Presentado la semana pasada, el Note 8 ya se puede decir que es un dispositivo exitoso, pues así lo avalan las cifras de reservas del dispositivo, las que superan en un 30% a las que tuvo el Note 7 el año pasado.
De este modo, pese a que el dispositivo no se ha lanzado oficialmente al mercado –recién llegará a sus dueños el 15 de septiembre--, en Samsung se han fijado una meta bastante codiciosa con respecto a sus ventas, y es que quieren vender más de 11 millones de Note 8.
La meta se fijó en base a los resultados que tuvo el Galaxy Note 5, dispositivo que vendió 11 millones de unidades, así que es natural y lógico que Samsung quiera vender más que esa misma cantidad un par de años después.
Ahora bien, la meta podría ser cambiada pronto, pues, como referencia, el Galaxy S8 ya ha vendido un 11% más que el Galaxy S7, y la firma coreana ya espera vender nada más ni nada menos que 48 millones de unidades del S8.
Con un precio de CLP $850.000 y de un precio en dólares que se acerca peligrosamente a los USD $1.000, no será una tarea demasiado fácil para Samsung vender esta cantidad de Note 8, por lo que sólo el tiempo dirá si finalmente lo lograron.