The Last of Us Part II Remastered llega a PS5 con un nuevo modo de juego roguelike y un montón de opciones dirigidas a los más fanáticos.
The Last of Us Parte II tiene guardado en mi corazón un lugar especial, no solo porque el juego nos encantó en su momento, sino porque además fue el review con el que Pisapapeles inició su recorrido en el mundo de los videojuegos.
Y aunque en el sitio hemos sido gamers toda la vida, solamente desde el 2020 es que nos dedicamos a los videojuegos y aquí estamos casi cuatro años después, al igual que esta versión remasterizada de la segunda parte de la aventura postapocalíptica creada por Naughty Dog para PlayStation 5.
The Last of Us Part II Remastered es el salto más lógico que podría haber hecho Sony con uno de sus videojuegos más exitosos, actualizando a la nueva generación con una mejora en la resolución, añadiendo las funciones correspondientes al hardware del PS5 y un nuevo modo de juego para sacarle jugo al glorioso sistema de combate y, de esta manera, justificar los 10 dólares que cuesta hacer el upgrade desde generación pasada.
¿Es necesario un remaster de un juego tan reciente? Seguro que muchos se hacen esta pregunta, sobre todo si consideramos que el título era uno de los juegos que Sony había actualizado para funcionar a mayor tasa de refresco en PlayStation 5.
Los remasters son la excusa perfecta para llevar juegos de la pasada generación a la consola actual, tal y como lo hacen muchos otros estudios. En el caso de The Last of Us, hay que considerar que Sony busca aprovechar la creciente popularidad de la franquicia gracias a la serie de HBO y su segunda temporada, ya confirmada. Además, lo lógico es que en un futuro próximo veamos este título en PC, tal y como lo hicieron con el primer juego. Este lanzamiento no busca más que pavimentar dicho camino.
Obviamente, el trabajo de remasterización de un juego que salió hace solo 4 años se notará mucho menos que en uno lanzado hace más de 10 años, como es el caso de Metroid Prime. Sin embargo, se han hecho algunas mejoras interesantes.
El juego puede correr en resolución 4K nativa en el modo fidelidad a 30 cuadros por segundo fijos, o a 60 cuadros por segundo si reescalamos la resolución 1440p a 4K. También es compatible con la tasa de refresco variable, en caso de que tengas un televisor con dicha tecnología, para llevar los cuadros por segundo aún más alto en el modo fidelidad.
En general el juego se ve mejor que antes, contando con mayor resolución en las texturas, mejores sombras y un mayor detalle en los objetos a distancia, pero creo que se podría haber mejorado aún más, sobre todo en términos de iluminación y trazado de rayos, considerando que juegos como Alan Wake 2 han elevado el nivel en ese sentido.
Además, el juego ahora cuenta con completo soporte para el DualSense y su retroalimentación háptica y gatillos adaptativos. De esta forma, el disparo de cada arma responde de forma distinta en el mando y el gameplay se siente un poco más inmersivo en cada acción.
Es muy difícil valorar un juego como The Last of Us Part II sin entrar en spoilers, y obviamente no lo voy a hacer. Sin embargo, creo que es importante mencionar algo: su narrativa es el único punto negativo en un juego que, por lo demás, tiene un gameplay, actuaciones, sonido y un nivel de desarrollo excepcional en todo sentido. Ojo, su argumento es súper interesante, pero creo que no se tomaron las mejores decisiones a nivel narrativo.
Obviamente, el Remaster no posee ningún cambio en este sentido. Es decir, en esta ocasión continuamos la historia de Ellie y Joel tras los sucesos del primer juego. Ambos se encuentran viviendo de forma estable y en paz en Jackson, a pesar de la amenaza constante de los infectados. Allí conviven con Tommy (el hermano de Joel) y algunos amigos de Ellie, como Dina y Jesse.
Como probablemente ya sabrás, el juego no se centra únicamente en ellos. También se nos introduce a Abby, la co-protagonista de la historia, quien busca proteger a su grupo de seres queridos, que forman parte de una organización conocida como WLF.
Unos eventos extremadamente violentos provocan que estos personajes se embarquen en un viaje emocionalmente intenso. En este, el «amor» que afloraba en el primer juego pasa a un segundo plano, dando paso al odio, la violencia y a todas las consecuencias que esto tiene en los personajes.
Esta es una historia de venganza, que se presenta de forma no lineal y que busca mostrar cómo este sentimiento puede llevar al ser humano a la más profunda decadencia, incluso en un mundo donde la humanidad ya se encuentra en la misma decadencia.
Pero, como ya les decía, no se puede entrar en más detalles. Por lo tanto, me voy a centrar en el aspecto más destacado de The Last of Us Parte II: su gameplay, y en esta ocasión se ha tomado su sistema de combate para crear un nuevo modo de juego.
Si eres de los que ya ha jugado a The Last of Us Part II, probablemente el primer añadido que podrías pensar en probar son los comentarios de los desarrolladores. Esta función nueva me ha encantado y ha generado que me den ganas de volver a jugarlo, a pesar de ya haberlo hecho dos veces en su lanzamiento.
Con esta opción activada, podremos escuchar los comentarios de los desarrolladores en medio de las cinemáticas del juego. Estos, de alguna forma, ayudan a entender mejor las decisiones de los personajes y la narrativa de la historia, al poder escuchar al director, actores y guionistas hablar de por qué se tomaron ciertas decisiones en la trama o determinadas direcciones en el desarrollo de los personajes.
Los comentarios están bien implementados, apareciendo de forma oportuna durante las escenas más icónicas del juego. Así, podemos oír a los actores cómo se prepararon o qué pensaron cuando actuaban escenas que sabían que causarían impacto en los jugadores. Claramente, es una opción para los más fanáticos, pero en general todo el contenido extra del juego está pensado para quien ya ha completado el juego alguna vez.
