Según los investigadores de la Universidad de Oxford, los comportamientos físicos podrían ser usados para iniciar sesiones en cualquier dispositivo.
Los científicos lograron identificar que cada persona tiene alrededor de 500 comportamientos o patrones físicos que son únicos, como por ejemplo: la forma en mover el ratón, la velocidad con que se escribe en el teclado, etc. Este conjunto de elementos únicos es lo que los científicos llaman eDNA o atributos naturales electrónicamente definidos.
Cualquier modificación en el patrón común de los individuos, de acuerdo al tipo de fluctuación, se puede establecer, incluso, si alguien ha consumido drogas, tuvo relaciones sexuales; o desde el punto de vista de la salud, podría identificar pequeños cambios que son indicadores de un ataque al corazón en un plazo de tres meses.
Los desarrolladores del algoritmo sostienen que es imposible falsear que no eres tú, como bien dicen los expertos de Oxford BioChronometrics; “es muy difícil conectarse y no ser tú mismo”. Además, pueden reconocer las fluctuaciones en el comportamiento del usuario, es decir, independiente de que si has consumido más alcohol de la cuenta, has consumido drogas, el algoritmo podría seguir funcionando, sin bloquearse.
Según Oxford BioChronometrics es posible usar su tecnología no solo en individuos, sino también en grandes compañías como Google, Facebook o Twitter. Es decir, estas firmas podrían detectar fácilmente si la persona que está tras el ordenador o el dispositivo móvil, es la real o es un robot.
La pregunta que queda por responder, según el profesor Chris Mitchell del Information Security Group at Royal Holloway, hay que ver si el usuario final será capaz de aceptar o cuán reticente será a que su patrón de comportamiento sea monitorizado.
Referencias:
Vía The Guardian
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Imagen gentileza de la Universidad de Oxford
