Las cifras de venta de la primera semana son muchísimo mejores, pero todavía son ínfimas en comparación con los pesos-pesados a los que busca desbancar.
¿Quién lo diría? La última apuesta de Google por tomar el control de sus propios dispositivos y convertirse en fabricante manejando software y hardware a-la-Apple ha resultado mucho mejor de lo que se podría haber esperado.
Al menos así lo dicen las cifras de adopción de Pixel según una consultora independiente, la que posiciona a los nuevos aparatos de Google por sobre cualquier dispositivo Nexus de la historia.
A los Pixel y Pixel XL le tomó sólo 6 días llegar a los niveles de adopción que al Nexus 6P (el Nexus más exitoso de la historia) les tomó 12 días según AppBoy. Según las cifras de esta empresa, el Pixel está un 274% por sobre el último Nexus, mientras que la variante XL está encima un 158%.
Suena grandioso, pero no hay que engañarse. Los Pixel no le hacen sombra ni en lo más mínimo a los grandes jugadores de la industria como el Galaxy S7 y el Galaxy S6, teléfonos que en ese sprint de una semana han tenido mucho mejor arranque que los nuevos dispositivos «hechos por Google».
Y es justamente eso, el mote de «hecho por Google» lo que parece haber atraído a un público un poco más masivo que cualquier equipo surgido de sus entrañas anteriormente. Sin embargo, sigue siendo un dispositivo de nicho.
Veremos cómo le va cuando comience a llegar a otros países.