Intel afronta un panorama complejo. Su CEO admite dejar el liderazgo en chips y busca una nueva dirección en IA.
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El CEO de Intel, Lip-Bu Tan, comunicó a los empleados un cambio significativo. La compañía dejó de posicionarse entre las diez principales empresas de chips. Este anuncio llegó mientras la firma iniciaba importantes despidos. El ejecutivo recordó que, hace décadas, su organización lideraba la industria. Aunque, el panorama actual es muy diferente.
Tan afirmó que los clientes califican de manera negativa a la marca. Además, destacó su considerable retraso respecto a NVIDIA en tecnología de inteligencia artificial (IA). El directivo describió la recuperación como una «maratón». Las actuales reducciones de personal buscan darle mayor agilidad.
La posición de la empresa en la industria de los chips ha disminuido notablemente. Su valor de mercado actual es de unos 100.000 millones de dólares. Esa cifra representa casi la mitad de su valor de hace dieciocho meses. En contraste, NVIDIA alcanzó de forma breve los cuatro billones de dólares.
La sesión de preguntas y respuestas entre el CEO y el medio Oregon Live coincidió con el inicio de despidos masivos. Miles de trabajadores de la firma en todo el mundo perdieron sus empleos. Tan asumió su cargo en marzo, tras la salida de su predecesor.
Asimismo, Intel planea despedir a otros 529 empleados en Oregón para mediados de julio. Cientos más perderán sus puestos en California, Arizona e Israel. Se esperan más despidos al cerrar su negocio automotriz. También se tercerizaría el departamento de marketing. Incluso, la operación de manufactura se reduciría hasta un quinto de sus puestos.
El directo general opina que una empresa más compacta se moverá con mayor rapidez. «El proceso de decisión es muy lento», expresó el ejecutivo.
La marca intenta ponerse al día en casi todas sus áreas de negocio. Esto es resultado de importantes retrasos tecnológicos de casi una década. El panorama la dejó en desventaja competitiva en sus mercados principales. Estos incluyen computadoras personales y centros de datos.
Lip-Bu Tan señaló la pérdida de cuota de mercado en data centers. Su división de computadoras personales muestra un rendimiento «un poco mejor». No obstante, la organización necesita fortalecer su arquitectura. Lo anterior es fundamental para las demandas de la computación avanzada.
La llegada de la inteligencia artificial complejizó aún más el panorama. La IA se ejecuta en GPUs de NVIDIA. Intel no cuenta con GPUs avanzadas propias. Por ello, ha quedado fuera del auge en la demanda de chips para entrenar sistemas de IA. «En cuanto a la capacitación, creo que es demasiado tarde para nosotros», afirmó el CEO. La posición de NVIDIA en ese mercado es «demasiado fuerte».
La empresa, en cambio, se enfocará en la inteligencia artificial «periférica». Dicha tecnología lleva las capacidades de IA directo a dispositivos como computadoras personales. El gerente también busca explorar la IA agente (o IA agéntica). Este campo permite a la IA operar de forma independiente. «Es un área emergente y queremos asegurarnos de capturarla», remarcó. La compañía contrató a tres nuevos vicepresidentes el mes pasado. Ellos ayudarán a avanzar en el negocio de la IA.
Tan dejaría de promocionar 18A a firmas externas. En su lugar, su empresa podría enfocarse en atraer clientes para su próxima generación, 14A. El directivo no abordó esta posibilidad directamente. Sin embargo, enfatizó: la compañía debe demostrar que sus procesadores cumplen primero con sus propias necesidades.
Fuente: Oregon Live (vía The Verge)
