Review del Moto G34 5G: diseño, rendimiento, cámaras, autonomía y conectividad, en un análisis detallado y honesto.
Hace unos días te conté todo sobre el Moto G24 Power, y ahora le toca el turno a su hermano mayor, el Moto G34 5G. Si ya leíste el otro review, te voy avisando desde ya: vas a encontrar muchas similitudes. Tranquilo, no es que me haya puesto en modo “copiar y pegar”, pero la realidad es que aunque algunas cosas no sean técnicamente idénticas, en la práctica… lo son.
El Moto G34, por el precio que tiene, es de esos dispositivos que te dan ganas de decir: “Oye, ¿por qué no me lo compré antes?”. Y sin más preámbulos, vamos al grano, que aquí vinimos a hablar del personaje antes mencionado.
Como ya es costumbre en mis reviews, me doy una vuelta por la web oficial de la marca para ver qué tanto nos prometen. Es como el tráiler de una peli: mucho bombo, pero a veces la peli no cumple. Así que vamos a ver si Motorola se queda solo en palabras bonitas o si lo que dice realmente se nota.
Motorola se pone romántico con el diseño, pero ya sabemos que eso del diseño es como el helado: cada quien tiene su sabor favorito. Luego le dan bastante importancia a que el equipo es repelente al agua (cuidado, no es lo mismo que sumergible), y nos tiran un guiño con eso del “audio avanzado” y el “sonido con calidad de estudio”. ¿Será para tanto? Veremos.
En cuanto a la cámara, se emocionan hablando de la tecnología Quad Pixel, prometiendo fotos nítidas tanto de día como de noche. Todo suena muy bien.
Eso es lo que hay. Nada que nos haga saltar de emoción, pero ya veremos si al menos cumplen con lo que prometen.
No me voy a poner a dar vueltas con tanto detalle, así que vamos al grano: cuando abras la caja, esto es lo que te vas a encontrar. Obviamente, el dispositivo, cómo no. Y, como siempre, con su funda protectora incluida, porque ya sabes que de eso no nos pueden fallar. Los típicos papelitos de guía rápida y seguridad que nunca lees, la llave para la SIM, el cargador de… ¡20W! Sí, solo 20, no pidamos más. Ah, y el cable USB a USB-C, que tampoco puede faltar.
Lo que digo siempre: agradezco de corazón que todavía incluyan la funda y el cargador con su cable. Ya con eso, al menos, se anotan un punto.
De entrada te lo suelto: el diseño me gustó. Pero claro, es cuestión de gustos. Y ya que hablamos de gustos, el color que tuve en mis manos fue el Verde Océano, con un acabado en cuero vegano. Confieso que soy fan de este material por dos razones: tiene ese toque más “premium” y al tacto es muy agradable.
¿Y qué tal la construcción? Aquí va la verdad: me encantó. Eso sí, dejando de lado los groseros bordes superior e inferior de la pantalla, que, a ver, no es algo que te quite el sueño, pero ahí están. Dicho eso, el teléfono en mano se siente bien acabado, de esos que da gusto sostener.
Y ojo con este pequeño gran detalle: los botones de volumen. Se sienten como de alta gama. No, no exagero. Es un detallito que puede parecer insignificante, pero cuando los presionas, casi no sientes el clic, como si estuvieran acolchados. No pasa lo mismo con el botón de bloqueo, que sí tiene ese clic típico. ¿Es algo determinante para comprártelo? Pues no. Pero ahí tienes el dato.
Ahora te hago el tour por los laterales: a la derecha, lo de siempre, los botones de volumen y el de bloqueo (con huella incluida). Arriba, la inscripción de Dolby Atmos y un micrófono. En la parte izquierda, la ranura para la SIM. Y en la parte inferior, lo habitual: entrada jack de 3.5 mm, micrófono, puerto de carga y altavoz principal.
Y aquí va un detalle que no tiene tanto que ver con el diseño del teléfono en sí, sino con la funda protectora: el recorte para el botón de bloqueo no tiene el espacio suficiente para usar la huella cómodamente. A veces, cuesta desbloquearlo al primer intento. No es que te arruine la experiencia, pero habría sido genial que la funda permitiera usar la huella sin tener que buscarle el ángulo perfecto. Quizá solo me tocó una funda menos acertada, pero ahí está la observación.
