Ven a conocer varios escenarios de uso para un reloj con conectividad LTE, en este caso, un Samsung Galaxy Watch4 con LTE. ¿valdrá la pena?
Hace varios años atrás, los primeros relojes inteligentes que usaban conectividad móvil lo hacían a través de una tarjeta SIM física. No obstante, hoy estos dispositivos poseen una tarjeta SIM electrónica o también llamada eSIM, la cual nos provee de un número telefónico para hacer llamadas y usar datos móviles bajo redes 3G o 4G. Pues bien, el día de hoy les contaremos nuestra experiencia utilizando un smartwatch que incluye conectividad móvil. En este caso, es el Samsung Galaxy Watch4 con LTE.
Acá en Pisapapeles realizamos un completo análisis al Samsung Galaxy Watch4 con WiFi en su versión de 44 mm. Si quieres saber más detalles sobre este reloj, puedes echar una mirada a nuestro review que te dejamos a continuación.
¡Comencemos!
Al comenzar nuestra experiencia con un reloj con LTE, debemos elegir el operador adecuando que soporte este tipo de tecnología. Actualmente, en Chile hay varios operadores que ya permiten el uso de una eSIM en teléfonos móviles como entel, WOM o Movistar. Pero sólo una compañía permite usar el servicio en otros dispositivos que no sean teléfonos, como es el caso de un reloj inteligente o una tablet con datos móviles. Por lo que, de momento tuvimos que recurrir a la compañía Movistar, quién es la única que cumplía con dicha compatibilidad.
El proceso de activación de los datos móviles en el reloj parece ser sencillo, pero no es tan así.
Primero, debemos tener una línea de Movistar asociada a nuestro teléfono móvil (puede ser un plan o prepago con tarjeta SIM o eSIM). Y a partir de esto, podremos habilitar la eSIM destinada al reloj. Más adelante detallaré esto.
Actualmente mi número principal pertenece a la compañía entel, e igualmente, traté de realizar la activación con el chip entel que tengo en la ranura SIM 1, ya que la aplicación Galaxy Wearable hace una comprobación con el operador móvil y no lo logré, mostrando el siguiente mensaje.
En ese momento, tenía un chip WOM en la ranura SIM 2, y lo mismo ocurre con el operador, quien tampoco es compatible. Como entel (que es mí línea principal) y otras compañías no soportan este tipo de dispositivos como wearables con eSIM , tienes tres alternativas para realizar la activación en el reloj:
La primera es realizar portabilidad desde otra compañía (Claro, entel, WOM, etc.) a Movistar para el número principal que estará en tu celular y, adicionalmente, solicitar un segundo plan para el reloj.
Mientras que la segunda opción es no cambiarse de compañía (como fue en mi caso, ya que esto es sólo con fines experimentales), y si tu teléfono es dual SIM, puedes buscar una promoción 2 x 1 en planes de Movistar. Según me comentaron los ejecutivos de la sucursal ubicada en el Boulevard al costado del Mall PLaza Vespucio, para poder contratar una eSIM, los planes compatibles son desde el M o superiores, así que tuve que contratar el plan M en 2 x 1 pagando un valor final de 15.990. En dicha oportunidad pedí una SIM (física) para usarla en el teléfono y la eSIM (virtual) para el reloj, la cual viene en un QR impreso en una tarjeta plástica como esta.
La tercera opción tiene y no tiene algo de sentido, ya que si sólo quieres contratar un plan para el reloj, puedes comprar un chip Movistar prepago el cuál servirá para tu celular, y después solicitar una eSIM en la compañía. El problema es que estarás pagando los 15.990 del plan M para sólo una línea, así que mejor es aprovechar el 2×1 por ese precio. De todas formas, consultamos en Movistar si existen planes específicos para wearables que podrían ser más baratos, y nos dijeron que existía el famoso «plan multimedia R» con 1GB de datos y 100 minutos por 3.990, pero en la sucursal desconocieron completamente la existencia de esto, por lo que probablemente existan más adelante.
