Según ZTE Alemania, el Axon 7 vendría con una nueva capa de personalización que eliminando el típico bloatware que suelen traer consigo en muchos casos.
Días atrás les comentamos que el Axon 7 recibiría la última versión del sistema operativo de la gran G en muy poco tiempo, y ahora un nuevo rumor nos deja entrever que eso no es taaan pronto como hubiéramos deseado.
En otras palabras, la propia ZTE Alemania estuvo comentando que Android 8.0 Oreo estaría llegando a este terminal en abril del próximo año. En comparación con la estipulación anterior, al haberles dicho que este update estaba «a la vuelta de la esquina» lo más sensato hubiera sido que entonces arribara en lo que resta de 2017 o en enero de 2018 a más tardar, sin embargo, parece que las cosas no serán así al final de cuentas.
Además, esta variante de Android traería consigo una nueva capa de personalización consigo en el Axon 7. O mejor dicho, una capa de protección (del inglés skin layer) denominada Stock + UI. La misma implicaría la eliminación del bloatware que trae consigo la mayoría de los launchers típicas de cada organización/marca. En este sentido, creo que más de uno de los poseedores de este smartphone agradecerán esta última cualidad.
Es muy probable que Android 8.0 sea la última actualización del OS que reciba este aparato puesto que al momento de su llegada estará al límite de soporte de dos años asegurados. Quizás siga obteniendo nuevos parches de seguridad mensuales, lo cual sería algo que hablaría ciertamente bien de ZTE, ya que al menos se preocuparía de mantener protegidos a sus clientes (y sus teléfonos) ante las amenazas constantes en el ecosistema al que pertenece.
Por último, entre las novedades que Oreo traería consigo se esperan la selección de texto inteligente, el famoso modo Picture-in-Picture (PiP) y hasta el soporte de Project Treble; entre otras características.
Habrá que permanecer atentos para atestiguar si este update al final arriba en abril de 2018… o si ZTE decide acelerar los trámites y larga la versión final antes. No perdamos las esperanzas en esto último.
