El hermano menor de la familia Xiaomi 13 ya está con nosotros. Se trata del Xiaomi 13 Lite, equipo que busca hacerse un lugar en el siempre competitivo esquema de la gama alta. Y con armas poderosas como su procesador y su diseño, bien podría lograrlo.
Pese a que este modelo Lite no tiene las especificaciones tan agresivas de sus otros dos hermanos, si lo que buscas es una buena experiencia, y por, sobre todo, un diseño llamativo, este teléfono podría ser perfecto para ti.
Pero primero revisemos las especificaciones del equipo que probamos.
Diseño
Empecemos con la pantalla, y es que apenas vemos el Xiaomi 13 Lite por primera vez, dos cosas saltan a la vista. Primero, su altura, pues estamos ante un smartphone más alto y delgado que la norma. Y segundo, su panel frontal.
En este panel nos vamos a encontrar con un diseño de doble cámara, el que puede ser nuestro aliado cuando queramos sacar selfies. Pero, por otro lado, también nos vamos a encontrar con que ocupa mucho espacio cuando queramos reproducir contenido multimedia y jugar juegos.
El panel es curvo, algo que a muchos puede gustarles, como a otros no. Este diseño, en lo personal, no me gusta demasiado porque puede llevarnos a toques accidentales cuando pasamos a llevar los bordes. Pero en términos generales, esto no fue un problema en mi experiencia de uso.
Ahora, en la parte trasera nos vamos a encontrar con un diseño liso en tonalidad rosa. Este color cambiará un poco dependiendo de cómo se refleje la luz directa sobre esta parte trasera. De todos modos, el color rosa es muy sutil y nos llega a dar la impresión de elegancia todo el tiempo.
También tenemos el módulo de cámaras en esta parte trasera. Con 3 lentes que siguen la forma de diseño de Xiaomi en otras líneas. Una forma de diseño sobria, pero que nos dice que apenas lo vemos que estamos en presencia de un móvil de la marca. Una bonita identidad con la que Xiaomi ha logrado dar continuidad en el tiempo.
El dispositivo, eso sí, resulta muy cómodo a la mano, y ayuda mucho su delgadez y ligereza, pues, como vemos en la tabla de especificaciones, pesa tan solo 171 gramos, en una época donde estamos acostumbrados a teléfonos bastante más pesados.
Eso sí, si no vas a usar una carcasa con el teléfono, tengo que decir que ciertamente es, por lejos, el teléfono más resbaloso que he probado. Esto es tan así que no podemos ni siquiera dejarlo en el borde de una superficie plana sin tener el miedo a que se nos vaya a caer. Es demasiado, pero demasiado resbaloso.
La parte inferior del equipo cuenta con un conector USB-C, además del único parlante que posee este teléfono. Si, perdimos los altavoces estéreo que teníamos en la generación pasada y que si poseen los otros dos modelos de la serie Xiaomi 13.
También en la parte inferior tenemos la bandeja para colocar tarjetas SIM, donde podemos usar dos a la vez. No tenemos bandeja para tarjetas microSD. Pero quizás lo más llamativo es que tenemos posibilidad de usar e-sim, algo que no se ve muy a menudo en este segmento de precios y que es digno de aplaudir.
Los laterales del teléfono son muy, muy delgados y presentan los botones para subir y bajar volumen de manera elegante. En términos de posición, están en forma correcta. Ni muy arriba ni muy abajo, algo mínimo pero que lamentablemente no se cumple en muchas marcas.
No tenemos Jack de 3.5mm para auriculares, lo que ya es típico, así que no lo vamos a dejar como aspecto negativo. De todos modos, es necesario contarlo.
Como vemos, el Xiaomi 13 Lite es un dispositivo que, sin salirse de la norma de lo convencional en equipos de Android, sí que tiene elementos distintivos que lo hacen destacar y formar su propia identidad en lo que a diseño se refiere.
Pantalla
El Xiaomi 13 Lite tiene una pantalla AMOLED de 6.55 pulgadas con resolución 1080p y certificación HDR10+ con tasa de refresco de 120Hz. Además, tenemos dos agujeros en la parte superior, en medio del panel, donde nos vamos a encontrar con una cámara de selfies de 32 megapíxeles junto con un sensor de profundidad de 8 megapíxeles.
La pantalla da muy buenas impresiones, los ángulos de visión son los correctos, tenemos una reproducción de colores buena, y cuando ponemos el dispositivo de frente a la luz del sol, no tenemos problemas de visibilidad, tal cual se espera de un panel de este calibre. El brillo promedio de la pantalla es de 500 nits, peros su brillo máximo llega a los 1.000 nits.
Esto la hace suficiente para poder usarla bajo el sol directo sin problemas. Lo mismo pasa con su tasa de refresco, la que es de 120Hz. Movimientos fluidos que siempre dan la impresión que estamos ante un móvil premium.
Como es de esperarse, tenemos la opción de usar el teléfono a 60Hz también. Incluso de cambiar la tonalidad de los colores del panel. Y es que MIUI nos deja flexibilizar el uso del smartphone a nuestro más absoluto antojo.
Con brillo bajo muy bajo, y con un brillo máximo muy pero muy bueno, la pantalla del Xiaomi 13 Lite es de los mejores aspectos en general, solo quienes quieran tener una tasa de refresco más alta (144Hz o 165Hz) podrán encontrar un obstáculo, pero en el día a día, tenemos un rendimiento más que suficiente en este apartado.