Para ilustrarlo mejor, te dejo una imagen de ambos dispositivos: el Moto G34 5G (arriba) y el Moto G24 Power, cada uno con su funda. Así puedes ver por ti mismo cómo el recorte de la funda del G34 es más pequeño y ajustado al botón de la huella, lo que puede dificultar un poco el desbloqueo. No es el mayor problema del mundo, pero sí un detalle que puede volverse incómodo. Tal vez tuve la mala suerte con esta funda, pero así están las cosas.
El Moto G34 5G viene con una pantalla de 6.5 pulgadas tipo LCD, con una resolución HD+ de 720 x 1600 píxeles y una tasa de refresco de 120Hz. Nada mal, ¿verdad? Tiene una densidad de 270 ppi y 550 nits de brillo, suficiente para no andar achinando los ojos. Y sí, si leíste el review del G24 Power, verás que son casi gemelos, salvo por un detallito: la tasa de refresco. Ya sabes, entre 90 y 120Hz hay 40Hz de diferencia que se notan, sobre todo en la fluidez cuando navegas. No estamos descubriendo América aquí, pero oye, por el precio (que ya hablaremos de eso al final), es algo que suma.
Eso sí, no esperes un panel con colores que te exploten en la cara, pero, de nuevo, no olvidemos la gama del equipo. Para lo que cuesta, está bastante bien.
El motor del Moto G34 5G es el Qualcomm Snapdragon 695 5G, y te lo digo desde ya: todo va bastante fluido. Sí, ya sabemos que no es el más nuevo del mundo, pero créeme, para este equipo va sobrado. Le acompañan 8GB de RAM y 256GB de almacenamiento, así que tienes espacio y velocidad para rato.
Ahora, no te estoy contando ninguna novedad: este procesador tiene casi tres años en el mercado. Podrías pensar que ya va lento, pero honestamente, va muy bien. A diferencia del G24 Power, el Moto G34 5G no tiene esos momentos incómodos de lageo. Claro, si lo comparas con un procesador más reciente, verás diferencias, pero dentro de lo esperado, el S695 5G cumple con creces.
Mi uso típico es el de siempre: mensajería, redes sociales, uno que otro juego, streaming, música y esas cosas. Y te aseguro que el procesador junto con los 8GB de RAM hacen un muy buen equipo. Ahora, si lo que quieres es llevar el dispositivo al extremo, seguro no será el más fluido del mundo, pero para el día a día, sin exigirle mucho más, el teléfono responde y hasta te deja contento. No olvidemos para qué segmento está hecho: es un buen celular que cumple y, me atrevo a decir, incluso sorprende un poquito.
Sobre la RAM extra, bueno, ya sabemos cómo va: es virtual. Puedes elegir entre 2 y hasta 8GB adicionales. Y aunque está bien tener esas opciones, la verdad es que no notas una diferencia brutal en el rendimiento. De fábrica venía con 4GB extra activados, y así funcionaba de maravilla. Probé los 12GB, y como te imaginarás, no es que el teléfono despegara en un cohete. Siempre he pensado que la RAM virtual es más un truquito para vender, pero bueno, ahí está. Con los 8GB reales que trae, va de lujo.
Ahora, sobre los juegos: lo de siempre. Juegos como 8 Ball Pool, Clash Royale, eFootball y Asphalt 8. No son juegos pesados, pero tampoco son una broma. Son los que suelo usar, porque tampoco me pongo a meterle juegos ultra gráficos solo para ver si el celular colapsa. La idea es darte la perspectiva de un usuario común. Y para la gama a la que pertenece, esos juegos corren de maravilla.
¿Rinde? Sí, señor. Para su segmento y para el uso que le di, anduvo más que bien.
El Moto G34 5G viene con Android 14 y la capa de personalización MyUX. Y aquí, Motorola sigue en su línea de siempre: una experiencia limpia, muy cercana a Android puro, lo que es una gran ventaja, especialmente en un equipo como este. Esa ligereza se nota y le viene de maravilla, porque así no tienes que lidiar con bloatware innecesario ni cosas que solo ocupan espacio y ralentizan todo.
Ahora, hablemos de futuro. Como suele ser la norma, el Moto G34 5G debería recibir Android 15 cuando llegue, además de tres años (en teoría, al menos) de actualizaciones de seguridad. Claro, eso es lo que promete Motorola. Habrá que ver si lo cumplen al pie de la letra, pero en general la marca ha mantenido su palabra en este aspecto.
