El sucesor del Apple A11 Bionic usaría arquitectura de 7nm, la más baja jamás existente para los chips del mercado de smartphones.
Este año vimos llegar por primera vez los chips con arquitectura de 10nm, y pese a que los resultados fueron muy buenos, poco se supo acerca de la llegada de supuestos chips de 8nm de Samsung.
Ahora, con la presentación del Qualcomm Snapdragon 845, las dudas quedaron un poco más clara, y es que el próximo año veremos este chip en casi toda la gama alta Android, pero su arquitectura es también de 10nm, lo que tiene un beneficiado directo: Apple.
La compañía de Cupertino tiene la ventaja de diseñar sus propios chips, y gracias a eso es que los rumores sitúan a la compañía como la única que usará procesadores de 7nm el próximo año, a menos que Samsung desarrolle un Exynos con esta arquitectura el próximo año, algo que se ve poco probable.
Muchos expertos ya avisan que la diferencia entre un chip con arquitectura de 10nm y uno de 7nm no son muy notorias en la práctica, pero es la diferencia en eficiencia la que haría que Apple tomara la delantera, haciendo que el usuario sea el principal beneficiado, con duraciones de batería más altas y con menos lag en sus procesos.