El último teléfono de Google ha demostrado ser más reparable que gran parte de la competencia, recibiendo 6 puntos de 10.
Como ya es toda una tradición, al salir un smartphone nuevo, iFixit es el encargado de abrir el teléfono, desarmarlo por completo para verificar sus componentes y determinar que tan reparable es el dispositivo.
Hoy ha sido el turno del Google Pixel 2 XL, el más reciente dispositivo de la gran G, que si bien ha sido diseñado por ellos en su totalidad, ha sido fabricado por los surcoreanos de LG, recibiendo una nota de 6 puntos de un total de 10.
Para lograr recibir este puntaje, a pesar de ser resistente al agua, LG ha decidido utilizar cinta de espuma para sellar el dispositivo, lo que implica que para abrirlo no es necesaria la utilización de calor, como lo requieren gran parte de los teléfonos de gama alta. iFixit también destaca que la pantalla ha sido muy fácil de remover gracias a la utilización de cables largos que permiten quitar el ensamblaje sin dañar el Pixel 2 XL.
Por otra parte, se ha revelado el nuevo Pixel Visual Core del que Google habló ayer, procesador exclusivo de la empresa para mejorar el rendimiento fotográfico y que aún no se encuentra activo. Este procesador permitirá que aplicaciones de terceros utilicen todas las bondades de la cámara del teléfono de forma nativa. En la placa madre nos encontramos con lo clásico en un teléfono de gama alta, su procesador, el almacenamiento de Samsung o el chip NFC.
En los costados se encuentran los sensores de presión de la función Active Edge, que permite apretar el dispositivo para activar Google Assistant. Es importante destacar que otros teléfonos de la competencia, como el Note 8 o el Essential Phone han recibido peores números que estos a pesar de contar con un hardware muy similar, por lo que es una buena noticia para los compradores de un Pixel 2 XL.