Entonces, una vez que ingresada la tarjeta SIM Movistar prepago al equipo (por suerte uso uno dual SIM), ahora si la aplicación nos deja avanzar en la configuración del plan móvil para el reloj haciendo uso del código QR.
Lógicamente con el reloj conectado y vinculado a nuestro teléfono mediante Bluetooth, para activar el plan, debemos ir a la aplicación Galaxy Wearable. Luego vamos al menú Ajustes del reloj.
Después bajamos hasta el apartado de Planes móviles, y al presionar en dicha opción.
Nos preguntarán sobre cual tarjeta SIM del teléfono queremos trabajar la activación del código QR para el reloj, en este caso seleccionamos Movistar (ubicada en la ranura SIM 2).
Cuando finalice la comprobación del operador, la aplicación nos dará la opción de escanear un código QR, y es en ese momento, donde agregamos el código presente en la tarjeta. Cuando finalice la operación la aplicación nos da la bienvenida y veremos algo como la siguiente captura.
A continuación, otra captura del apartado de información de la red conectada y los dispositivos que estamos usando.
Parece ser algo enredado, pero al momento de ingresar el código QR en la aplicación del Galaxy Watch4, debemos tener claro lo siguiente: El código QR (destinado al smartwatch) se debe ingresar solamente en la aplicación Galaxy Wearable , y por ningún motivo en los ajustes del teléfono. Si no quedaremos con el plan asociado al teléfono celular y tendremos que acudir nuevamente a la compañía para solicitar otro código QR.
Si todo resulta bien, por fin tendremos habilitada la conectividad móvil LTE en el reloj.
Por supuesto me habría gustado que se pudiera clonar la eSIM del teléfono y extenderla hacia el reloj, como si ocurre en los dispositivos de Apple, pero lamentablemente no es así, al menos por el momento. Así que el número del teléfono es distinto al del reloj.
Sabemos que adquirir un reloj con LTE tiene un valor adicional en relación con la versión estándar, al menos en precio. Sin embargo, a todos nos queda la duda: ¿valdrá realmente la pena?
Uno de los principales argumentos que sustenta la conectividad de datos móviles es una total independencia con respecto al teléfono. De todos modos, te contaremos algunos escenarios.
El primero de ellos es el uso de llamadas al igual que un teléfono celular. Al tener su propio IMEI y número telefónico mediante la eSIM, el dispositivo tiene una completa autonomía. Además, el reloj dispone de su propia aplicación de teléfono para digitar el número y llamar. Puede parecer incómodo, pero es bastante sencillo.
Así mismo, podremos usar los datos móviles para nuestras sesiones de entrenamiento. Si bien el reloj posee un GPS integrado, el mismo puede utilizar el 3G o 4G para triangular y entregar una mejor precisión a la hora de ubicarnos en el mapa.
En línea con lo anterior, al momento de realizar ejercicios podremos sincronizar inmediatamente la información que vamos generando con el entrenamiento al finalizar la sesión.
Otro escenario de uso es para la música. Mediante la aplicación de Spotify y la utilización de la red móvil, podremos escuchar nuestras canciones favoritas por streaming. Ya sea en nuestras sesiones de entrenamiento, mientras viajamos, o simplemente cuando estamos en casa. Igualmente, se puede escuchar la música por el altavoz que trae incorporado el dispositivo, o bien, se pueden usar audífonos Bluetooth conectados al reloj.
Del mismo modo, si estás perdido o quieres llegar a una dirección, puedes utilizar Google Maps para llegar a dicho destino. Podrás escribir manualmente la dirección, utilizar la voz para dictar o las últimas indicaciones en el historial.
Si tienes aparatos inteligentes en tu casa como luces, enchufes inteligentes (sí, uno de los mejores inventos para prender el calientacamas cuando es tarde, hace frío y estas a varios minutos de tu casa), o lo que sea, podrás activarlos directo desde el reloj a través de los datos móviles.
