En su afán por tratar de alcanzar lo hecho por Apple en la presentación del nuevo iPhone 7 y 7 Plus, Samsung estaría trabajando no sólo en una fórmula para superar el percance del Galaxy Note 7, si no que ya estaría trabajando a tiempo completo en el nuevo buque insignia de la compañía, hablamos del Samsung Galaxy S8.
El nuevo chip que equiparía este terminal sería el Exynos 8895, el cual contaría con una CPU que será capaz de alcanzar una velocidad de 3GHz. Esto se traduce, por ejemplo, en que las imágenes se podrán llegar a procesar hasta un 70% más rápido. Además este nuevo chip al parecer optimizará el uso de energía, pues pondría un límite de 5w en su funcionamiento.
Con esto, Samsung pretende volver a ganar la credibilidad que ha estado perdiendo últimamente con las noticias del Galaxy Note 7 y la orden de retiro de los mismos por parte del gobierno de los Estados Unidos.