El proceso de estandarización que comienza hoy se espera que esté concluido antes del 2030 cuando ya estemos hablando del 6G.
Los procesos para estandarizar una tecnología, y por ende hacer que llegue a todos, requieren de un trabajo mancomunado de los fabricantes, reguladores y las mismas operadoras. Para el 5G, que actualmente está siendo desplegado, su estándar se fijo en la release 15 de 3GPP y se acaba de incorporar la 16.
Una vez hecho aquello, la academia junto a los reguladores e industria han comenzado un «proceso de reflexión y definición de los objetivos de la siguiente generación, la 6G», asegura el profesor de los Estudios Informática, Multimedia y Telecomunicaciones de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC), Ferran Adelantado.
Según sostiene el académico, la pregunta que ha surgido en la comunidad científica es: ¿Cuáles serán las necesidades de la sociedad en el año 2030 y cómo serán capaces de responder a ellas las redes de comunicación móvil?. «La industria contempla que 6G deberá dar respuesta a escenarios mucho más extremos», señala Adelantado.
Si la red 5G busca dar mayor velocidad de transmisión e incremento en el número de dispositivos conectados, se cree que 6G deberá crear «la réplica digital» la que ayudará a integrar procesos reales, de comunicación y fabricación, así como también la automatización de las cosas o la predicción de errores. Así como también la incorporación de servicios de realidad virtual, aumentada y mixta.
En cuanto a avances, preliminarmente se espera que la red 6G cuente con un despliegue rápido y automatizado, un mayor acoplamiento entre la red troncal, capacidad computacional y de almacenamiento a lo largo de la red y nuevas bandas de frecuencia entre los centenares de GHz y THz.
El proceso de estandarización que comienza hoy se espera que esté concluido antes del 2030 cuando ya estemos hablando del 6G.
¿Qué esperas de la sexta generación o 6G?