Por otra parte, una función interesante son los pagos móviles. En las generaciones anteriores esta característica estaba deshabilitada por temas de compatibilidad bancaria, de marca y región. Hoy en día tenemos a Google Pay funcionando a plena marcha en los teléfonos con Android. Y gracias a WearOS también podemos disfrutar de esta función en nuestro smartwatch.
Si tienes un reloj sólo con Bluetooth, estarás obligado a mantenerte conectado al teléfono celular para obtener la conectividad a internet y realizar la transacción. Mientras que en un reloj con LTE, esto se puede hacer de forma totalmente independiente. Así que, si sales a comprar y no llevas tu celular, podrás pagar simplemente con la muñeca.
Igualmente, podrás revisar páginas web con el explorador Samsung del reloj, en caso de querer buscar algún dato freak, consultar alguna página con resultados deportivos, o simplemente (sí señor, y lejos el mejor uso) leer nuestro querido Pisapapeles.net. Acá podemos usar el reconocimiento de voz para indicar lo que queremos buscar o dictar las páginas web. Igualmente podemos usar el teclado en pantalla, y el bisel táctil giratorio para navegar con facilidad.
Por último, el Galaxy Watch4 posee el sistema operativo WearOS 3.0, el más reciente de Google. Y eso trae algunas consecuencias un poco negativas, ya que los desarrolladores deberán compatibilizar y migrar sus aplicaciones al nuevo sistema. Un claro ejemplo de esto es Uber, la cual todavía funciona en WearOS 2.0 y no en 3.0. También hay varias apps que todavía no están disponibles en el reloj, pero llegarán con el tiempo, como es el caso del Asistente de Google.
De seguro pensarás que todas estas funciones, sumado al uso de la conectividad LTE generan un alto impacto en la autonomía del dispositivo. Pues te cuento que el gasto de batería no es considerable, limitándose a sólo unos minutos menos de uso (90 aproximadamente). A diferencia de mantener el reloj conectado sólo por Bluetooth al teléfono.
Luego de revisar diversos escenarios de uso para un reloj con conectividad LTE, en este caso un Galaxy Watch4 con LTE. Debo reconocer que, si bien hay algunas utilidades que son netamente triviales como navegar por internet o revisar noticias, pero sí hay otras que son bastante útiles.
Por ejemplo, destaco la posibilidad de escuchar música por Bluetooth durante una sesión de ejercicio, un viaje corto en el metro u otra actividad, y sin depender del teléfono móvil. Esta sería una buena alternativa si tienes un celular muy caro y tienes miedo a sufrir de algún robo en la calle, por lo que puedes dejar el teléfono en casa, usar un polerón que cubra la muñeca con el reloj, y salir a trotar más tranquilo.
Otro escenario que me gustó es la posibilidad de hacer llamadas al alcance de la muñeca, olvidándonos del celular. Si eres una persona que llama demasiado por teléfono, esta opción también es muy viable.
Igualmente, recalco el uso de la aplicación de mapas. Esto podría ser de gran utilidad si estamos perdidos en algún lugar, sin nuestro teléfono a mano. O bien, si queremos buscar un lugar urgente como una parada de autobús o una farmacia.
Por, último me parece bastante interesante y práctico el uso de pagos móviles con el reloj, sobre todo si olvidamos nuestra billetera y teléfono al salir a comprar, o simplemente no queremos andar con efectivo.
Uno de los aspectos que falta por desarrollar, es la cantidad de aplicaciones con las que podríamos sacar aún más provecho a la conectividad LTE. Actualmente, el parque de aplicaciones es abundante en WearOS 3.0, pero todavía se puede más, tal y como lo indiqué antes con Uber.
Por último, revisando la diferencia en precio de este mismo reloj (Samsung Galaxy Watch4 de 44mm) en su edición WiFi versus la que tiene LTE. El precio es de 169.990 el normal y 199.990 con LTE, por lo que sólo están separados por CLP $30.000. Si tienes la oportunidad, te recomiendo ir por la versión con datos móviles ya que la diferencia en precio es muy poca. Te recuerdo que en Movistar (única compañía que soporta este tipo de dispositivos, al menos por ahora).
