El Fitbit Charge 3 trae todo lo bueno de su antecesor en un diseño más premium y nuevas funcionalidades que lo acercan a un smartwatch.
Esta mañana fuimos invitados a las oficinas de Fitbit en Chile para la presentación de su más reciente tracker de actividad física, el Fitbit Charge 3, que viene a ser el sucesor de uno de los wearable dedicados a la salud más populares del mundo, el Charge 2, y que por supuesto, incorpora interesantes novedades.
El Fitbit Charge 3 cuenta con un diseño construido en aluminio, similar a su antecesor pero en un cuerpo más grande que le otorga una pantalla de mayor tamaño, la de que además, ahora es de tipo OLED y utiliza una escala de grises en su pantalla para mejor visibilidad.
Otra de los detalles interesantes en su diseño es la nueva resistencia al agua, que ahora soporta hasta 5ATM, por lo que puede medir la natación sin problemas. Según la empresa, esta resistencia al agua la han conseguido gracias a que ya no contamos con un botón físico, si no que Fitbit ha introducido un botón de inducción en la parte lateral.
En cuanto a su batería, la empresa promete hasta 7 días de duración con uso normal durante día y noche, por lo que podremos medir nuestro sueño y nuestra actividad física y seguir los registros desde el mismo Charge 3, sin necesidad de ir a la aplicación, y es justamente en este apartado en donde más avance ha habido respecto a la anterior generación, ya que la pantalla táctil le permite funcionar como un smartwatch, interactuando con notificaciones, llamadas y aplicaciones, pero manteniendo un diseño de tracker de actividad física.
El Fitbit Charge 3 estará disponible en Falabella y Sparta, en colores negro grafito y gris azulado a un precio de CLP $139.990 para la versión Core, con correa de plástico clásica, y de CLP $159.990 para la Special Edition, que viene con una correa textil o deportiva, sumado a la inclusión de Fitbit Pay, el método de pago móvil de la empresa.