SoftBank prevé la creación de una superinteligencia artificial para 2035, impulsando inversiones masivas en infraestructura tecnológica.
El CEO de SoftBank, Masayoshi Son, reveló que la superinteligencia artificial (ASI), una tecnología avanzada capaz de superar la capacidad cognitiva humana, podría convertirse en una realidad en 2035. Durante su participación en una conferencia en Riad, Son estimó que esta tecnología sería aproximadamente 10,000 veces más inteligente que el cerebro humano. Para hacerla posible, señaló que serán necesarios cientos de miles de millones de dólares en infraestructura, incluyendo centros de datos y chips de alta potencia.
Son explicó que la implementación de la IA generativa requerirá una inversión acumulada de 900 mil millones de dólares, con una buena parte destinada a infraestructura tecnológica. También enfatizó la necesidad de desarrollar una infraestructura robusta y avanzada para soportar el funcionamiento de la superinteligencia artificial, lo cual colocaría a empresas como Nvidia en una posición clave dentro del ecosistema.
Reconocido por sus apuestas tecnológicas audaces, Son compartió que SoftBank mantiene un enfoque decidido en el desarrollo de ASI y en la creación de capacidades a largo plazo en el sector tecnológico. Aunque no detalló el monto exacto de las inversiones futuras, declaró que está acumulando capital para realizar su “próximo gran movimiento” en esta área, lo que reafirma el interés de SoftBank en tecnologías transformadoras para el mercado global.
La trayectoria de SoftBank en el ámbito de inversiones ha sido diversa, en parte debido a su enfoque en empresas emergentes de alto crecimiento. Los Vision Fund de SoftBank, lanzados en 2017 con el respaldo de socios estratégicos como el fondo soberano de Arabia Saudita, se posicionaron como iniciativas de gran escala para apoyar tecnologías emergentes. Sin embargo, estas inversiones también han enfrentado dificultades, como lo demuestran las pérdidas acumuladas de 2,400 millones de dólares registradas hasta junio de 2024. A pesar de estos retos, Son continúa apostando por tecnologías avanzadas que, a su juicio, podrían cambiar el curso de la innovación en el futuro próximo.
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