Review The Last of Us Parte II

Naughty Dog nos ha ofrecido grandes videojuegos a lo largo de su historia, han sido los encargados de traernos las sagas Crash Bandicoot, Jak and Daxter y Uncharted para las consolas PlayStation, y no cabe ninguna duda que estas franquicias han destacado no solo por su jugabilidad, sino que también por el fuerte enfoque cinematográfico que poseen.

Bajo esa premisa nació The Last of Us, el juego para PlayStation 3 que nos presentó la historia de Joel y Ellie en un mundo post apocalíptico devastado por la pandemia del Cordyceps, un hongo que comienza a crecer en el cerebro de los infectados pero al que misteriosamente, Ellie es inmune.

En el primer juego, Joel debía seguir las instrucciones de la líder de las Luciérnagas para llevar a Ellie a un hospital en donde podrían generar una vacuna gracias a ella, pero esto implicaría matarla y Joel no estaría dispuesto a perderla, tal y como perdió a su hija durante el día del brote de la pandemia. Es ese tremendo final de anti-héroe del primer juego el que genera una serie de acontecimientos que te dejarán con la boca abierta en esta segunda entrega –no solamente por la historia–, sino que por su impresionante jugabilidad y realismo en cada uno de los apartados que puedas imaginar.

Título
The Last of Us: Parte II
Consola
PlayStation 4
PlayStation 4 Pro
Desarrollador
Naughty Dog
Fecha de lanzamiento
19 de junio de 2020

Obviamente no les puedo hablar los cientos de detalles que contiene la historia de The Last of Us Parte II porque estaría entrando en amplios spoilers, pero si que les puedo comentar que, mientras el primer juego era superficialmente una historia de amor, este está basado de la misma forma en la venganza, y en este mundo, que ha sido devastado completamente por la pandemia, la venganza se traduce en una crudeza tremenda y que hace que muchos otros temas salgan a flote. Como contraparte del amor, encontramos el odio, la obsesión, la empatía y los traumas que todo lo anterior conlleva.

No hay ningún momento en que la narrativa aburra y la tensión siempre va en aumento, algo a lo que estos desarrolladores ya no tienen acostumbrados. Me ha resultado especialmente atractivo introducirse en el mundo creado por Naughty Dog a través de los diferentes detalles incluidos en el juego que sirven para contarnos como la sociedad ha vivido el calvario que significó el fin de la humanidad como la conocemos, ya sea a través de cartas, documentos que podemos encontrar o por los propios paisajes, entornos y edificios. Este es un mundo que ha sido dominado ampliamente por la destrucción, la naturaleza o el mismo Cordyceps, que si bien se aloja en los seres humanos, estos también generan esporas al estar largo tiempo en lugares cerrados, habiendo sectores en donde el hongo se encuentra hasta en las paredes.

El guión está contado a través de diferentes capítulos que no necesariamente siguen un orden cronológico, pero del cual Ellie y Joel, junto con el resto de personajes, se encargan de convertir a The Last of Us Parte 2 en una obra sumamente entretenida, como si estuviésemos viendo una serie o película. Naughty Dog nos guía a través de la historia y es un completo viaje de emociones que te llevará al rededor de 30 horas completar por primera vez, pero que no está libre de fallas notorias en el guión que por supuesto, no te puedo comentar.

Los desarrolladores se han encargado de que cada uno de los personajes nos importen, que el jugador sepa todo lo que ellos han tenido que vivir para llegar a los acontecimientos, generando mucha empatía en el usuario y que a la larga, además de provocar una constante tensión, provoque felicidad, risas, llantos, tristeza, angustia y muchas otras emociones, como poquísimos juegos te lo pueden generar. Los personajes –y su desarrollo– son geniales y no se puede esperar menos, conociendo a grandes personajes creados por Naughty Dog, como Nathan Drake o Jak.

En su camino, Ellie se encontrará con dos facciones, los WLF –conocidos en español como Lobos– y los Serafitas –que también son llamados Scars– y estos dos grupos son muy distintos. Los Lobos es un grupo bastante numeroso y con gran armamento militar debido a que fueron ellos los que tomaron control de la ciudad de Seattle después de la pandemia. Estos además utilizan perros entrenados, que pueden seguir el rastro de Ellie, lo que dificulta la posibilidad de usar el sigilo para atravesar muchas situaciones. Como contraparte, tenemos a los Serafitas, que son una especie de secta, que tienen un comportamiento más sigiloso y crudo, y las fases contra ellos hay que afrontarlas de manera distinta.

