Hace un par de meses que los rumores venían involucrando a la nueva apuesta de Samsung en el mercado de los Flip Phone o terminales con tapita que tan populares fueron por allá por el principio de los 2000.
Pero ahora, el teléfono ya es oficial, y se trata de un auténtico flagship por las características que tiene. Para empezar, contamos con dos pantallas SuperAMOLED de 4.2 pulgadas y resolución FHD, luego tenemos un micro procesador Qualcomm Snapdragon 835, 6GB de memoria RAM y almacenamiento interno que llega a los 256GB.
En el apartado multimedia nos encontramos con una gran novedad, y es que nos encontramos con un sensor de 12 megapíxeles con apertura focal f/1.5 y estabilización óptica OIS, la más baja en el mercado actualmente superando a la apertura f/1.6 del LG V30. La cámara delantera, en tanto, es de 5 megapíxeles.
En cuanto al sistema operativo, el mismo cuenta con Android 7.1 y posee una batería de 2.300 mAh con tecnología de carga rápida, chip NFC, certificación IP68 contra el agua y polvo y un lector de huellas ubicado al lado de la cámara.
Pero no todo es tan bueno, porque de partida el teléfono carece de los servicios de Google debido a que el mismo es exclusivo del mercado chino, donde dichos servicios están bloqueados. Además, si quieres hacerte de uno de estos, tendrás que desembolsar la no despreciable suma de USD $2.400 para la versión básica, y si quieres la versión más avanzada con 8GB de memoria RAM, el costo subirá hasta cerca de los USD $3.000.
