El desarrollo de GPT-5 tiene problemas, y es que OpenAI se quedó sin datos de desarrollo, esta retrasado y su entrenamiento es muy difícil.
El nuevo modelo de ChatGPT debería haber llegado pronto, pero parece que eso no pasará, pues el nuevo modelo GPT-5 estaría retrasado. Y la razón es algo que no muchos vieron venir, pues tiene que ver con los datos de entrenamiento.
Con el nombre en clave de «Orion», se esperaba que el modelo aportara mejoras revolucionarias en el razonamiento, la precisión de los hechos y la mitigación de sesgos. Sin embargo, OpenAI se enfrenta ahora a complejos retos que amenazan con frenar su progreso.
Y aunque GPT-5 aún está en fase de desarrollo, las dificultades que rodean su proceso de formación y la presión financiera asociada se han hecho cada vez más evidentes, según reportea el Wall Street Journal. Según el afamado medio, uno de los principales retos de la GPT-5 reside en la disponibilidad de datos de entrenamiento de alta calidad.
Los investigadores de OpenAI han llegado a la conclusión de que Internet ya no proporciona los conjuntos de datos necesarios para lograr mejoras significativas. Y para solucionar este problema, la empresa ha recurrido a la generación de datos sintéticos, recurriendo a expertos como ingenieros de software, matemáticos y físicos para crear contenidos originales.
Además, el proceso de entrenamiento de GPT-5 requiere una gran cantidad de recursos. Se estima que cada entrenamiento cuesta unos 500 millones de dólares. A pesar de estas importantes inversiones, las mejoras logradas hasta ahora no han cumplido las expectativas. Aunque hay avances en ciertas áreas, no llegan a ser los saltos revolucionarios que justificarían unos gastos tan enormes.
De este modo, el retraso es evidente, pero no tenemos información acerca de su presentación. Sea esta pronta o no.