Lo que me gusta de esta apuesta por un sistema operativo tan limpio es que se enfoca en lo que importa: estabilidad y funcionalidad. Aquí no hay florituras innecesarias ni menús que te hacen perder tiempo. Todo está donde tiene que estar, y responde bien. ¿Hay margen de mejora? Claro, siempre lo hay. Por ejemplo, podría tener más opciones de personalización, como algunas otras capas más cargadas. Pero la verdad es que eso no empaña para nada la experiencia global. Al contrario, la sencillez le suma puntos, especialmente si lo que buscas es un teléfono que no te complique la vida.
Además, con MyUX, tienes esas pequeñas pero útiles funciones que Motorola añade sin cargar el sistema. Cosas como los gestos para activar la linterna o la cámara con un par de movimientos rápidos, que son súper prácticas y no necesitas un manual para aprender a usarlas. Funcionalidades que, aunque parezcan detallitos, cuando las usas, las echas de menos en otros equipos.
En resumen, el Moto G34 5G opta por un sistema operativo limpio, que prioriza la estabilidad y la funcionalidad, y en eso sobresale. No estamos hablando de una interfaz revolucionaria, pero sí de una que te da justo lo que necesitas sin más vueltas.
El Moto G34 5G viene con una cámara principal de 50 megapíxeles y una apertura de ƒ/1.8. Lo interesante aquí es que, aunque captura fotos de 12.5 MP gracias a la tecnología de combinación de píxeles (que convierte cuatro píxeles en uno grande), el rendimiento en poca luz mejora bastante. Ahora, si ya conoces otros modelos como el Moto G14 o G24, esto no te va a sorprender, porque llevan exactamente el mismo sensor. Nada nuevo bajo el sol.
Fotografías cámara principal
Además, el módulo de cámaras incluye una macro de 2 MP con apertura ƒ/2.4, para esos primeros planos extremos. Ahora bien, con tan poca resolución y sin un ultra gran angular, la versatilidad se queda corta, en comparación a otros equipos.
A plena luz del día, la cámara principal del Moto G34 5G hace un trabajo aceptable, considerando que estamos hablando de un equipo de este segmento. Las fotos muestran colores vivos y un buen nivel de detalle, sobre todo en áreas como las nubes. Claro, si lo comparas con un gama alta, el nivel de detalle no es el mismo, pero oye, por el precio está bastante bien. Eso sí, tiende a sobreexponer en algunas tomas, especialmente cuando hay mucha luz, lo que puede hacer que se pierda algo de detalle. En condiciones más nubladas o no tan ideales, la cámara sigue haciendo un buen trabajo manteniendo el ruido bajo control.
Fotografías con zoom
En entornos con poca luz, la cámara sigue rindiendo decentemente para su rango de precio. Las fotos se aclaran lo suficiente, aunque, como es obvio, no puede competir con los dispositivos de gama alta. A veces puede sufrir de subexposición, lo que hace que las fotos salgan más oscuras de lo que deberían. En general, su rendimiento nocturno es decente, aunque con más ruido en escenas mal iluminadas, y el posprocesado no es tan agresivo como en cámaras más potentes.
Fotografías nocturnas
La cámara macro de 2 MP… es funcional, pero básica. Para que salga una buena foto, tanto tú como el objeto que fotografíes tienen que estar absolutamente inmóviles, porque esta cámara tarda lo suyo en hacer la toma, y desenfoca con facilidad. Sinceramente, este lente no añade gran valor al conjunto y probablemente podrían habérselo ahorrado para mejorar otros aspectos del equipo.
Fotografías Modo macro
En cuanto a video, el Moto G34 5G graba a 1080p y 30 fps. La calidad es buena, el enfoque automático y el ajuste de brillo son rápidos y fluidos, pero no esperes maravillas en condiciones de poca luz. El detalle se pierde, y la imagen tiende a moverse demasiado.
Prueba de video sin estabilizador
Prueba de video con estabilizador
Ahora, la cámara frontal es de 16 MP con apertura ƒ/2.4, perfecta para buenos selfies en condiciones de luz decentes. Aunque en las áreas más oscuras puede perderse algo de detalle, la nitidez general es adecuada y puedes ampliar las fotos sin perder demasiada calidad.
