El inminente Samsung Galaxy S25 Ultra podría presentar una novedad en su diseño: la incorporación de titanio de grado 3, lo que reforzaría notablemente su estructura. El Galaxy S24 Ultra ya se había ganado el reconocimiento por su solidez, atribuida en gran medida a su armazón de titanio de grado 2, apreciado por su pureza y capacidad de soldadura, ideal para construcciones resistentes.
Aunque el titanio de grado 3 es menos habitual en el mercado debido a su complejidad de moldeo, ofrece una resistencia superior a la corrosión y una fortaleza general incrementada frente a los grados inferiores, lo que lo convierte en una opción preferente para situaciones donde la durabilidad es primordial, pese a los retos que implica su procesamiento.
Es interesante comparar esta elección de materiales con la serie iPhone 15 Pro de Apple, que utiliza una aleación de titanio de grado 5 con adiciones de aluminio y vanadio, proporcionando una mezcla óptima de ligereza y resistencia. Por otro lado, el titanio de grado 2 del Galaxy S24 Ultra, aunque no es tan resistente como el grado 5, sigue siendo sumamente robusto y adecuado para dispositivos móviles.
La potencial decisión de Samsung de emplear titanio de grado 3 en su Galaxy S25 Ultra, a pesar de los desafíos manufactureros que conlleva, podría fortalecer aún más la imagen de la línea Ultra como sinónimo de durabilidad y resistencia excepcionales. Considerando la robustez ya probada del Galaxy S24 Ultra, continuar con el titanio de grado 2 sería una opción segura, pero el avance hacia el grado 3 subrayaría el compromiso de Samsung con la innovación y la calidad en sus dispositivos de gama alta.
