menú de Apps– y que transforma el The Frame en un cuadro, con una selección de más de 100 artes disponibles en la colección Samsung de manera gratuita y separados en distinta categorías, como lo son arquitectura, acción, dibujo o vida silvestre. También tenemos la opción de acceder a un servicio de suscripción a un precio de CLP $2.990 mensuales que nos permitirá acceder a cientos de reconocidos cuadros de forma momentánea con la posibilidad de comprarlos de manera permanente a un precio de CLP $9.990, por lo que si quieres colocar a la famosa Mona Lisa de forma permanente en tu sala de estar, tendrás que desembolsar algo de dinero extra.

También existe la posibilidad de agregar nuestras propias fotografías e incluso colocar hasta tres fotografías dentro del mismo cuadro, tal y como ocurre con un cuadro de verdad.

Si presionamos hacia arriba en cualquier arte, podemos acceder a la configuración del fondo del arte, en el que podremos elegir diferentes colores de una escala de grises y también podemos seleccionar si queremos que la imagen se vea con un efecto de sombreado, con un marco clásico o sin ningún tipo de marco.

Los sensores del televisor, ubicados en la parte inferior, ayudan a que el Art Mode se desenvuelva de muy buena forma, ya que el televisor adapta su luminosidad y tonalidad para que se vea como un cuadro de verdad sin importar las condiciones de luz en la que tengamos el televisor. Esto también se puede ajustar de forma manual con el control remoto, aunque en mi experiencia, el brillo de noche me ha parecido un poco excesivo a la hora de dormir, por lo que he decidido activar el modo nocturno, en el que configuramos el The Frame para que se apague automáticamente si no se detecta luz en la habitación en la que se encuentra.

Por último, este cuadro también se puede apagar automáticamente si no se detecta movimiento en la habitación después de determinado tiempo y podemos configurar el sensor de movimiento para que detecte personas a mayor o menor distancia, según convengamos.

Mi experiencia con el Art Mode ha sido muy positiva, y sin duda alguna ha hecho que el televisor sirva para algo al momento de no estar utilizándolo. Colgado en una pared se ve hermoso aunque si hay mucha luz, la presencia de reflejos es inevitable –sobre todo si ponemos algún arte de color oscuro cerca de una ventana–, pero eso también ocurre con el vidrio de un cuadro común y corriente. La experiencia sigue siendo buena.

ECOSISTEMA CON SMARTPHONE

Como toda Smart TV de Samsung, el The Frame también puede ser controlado con nuestro smartphone, para ello existen dos aplicaciones: Smart View y SmartThings.

Smart View promete poner toda la configuración del The Frame en nuestro teléfono, accediendo a los mismos menú, App Store, Art Store y control remoto, pero lamentablemente no la he podido hacer funcionar debido a que nunca detectó el The Frame. Supongo que estará descontinuada porque la siguiente app hace exactamente lo mismo.

SmartThings es la app de Samsung para controlar todo tipo de dispositivo conectado en nuestro hogar y aunque no he podido sincronizar mis luces Philips Hue, la aplicación ha funcionado muy bien con el The Frame.

La app te indica que aplicación se está utilizando y podemos realizar las mismas funciones que cumple el control remoto de la TV, por lo que si pierdes el control, podrás seguir utilizando el televisor. Ni más ni menos.

AUDIO

En el apartado del sonido, el The Frame cuenta con altavoces de 40W que se encuentran ubicados en la parte posterior del televisor y que se comportan de forma bastante competente si utilizamos el televisor en interiores.

Los parlantes suenan muy bien a un volumen moderado y en sonido es bien claro a mitad de volumen, lo cual ya es bastante alto. Si subimos el volumen al máximo, ocurrirá lo normal, se distorsiona un poco pero aún así no creo que llegues a utilizar en el máximo nivel durante el día a día.

El The Frame incluye tres modos de sonido de forma predeterminada, el primero es el Estándar, que cuenta con un sonido equilibrado en todas las frecuencias. El segundo es Amplificar, que potencia las voces y es ideal para ver programas de televisión, y el tercero, que es el que más he utilizado, es el Optimizado, que potencia bastante los bajos sacrificando un poco las frecuencias agudas y que suena realmente bien.

En caso de que quieras utilizar el televisor como tu centro multimedia siempre es recomendable adquirir un equipo de sonido externo con su respectivo woofer dedicado, y el One Connect Box facilita las cosas ya que incluye un puerto de audio óptico y una entrada HDMI ARC que facilita bastante la transmisión de audio.

Si bien el The Frame no va a otorgarte el sonido que te puede ofrecer un sistema dedicado a esa tarea, sus parlantes son muy competentes y son más que suficientes, aunque quizás incluir un sistema de audio en el One Connect Box sería una excelente solución, tal y como hace LG en alguno de sus modelos.

CONCLUSIÓN

Me gustaría ir al grano, el The Frame cuenta con un precio elevado y una pantalla que no es de última generación ni la mejor de Samsung, y se puede quedar algo atrás respecto a la competencia directa en su rango de precio, pero para decir verdad, el principal foco de este televisor no es la calidad de su panel ni la capacidad de su sonido, si no que su espectacular diseño.

The Frame está pensada para la gente que se preocupa encarecidamente del diseño de su hogar –y tiene el poder adquisitivo para hacerlo– y que sacará provecho del Art Mode que incorpora el televisor para hacerlo encajar a la perfección en un lindo ambiente.

Con el No Gap Mount podemos colgar el televisor en la pared sin que quede ningún tipo de separación entre ambas y debido a que su cable es transparente y todas las conexiones se realizan en el One Connect Box, el televisor quedará completamente libre de los molestos cables que salen de un televisor tradicional.

Seguramente puedas encontrar un televisor con la misma calidad de pantalla y audio por un precio menor, pero siéndote sincero, el The Frame simplemente compite en otra categoría. Yo lo quiero, y si Samsung agrega una pantalla de última generación a la segunda versión de The Frame –que ya nos han adelantado, ocurrirá–, será sin duda, el mejor televisor del mercado.

Disponibilidad

El Samsung The Frame tiene un valor de CLP $999.990, este valor incluye un marco de color nogal de regalo, junto a 6 meses del servicio de suscripción de Art Store gratis y la instalación gratuita en tu hogar. 

Los marcos de color negro y blanco tienen un valor de CLP $59.990, mientras que los de madera Nogal y Beige cuestan CLP $99.990.

El Studio Stand tiene un valor de CLP $259.990.