La app de la cámara del Moto G34 5G sigue la clásica disposición de Motorola, con los modos fotográficos bien organizados y opciones ajustables. Puedes reorganizar los modos a tu gusto, y la cámara macro es accesible directamente desde la interfaz con el ícono de una flor, por si te animas a usarla.
Modos y ajustes de cámara
El Moto G34 5G viene con una batería de 5000 mAh, algo que ya es casi estándar en Motorola, pero no por eso deja de ser una gran ventaja. Para un equipo de gama media-baja, esta capacidad te garantiza una buena autonomía. Hablamos de que, con una sola carga, te dura tranquilamente un día completo. Y si lo usas con un poco más de moderación, te puede aguantar hasta dos días sin pestañear. Todo depende de cuánto le exijas, claro.
A ver, no es la carga más rápida del mundo, pero, siendo sinceros, para un equipo de este rango está más que bien. En media hora recuperas aproximadamente un 20 % de batería, y en una hora, algo más del 40 %. Si quieres una carga completa, prepárate para esperar más de 2 horas, que es aceptable para su categoría; o quizá no, dependiendo de la urgencia que tengas.
¿Es perfecta? No. La velocidad de carga es modesta, y no esperes maravillas como la carga inalámbrica o la carga inversa. Pero, seamos honestos, con este precio y esta gama, tampoco era de esperar. Lo importante es que la batería aguanta como una campeona y te da lo que necesitas sin dramas.
En cuanto a conectividad, el Moto G34 5G ofrece exactamente lo que esperarías en un dispositivo de esta gama: WiFi 2.4/5 GHz, compatibilidad con Red 5G, Bluetooth 5.1 y NFC. Nada fuera de lo común, pero tampoco le falta nada de lo importante.
Ahora, lo que sí quiero destacar y agradecer es la entrada jack de 3.5 mm para audífonos. Como ya mencioné antes, valoro muchísimo la flexibilidad de poder elegir entre audífonos con cable o inalámbricos, y la presencia de esta opción en el Moto G34 5G me parece un gran acierto. En un mundo donde muchos fabricantes han decidido eliminar esta característica, tenerla aquí es un detalle que le suma versatilidad al equipo, sobre todo si eres de los que todavía disfruta usar audífonos con cable, como yo. Es de esas cosas que parecen pequeñas, pero que hacen la diferencia.
El Moto G34 5G te ofrece sonido estéreo, utilizando el altavoz principal, situado en la parte inferior, y el auricular sobre la pantalla. ¿Estamos hablando de calidad de gama alta? Pues no. Pero aún así, a volumen máximo, se escucha bastante potente y, lo más importante, claro. Las voces se distinguen sin problema y la música suena decente. Eso sí, el sonido puede ser un poco agudo y, si te gusta la música rica en bajos, notarás que los graves y los medios bajos no tienen tanta presencia. Pero, para lo que cuesta, el sistema cumple.
Ahora, cuando conectas unos buenos auriculares, ya sea por el puerto de 3.5 mm o vía Bluetooth, la cosa cambia. La experiencia mejora bastante, el sonido es más claro, y dependiendo de los auriculares que uses, los graves se sienten más profundos. Aquí el Moto G34 5G demuestra su versatilidad, porque es compatible con una amplia variedad de códecs de audio. Admite los más comunes, como aptX, SBC y AAC, además de otros más avanzados como Opus y LC3. Para los más exigentes, también soporta códecs de alta resolución como LHDC V3/V4 y LDAC, lo que asegura una experiencia auditiva de calidad superior, siempre que tengas los auriculares adecuados.
El sonido estéreo del dispositivo es funcional, claro, sobre todo para escuchar voces. Pero, si realmente quieres sacarle el jugo a la calidad de audio, lo ideal es usar auriculares. Ahí es donde el Moto G34 5G destaca por su compatibilidad con tantos códecs y la capacidad de mejorar los graves con dispositivos externos. Vamos, que el equipo no te va a fallar si te gusta disfrutar de una buena sesión musical.
El Moto G34 5G viene con un lector de huellas en pantalla. Ahora, no voy a mentirte: es funcional, pero no es el más rápido del mercado. No es que tengas que esperar una eternidad, pero sí hay un pequeño retraso en la lectura. No es algo que te vaya a desesperar, pero si ya has usado varios dispositivos, te darás cuenta de esa pequeña diferencia. Eso sí, puedes registrar hasta cinco huellas diferentes, lo cual siempre es útil.
