Otro caso de celulares malogrados se vivió en Estados Unidos, a pesar de que en los últimos meses habían disminuido los casos de teléfonos con baterías defectuosas que terminan en incendios y explosiones, este fin de semana surgió una nueva situación que pudo tornarse riesgosa, todo gracias a un iPhone 6S que explotó durante un vuelo de Alaska Airlines con 163 pasajeros a bordo
Según reporta ABCNews, la pasajera Anna Crail tomó un vuelo comercial de Washingston a Hawaii para descansar y tomarse unas merecidas vacaciones. Sin embargo, a mitad del vuelo la joven veía una película cuando su iPhone 6S comenzó a sobrecalentarse y espontáneamente explotó en llamas que alcanzaban hasta 20 centímetros de altura. Inmediatamente la joven botó el celular al piso y este quedó bajo el asiento, pero por fortuna, nada mas grave ocurrió, pues afortunadamente la tripulación utilizó los extintores para apagar el fuego del iPhone.
Apple y la FAA se encuentran investigando el caso, pues se puso en riesgo un vuelo comercial, aunque el avión aterrizó sin problemas en Hawaii. Ahora bien, la joven se llevó el susto de su vida y ya no tiene iPhone para sacar fotos en sus vacaciones.
