Si les digo que comparemos a Android con iOS uno de los puntos que de seguro se les vendrá a la cabeza son las actualizaciones. Seguro, Apple tiene una tremenda ventaja en ese sentido, maneja absolutamente todo el proceso productivo y eso le permite tener actualizado –literalmente– todos sus dispositivos a la última versión del sistema operativo.
En el caso de Android es totalmente distinto. Hay muchos fabricantes, muchos modelos distintos en todas las diferentes gamas y, además, nos encontramos con el tremendo error de dejar a los fabricantes poner un último paso antes de que esta versión final llegue a nuestro teléfono. Terrible.
Pese a que Google ha puesto de su parte para intentar cambiar esta situación (implementando Project Treble, por ejemplo) aún sigue sin ser suficiente. El sitio estadounidense The Verge tuvo acceso exclusivo a los nuevos documentos contractuales para cualquier fabricante que quiera utilizar su sistema operativo.
¿Y de qué se trata?
El documento detalla que los teléfonos con Android tendrán que recibir al menos cuatro actualizaciones de seguridad durante el primer año, mientras que durante el segundo año también tienen la obligación de seguir entregándolas, aunque sin un número mínimo.
En este contrato Google exige que todo dispositivo presentado después del 31 de enero comience a aplicar esta norma, mientras que al 31 de julio ya estaba aplicado en un 75% de los teléfonos que tienen obligaciones de actualizaciones de seguridad. A partir del 31 de enero de 2019 será obligatorio para cualquier dispositivo que quiera usar la licencia de Android.
Sin duda que es una buena noticia, aunque todavía queda mucho camino por pavimentar para lograr una buena experiencia de actualizaciones.