Además, el dispositivo incluye reconocimiento facial 2D. Ya sabes, no soy muy fan de este tipo de desbloqueo porque es más vulnerable, pero por el precio del equipo, no podíamos esperar un reconocimiento facial 3D. Lo curioso aquí es que el desbloqueo facial va más rápido que el de huella. Tiene un buen ángulo de captura, así que no necesitas tener el teléfono justo frente a la cara para que funcione. Se agradece la rapidez.
Una función destacada es la app Moto Secure, que te permite proteger archivos o aplicaciones usando un patrón de desbloqueo alternativo o la huella dactilar. Y ojo con esto: la opción de detección de phishing es muy relevante hoy en día, con todo lo que pasa en el mundo de los fraudes digitales. Además, el Moto G34 5G incorpora ThinkShield, que ofrece seguridad tanto a nivel de hardware como de software, una capa extra para mantener tus datos seguros. Vale, siempre habrá vulnerabilidades, pero tener estas funciones es un plus.
Otra característica interesante es Family Space. Esta app te permite crear perfiles con acceso a ciertas aplicaciones específicas, ideal si compartes el teléfono con otros. Puedes restringir el acceso al resto del sistema, poner temporizadores y límites de uso, y para salir de un perfil se necesita la verificación con la huella dactilar. Además, te permite rastrear la ubicación de los miembros de tu grupo familiar, lo cual no está nada mal si necesitas tener un poco más de control sobre quién usa el dispositivo y cómo.
✅ Pantalla fluida y buen diseño: La tasa de refresco de 120Hz le da una gran fluidez al uso diario, y el acabado en cuero vegano le añade ese toque premium que se siente bien en mano.
✅ Autonomía sólida: La batería de 5000 mAh garantiza hasta dos días de uso moderado, un gran punto a favor para quienes odian estar siempre cerca de un cargador.
✅Opciones de conectividad y sonido versátil: La inclusión del jack de 3.5 mm y la compatibilidad con códecs de alta calidad como LDAC hacen que la experiencia sonora con auriculares sea muy buena.
❌ Lector de huellas algo lento: Funciona, pero tiene un pequeño retraso que puede ser frustrante para los más exigentes.
❌ Sonido sin graves y cámara macro poco útil: Aunque el sonido estéreo es claro, carece de graves, y la cámara macro de 2 MP añade poco valor al conjunto.
❌ Velocidad de carga modesta: Aunque el cargador de 20W es suficiente, las 2 horas y 15 minutos que tarda en una carga completa pueden sentirse lentas en comparación con otros dispositivos más rápidos.
En la página oficial de Motorola, el Moto G34 5G lo encuentras a un precio de $129.990. Y ojo, está disponible en tres colores: Azul Ártico, Negro Meteorito y Verde Océano (el que tuve en mis manos). En cuanto a la configuración de memoria, no hay muchas vueltas: tienes una única opción con 256 GB de almacenamiento y 8 GB de RAM, más que suficiente para la mayoría de los usuarios.
El Moto G34 5G es, en pocas palabras, un equipo que cumple y hasta sorprende en algunos aspectos para su rango de precio. Por $129.990, obtienes una pantalla fluida con 120Hz, un diseño que se siente bien en la mano (sobre todo en el Verde Océano con ese toque en cuero vegano), y una autonomía sólida gracias a su batería de 5000 mAh, que te puede durar hasta dos días con un uso moderado.
Si bien el lector de huellas no es el más rápido, la combinación de 8 GB de RAM y 256 GB de almacenamiento lo hace lo suficientemente ágil para el uso diario. Además, es de agradecer la inclusión del jack de 3.5 mm y la compatibilidad con códecs de audio de alta calidad, lo que mejora la experiencia si usas buenos auriculares.
En cuanto a la cámara principal de 50 MP, ofrece buenos resultados en condiciones de luz adecuadas. Sin embargo, la cámara macro se siente más como un extra innecesario. Y aunque la velocidad de carga no es impresionante, cumple para un equipo de esta gama.
En resumen, el Moto G34 5G es una excelente opción para quienes buscan un teléfono confiable, con buen rendimiento y algunas funciones que suelen verse en gamas más altas, sin gastar una fortuna. No será el rey de la velocidad ni de la fotografía, pero para lo que cuesta, es una apuesta segura.