La presencia de los infectados –que no son zombies porque no están muertos– es también importante, aunque si bien la narrativa, al igual que en el primer juego, no pasa por las peleas con los infectados, si que hay fases del juego en que debemos matar o escondernos de ellos, y en uno que otro momento se vuelven importantes para poder eliminar a los Lobos o Scars, ya que podemos usarlos a nuestro favor para eliminar enemigos. Los clásicos infectados vuelven y hay algunos nuevos que tendrás que descubrir jugando el juego, y si, todos emiten sonidos aterradores.

A nivel gráfico el juego se ve muy bien, si bien en términos generales, la gráfica no la veo superior a Red Dead Redemption 2, si que hay una notable mejora en las expresiones faciales de los personajes y los soldados enemigos, mejor que en cualquier juego a la fecha. Es hermoso –y muy violento– ver cuando Ellie entierra su cuchillo en el cuello de los enemigos. El trabajo de luces también es muy bueno y puedo destacar la luminosidad como un factor clave del ambiente oscuro y triste del mundo de The Last of Us.

Por otra parte, el manejo de la cámara hace que el juego luzca siempre súper bien y que en todo momento se sienta de forma cinematográfica, sobre todo en combates cuerpo a cuerpo, en los que la cámara hace un excelente trabajo para captar las expresiones de ira y tensión en los personajes.

Pero bueno, hablando del combate, adentrémonos en el gameplay del juego, que además de poseer un buen sistema de combate, también destacan sus nuevas mecánicas de exploración, sigilo, tiroteos y supervivencia, pero siempre manteniendo la esencia de la primera entrega.

Una de las mecánicas nuevas que más llama la atención es la del botón de salto, que podría parecer una tontera, pero es que en verdad aporta mucho para la exploración y la construcción de los niveles, en los que en más de una ocasión deberemos saltar de un lugar a otro para atravesar un vacío o simplemente saltar obstáculos en medio de un escape. Ellie es mucho más ágil que Joel, pero en ningún momento se siente como si fuese un mono, como ocurría con Nathan Drake en la serie Uncharted, y esta agilidad permite alcanzar lugares ocultos en los que podremos encontrar pistas para abrir cajas fuertes con varias provisiones o encontrar coleccionables similares a los libros de cómics que podíamos encontrar en la primera entrega. Además, los mapas son extensos y a pesar de no ser un mundo abierto, si que existen amplias zonas en las que podremos movernos libremente para explorar las ciudades o vecindarios. Además, Ellie ahora sabe nadar, lo que amplía aún más estas posibilidades y de seguro que más de alguna sorpresa te encontrarás a lo largo de estas fases de exploración.

El sigilo también ha mejorado notablemente, llegando a un nivel fácilmente comparable al de la saga Metal Gear Solid, una de las pioneras en este sentido. Con el botón O, Ellie puede agacharse para ocultarse detrás de mesas o hierba alta y si dejamos presionado el botón, se arrastrará por el piso, a lo Solid Snake. Esto da paso a situación de sigilo muy bien logradas y de mucha tensión, aunque si los enemigos se acercan demasiado te verán. Ellie podrá disparar desde cualquier posición en la que se encuentre y el cuerpo del personaje responde acorde a las situaciones que están ocurriendo. También tenemos el modo escucha, en el que la pantalla se tornará blanco y negro para poder revelar la ubicación de los infectados o enemigos que estén moviéndose o haciendo ruido y Ellie podrá hacer uso de objetos como botellas o ladrillos para distraerlos o atacarlos por sorpresa.

Contrario al sigilo, tenemos los tiroteos y las persecuciones a Ellie, que en ningún caso serán la mejor opción, ya que la inteligencia artificial de los enemigos funciona muy bien y para salir airosos tendremos que gastar muchas balas –que como ya sabemos, son escasas– o muchos botiquines para poder restaurar nuestra salud, los cuales de forma un poco cómica y al igual que en el primer juego, siempre utilizan la animación de vendarse el antebrazo, aunque nos hayan clavado un balazo en la pierna. Lo que si se ha integrado son las flechas de los enemigos, las cuales quedarán clavadas en el cuerpo de Ellie y si no te las quitas, tu salud irá disminuyendo con el paso del tiempo.