El otro contenido extra de The Last of Us Part II Remastered son los Niveles Perdidos, que, tal y como el nombre lo indica, son niveles que originalmente iban a estar incluidos en el juego, pero se decidió eliminarlos por diversos motivos, como para dar una mayor agilidad a la historia o no hacer tan largos ciertos momentos del juego.
Son tres los niveles que se pueden experimentar en fases muy tempranas del desarrollo del juego: las alcantarillas, la fiesta de Jackson y la cacería. El director, Neil Druckmann, hace una pequeña introducción en video comentando en qué consistían estos niveles, en qué momento del juego estaban pensados originalmente y por qué se decidió removerlos.
No creas que hay mucho material aquí. Esto es solo un contenido extra que te tomará 20 minutos en completar, pero que sin duda me deja pensando que hay muchos sucesos que no conocemos durante el lapso de tiempo que abarca esta segunda parte, que podrían haberse contado para enmendar algunos errores de guión.
No me cabe duda de que esto es algo que harán en la segunda temporada de la serie de HBO, porque el gameplay de The Last of Us Part II es tan extraordinario en todo sentido, que se termina perdonando esos errores del equipo narrativo. Sin embargo, en una serie no se pueden tolerar.
Otro pequeño detalle es el modo Tocar la guitarra, que toma el mismo minijuego de guitarra presente en la historia principal. En este modo, puedes tocar libremente las notas de la guitarra con Ellie, Joel o Gustavo Santaolalla, el compositor de la excelente banda sonora de The Last of Us. Y eso no es todo: lo más interesante es que se puede cambiar el tipo de instrumento y el efecto que hace, como si estuviésemos utilizando un pedal.
Sin duda, el modo Sin Retorno es donde se ha puesto más trabajo. En este nuevo modo, deberemos empezar una carrera y superar diferentes encuentros aleatorios hasta llegar al final sin morir. Si morimos, volvemos al inicio perdiendo todo el progreso conseguido.
Este género se conoce como roguelike. En él, se suelen desbloquear nuevas opciones a medida que progresamos en las diferentes carreras. En este caso, con cada carrera podremos desbloquear nuevos personajes, que se diferencian en su estilo de juego, y nuevos modificadores, que son probablemente la parte más entretenida de Sin Retorno.
Para cada carrera, tendremos la posibilidad de elegir entre 10 personajes con características distintas en su estilo de juego. Por ejemplo, Ellie es equilibrada, Dina es especialista en fabricación (por lo que tendrá mayor acceso a bombas), mientras que Abby tiene un estilo de juego de combate cuerpo a cuerpo. Al principio, solo estarán disponibles Ellie y Abby, pero se puede jugar con todos los personajes a los que se les ve combatiendo en el juego.
Existen cuatro tipos de encuentros: Asalto, Caza, Captura y Resistir. En cada uno de ellos, deberemos combatir contra distintos enemigos, con diferentes reglas y en mapas que ya conocemos de la historia principal, pero que cuentan con variaciones para adaptarlos al diseño que requiere un combate.
Con los modificadores, podremos enfrentarnos a encuentros con opciones que no vemos en la historia principal, ya que se alejan de la realidad. Por ejemplo, podemos encontrar carreras en las que los enemigos se les prende fuego al golpearlos en combate cuerpo a cuerpo, o también que los enemigos dejen caer bombas de proximidad al derrotarlos, creando así cadenas de eliminaciones.
Hay una gran variedad de modificaciones, desde las ya comentadas, que son más simples, hasta algunas en las que los enemigos se vuelven invisibles, lo que hace más difíciles las carreras a cambio de mayores recompensas. Sin embargo, como en todo roguelike, las modificaciones y recompensas dependen de los encuentros que vayamos eligiendo en nuestra base, que nos darán diferentes ramas de mejora.
Eso sí, me parece un poco flojo que no haya querido contarse ningún tipo de historia en el modo. The Last of Us y Naughty Dog son lo que son, en gran parte, por las historias que cuentan y todo el aspecto cinematográfico que tienen sus juegos, y creo que este mismo modo de juego podría haberse aprovechado para explorar aspectos que no necesariamente están relacionados a los protagonistas o, quizás contar algo del mundo de The Last of Us que no conozcamos.
A pesar de eso, Sin Retorno hace un buen contraste con la historia principal y se siente como un nuevo aire para el juego. Es decir, sirve para hacer brillar el sistema de combate, desbloquear nuevos cosméticos y la posibilidad de jugar con personajes que en la historia de The Last of Us no habíamos podido utilizar nunca.
Este modo de juego está disponible desde el momento en que inicias el juego, pero lo lógico es jugarlo después de jugar la historia principal para poder estar familiarizado con el gameplay.
The Last of Us Parte II Remastered es solamente un paso más en el camino que ha trazado Naughty Dog y Sony para esta franquicia, que nos ofrece las mejoras esperadas de la generación actual, nuevo contenido para los más fanáticos y un nuevo modo de juego que saca provecho de todo lo bueno que se hizo en el juego original.
Sin Retorno es un modo desafiante que consigue aprovechar de excelente forma el sistema de combate, sigilo y el diseño de niveles del juego, mientras que los comentarios de los desarrolladores han hecho que jugar la historia por tercera vez sea una experiencia distinta e igualmente disfrutable.
La secuela de The Last of Us es una obra maestra muy controversial, y lo seguirá siendo siempre, por lo que el estudio está pavimentando el camino para el futuro de la franquicia, ya sea con un futuro lanzamiento en PC, la segunda temporada de la serie de HBO o, por qué no, una tercera parte de la historia de Ellie.