La reciente alianza entre Google y la telco norteamericana Verizon no ha estado exenta de polémicas, especialmente por el hecho de que ellos tomarán las riendas de las actualizaciones de software y la inclusión de bloatware propio en los nuevos dispositivos Pixel que sean adquiridos a través la operadora.
Para calmar las dudas de los más puristas, Verizon –y Google– ha confirmado que las actualizaciones no serán atrasadas por la operadora, y que llegarán a los dispositivos adquiridos a través de ellos al mismo tiempo que los que fueron comprados directamente desde Google.
Además, Verizon confirma que ellos venderán el equipo completamente liberado, y sólo contará con tres aplicaciones propias que podrán ser fácilmente desinstaladas por el usuario.
La compañía ya no va a ponerse entremedio de las actualizaciones al parecer, y dejará que sólo Google sea el responsable de éstas lleguen a los nuevos Pixel.
