Hay que decir las cosas como son. Al principio cuando veíamos que un operador decía haber sufrido un robo de cables, la gran mayoría de nosotros creíamos que se trataban de excusas por su mal servicio. Sin embargo, el problema fue sucediendo cada vez más frecuente y ahora afectaba a varios operadores.
En la actualidad el robo de cables ya es pan de cada día, y prácticamente todos los que tenemos acceso a internet fijo de manera alámbrica hemos sido afectados por culpa de estos verdaderos delincuentes. De hecho, más de un millón de clientes ya se han quedado sin internet en lo que va del año por culpa de estos robos.
Podemos pasar un par de horas, un día completo, e incluso una semana completa sin internet por culpa del robo de cables y hoy en día somos muchos los que dependemos de una conexión a internet. Algunos lo usan para trabajar, otros para estudiar, así como también se utiliza en centros de salud, cajeros automáticos, bancos, entre otros.
Hoy el robo de cables va en continua alza y prácticamente es un hecho que está fuera de control, porque sucede todos los días y en diferentes lugares. De hecho, hace un par de semanas se registraron cerca de 900 cortes intencionales, el 95% de ellos se registraron en la Región Metropolitana.
¿Cómo actúan estos verdaderos delincuentes?
En el robo de cables vemos prácticamente de todo. Desde verdaderas bandas especializadas con toda la implementación necesaria para hacer creer que se tratan de verdaderos técnicos, hasta personas solitarias que andan robando por su cuenta.
En el siguiente video podemos ver a estos delincuentes en plena acción:
Al ver este video probablemente te preguntes: ¿Por qué hay tanto robo? Pues la respuesta es que el precio del cobre va en constante alza por lo que ya te imaginarás la buena cantidad de dinero que se paga por él, así como también las chatarrerías que feliz reciben este botín.
Pero eso no es nada, hace tres meses atrás en Aduanas se incautaron más de 12 toneladas de cables robados al operador Movistar y que tenían como destino a Corea del Sur. Este cableado provenía desde ataques y robos realizados a Movistar en todo el país, lo que se atribuiría a una “red ilícita de comercialización internacional de cobre”.
Pero no solo en Región Metropolitana se concentran los robos, ya que, a principios de mayo, 4.300 clientes del operador Movistar se quedaron sin internet en Coquimbo porque se robaron un kilómetro de fibra óptica, aumentando así a un 100% el robo de cables de cobre.
¿Qué pasa con estos delincuentes?
Hemos visto en redes sociales que los mismos operadores entregan métodos de contacto para hacer denuncias de forma anónima con el fin de que estos delincuentes paguen por sus actos, como en el caso de Movistar que tiene el número 800 441 441 disponible.
Pero lamentablemente la Justicia no ha servido de mucho en estos casos. Según la Asociación Chilena de Telecomunicaciones, entre los meses de octubre del 2020 y marzo del 2021, se presentaron 350 querellas, mientras que, en octubre del 2021 y marzo del 2022 se presentaron 1.155 querellas. Sin embargo, solo hay dos condenados.
Técnicos haciendo todo lo posible por reparar la infraestructura robada
Cuando los cables son robados, la compañía afectada tiene que hacer todo lo posible por restaurar el servicio a sus clientes lo antes posible. Son cientos de técnicos que tienen que estar trabajando de día y de noche reparando el desastre que dejan los delincuentes.
Muchos de ellos se encuentran trabajando en un sector, pero están con la incertidumbre de qué puede pasar en un par de horas más. Incluso, muchos de ellos les tocan ir de noche a lugares que suelen ser peligrosos y que tienen que ir con protección policial, pero dicha protección no siempre está disponible, por lo que algunos ya arriesgan sus vidas por culpa de estos robos.
Así está la situación con el robo de cables, operadores vulnerables, delincuentes con total impunidad y los clientes sin poder hacer nada…
¿Te ha afectado el robo de cables alguna vez? ¿Qué propones tú para terminar con este robo?
Videos y fotografías gentileza de Movistar Chile.
