El próximo gama alta de la surcoreana promete dejar atrás el plástico y mejorar todavía más su tecnología de cámara. Promete arrasar en MWC16.
Cuando un smartphone relativamente importante comienza a recorrer el mundo buscando la homologación de los fabricantes, o preparándose para su lanzamiento, es costumbre que lo vistan con una caja de color negro muy tosca que ayuda a disimular todos los detalles de su diseño, materialidad y otras características en caso de filtración.
Es el caso de este supuesto LG G5 que dice «hola» frente a las cámaras, y que con su plástico negro busca ocultar una de las pocas cosas que podríamos haber odiado del actual gama alta de la surcoreana, la falta de metal en su cuerpo.
El nuevo LG G5 tendría un estilizado chasis de metal que hará de él un gran competidor en el segmento de equipos insignia para la primera mitad de 2016. El dispositivo ya nos sorprendió durante 2015 con una de las mejores cámaras del mercado, y para esta nueva generación no deberán hacer demasiado esfuerzo para subir la apuesta en este apartado.
Se sabe que en su parte posterior el equipo tendrá dos cámaras, una de 16MP y otra de 8MP que — según hemos averiguado — trabajarán juntas para conseguir en paralelo fotografías a todo color y en blanco y negro, las que se mezclarán para ofrecer HDR mejorado hasta lograr un nuevo estándar.
Otras cosas que sabemos del equipo es que tiene batería removible, memoria expansible vía microSD y un lector de huella digital que nos recuerda al Nexus 5X.
Este nuevo equipo marca un regreso hacia la disposición clásica de botones de volumen, posicionándolos a un costado y no en la parte trasera como era costumbre.
Esto coincide con la foto filtrada hace algunos días por un fabricante de fundas y protectores para smartphone, la que compartió sin querer una imagen de uno de sus productos hecho para LG G5. Si lo miras bien, la distribución de partes y piezas del equipo coincide con estas nuevas imágenes.
Mobile World Congress está a la vuelta de la esquina, y ahí veremos cómo termina esta historia que podría marcar el regreso de los equipos insignia de LG a la cita más importante de la industria móvil mundial.