En muchas fases del juego, Ellie irá acompañada por otros personajes, al igual que Joel lo hacía con ella en el primer juego y la inteligencia artificial también se comporta super bien en esos casos. Por ejemplo, si estamos en una fase de sigilo y hay dos enemigos cerca, si te acercas sigilosamente para eliminar a uno, tu acompañante se encargará del otro y si tenemos que disparar con todo lo que tengamos, ellos también lo harán.

Punto aparte para la banda sonora compuesta por Gustavo Santaolalla, que es una de las mejores que he tenido la oportunidad de escuchar, marcando notoriamente determinadas secciones del juego, y dando los inicios y finales de las peleas de una forma muy notoria. Además, el hecho de que Ellie sepa tocar la guitarra da mucho juego a lo largo de la historia, incluso entregando momentos sumamente emotivos.

Otros sistemas que vuelven son los de elaboración de objetos, mejora de armas y los manuales de entrenamiento, los cuales podremos mejorar con diferentes materiales que encontramos a lo largo de la aventura. A lo largo del juego puedes –y debes– elaborar objetos combinando algunos ingredientes que puedes encontrar al eliminar enemigos y explorar diferentes lugares, ya sean botiquines, explosivos, munición u otros objetos, todos ellos son sumamente importante para poder avanzar en la historia. También nos encontraremos con suplementos que nos permitirán mejorar o desarrollar algunas habilidades haciendo uso de manuales de entrenamiento que también deberás encontrar a lo largo del recorrido. Por último, nos encontraremos con herramientas –marcadas con un icono de tuerca– que nos permitirán mejorar nuestras armas, añadiendo mejores cargadores o miras con zoom, por darte algún ejemplo, las cuales siempre deberemos elegir porque todas son útiles y no podremos mejorarlas todas a lo largo de la historia.

Dejando de lado el gameplay, también encontramos otras opciones en el menú de pausa, como el ya clásico modo fotografía que hemos visto en muchos juegos, que permite mover la cámara, ocultar personajes y ajustar la profundidad de campo, agregar filtros, ajustar el brillo y muchos otros ajustes para poder capturar imágenes dentro del juego. El juego también va guardando automáticamente nuestro progreso a través de puntos de control, por lo que si cometemos errores –como por ejemplo, utilizar munición de forma innecesaria–, podemos volver atrás reiniciando desde el último punto de control guardado, que además estará marcado con la cantidad de minutos que han pasado desde ese momento.

Yo nunca he sido partidario de jugar este tipo de videojuegos en el idioma español, pero la verdad es que Naughty Dog ha hecho un excelente trabajo de doblaje a un español latino neutro, que para mi es bastante mexicano, pero da igual, se agradece que en títulos con un fuerte énfasis en sus diálogos y cinemáticas se ejecute este trabajo de buena forma. No es para nada fácil y es cosa de ver la decisión de Rockstar Games de ofrecer GTA V y RDR 2 solamente en inglés.

¿Vale la pena?

The Last of Us Parte II no es solamente una de las mejores exclusivas que ha lanzado PlayStation, sino que es uno de los mejores juegos de esta generación. Pocos juegos tienen historias con una narrativa tan bien profunda y un mundo detallado de la forma en que lo presenta TLOU, que desde ya, no está libre de errores pero que para mi, no manchan en nada la experiencia. Sus personajes están muy bien desarrollados y los capítulos en los que se divide la historia nos introducen de excelente forma a lo que vendrá más adelante y nos dejan expectantes en todo momento debido a las emociones que genera.

Su jugabilidad recoge todo lo bueno de la primera entrega y lo mejora en esta nueva generación de excelente forma, añadiendo mecánicas novedosas en todos los aspectos, ya sea en combate, sigilo, exploración o narrativa. La ausencia de multijugador, como si lo ofrecía la primera entrega, pasa completamente desapercibida ante su historia.

The Last of Us Parte II es un juego que te hará reír, llorar, sentir rabia y tristeza, y sin duda que en más de algún momento quedarás boquiabierto con sus impresionantes escenas. Es un juego sumamente emocional. Todo esto da como resultado un juego que es una obra maestra que si tienes un PlayStation 4, debes jugar y nos deja expectantes al próximo videojuego que tiene preparará Naughty Dog para PS5.