El sensor de huellas del Xiaomi 13 Lite está ubicado dentro de la pantalla en la parte inferior, y el mismo funciona bien en términos de reconocimiento de la misma. Eso sí, el teléfono viene con una lámina preinstalada de fábrica. Esto hace que el sensor no funcione como la empresa quiso en un primer momento.
Tengo que contar que el primer día de uso del teléfono, el sensor de huellas no funcionaba muy bien a pesar de registrar dos veces la huella del mismo dedo. De hecho, pensé en sacar la lámina protectora para poder mejorar esta experiencia. Pero luego de actualizar a MIUI 14.0.8 el rendimiento del lector cambió y nunca más tuve un problema.
Coincidencia o no, son dos aspectos que vamos a tener que tomar en cuenta a la hora de evaluar el teléfono como un todo.
En cuanto a la posición del lector, no tenemos ninguna queja. El mismo es lo suficientemente grande y su posición es perfecta para no tener que hacer esfuerzo en desbloquear.
Cámaras
Vamos a partir por la cámara trasera, que se compone de un lente de 50 MP Sony IMX766, f/1.8 como sensor principal, un gran angular de 8 megapíxeles Sony IMX376f/2.2 y un sensor macro de 2 megapíxeles GC02M1 f/2.4, y la misma sí que nos deja buenas sensaciones. Cuando las condiciones de luz son las correctas tenemos grandes resultados con buen detalle, muy poco ruido y buena reproducción de colores y balance de blancos.
Ahora, cuando las condiciones de luz comienzan a bajar, nos empezamos a dar cuenta que no estamos ante un teléfono de gama premium, pues el detalle se empieza a perder paulatinamente, especialmente cuando hacemos zoom a las instantáneas sacadas de noche, así que el modo noche será nuestro mejor aliado.
Esto, claramente, es algo que es esperable. De todos modos, el resultado que obtenemos de las cámaras principales es destacable, buenos resultados y seguramente estemos ante uno del teléfono que mejores fotos tome por el precio que hayan sido presentados este año en gama alta.
El gran angular también está muy bien. Buenos detalles y seguramente estemos ante uno de los set de cámaras de mejor rendimiento de este año en gama alta. Eso sí, no uses el gran angular de noche, sus resultados no son los mejores. Para eso, el sensor principal hace un trabajo muy destacable.
Lo que sí podemos echar de menos es un zoom un poco más ambicioso, pues solo vamos a tener la capacidad de usar zoom óptico 2x sin pérdidas.
En tiempos donde estamos acostumbrados a tener un zoom 3x sin pérdidas, puede que para muchos este apartado sea un problema. Sobre todo, cuando vemos que el zoom digital poco y nada ayuda cuando queremos capturar un objeto lejano.
Las cámaras de selfies son un caso aparte. Pues al contar con dos sensores, esperaríamos estar ante un terminal capaz de sacar mucho mejores fotos de lo que en la realidad podemos hacer.
Me explico. Si bien cuando usamos la cámara frontal podemos hacer un efecto de 0.8x y 0.6x sin pérdidas --especial para sacar fotos cuando queremos capturar más gente en una foto--, los resultados son un poco decepcionantes.
La reproducción de colores está muy bien. Pero en términos de HDR, estamos muy al debe. Si vemos en las imágenes, el cielo lejos de ser del color azul vibrante que debería, parece estar gris. Esto hace que a contra luz se pierda mucho detalle de este rango dinámico.
El segundo sensor es específicamente usado para hacer fotos en modo retrato. Y en general no hay problemas cuando usamos este modo de fotos. Los recortes por software están bien logrados y las fotos son buenas cuando las condiciones de luz son óptimas.
Lo que sí, a pesar de que desactivemos por software los modos y filtros de embellecimiento que existen en Xiaomi, siempre da la sensación de que hay un poco de suavizante de tono en la piel para las selfies, lo que es bastante extraño.
Quizás lo más llamativo del teléfono es que contamos con un doble flash LED en el panel frontal. Esto es muy útil cuando queremos tomar fotos de noche o cuando las fuentes de luminosidad natural comienzan a escasear. Y si, ayudan bastante como podemos observar en las fotos.
El modo nocturno también hace lo suyo. Y quizás lo que más me sorprendió fue al tomar una foto con este modo, el procesamiento de la imagen es muy rápido, y no hay que esperar un par de segundos para poder tomar una segunda foto. Bien hecho, Xiaomi.
Video
A la hora de hablar de la captura de video, el Xiaomi 13 Lite puede grabar videos en resolución 4K a 30fps o 1080p a 30 o 60fps, y cuando lo hacemos en este modo, tenemos buenos resultados, con estabilización por software que –nuevamente– entrega resultados satisfactorios en términos de reproducción de colores, detalle y ruido.
Creo, eso sí, que deberíamos haber tenido estabilización óptica. Pues si nos movemos mucho vamos a ver como la estabilización electrónica empieza a perder eficacia. Los resultados son buenos, pero si hubiéramos tenido OIS, estaríamos hablando de un set de cámaras espectacular.
La cámara frontal es capaz de grabar video a 1080p a 30fps, y la verdad, mejor no lo hagas. Está bien para sacarnos de un apuro o para grabar un video corto cuando tenemos mucha luz. En el resto de condiciones, su rendimiento no es óptimo pues no tenemos enfoque automático.
Sistema (MIUI 14) y Multimedia
MIUI es una capa de personalización de las más famosas ya en este punto, y la verdad sea dicha ha avanzado mucho desde los tiempos donde teníamos problemas de rendimiento, bugs y muchos problemas.
Ahora, lo que me parece una falta mayor, es que el Xiaomi 13 Lite si bien viene con MIUI 14, viene con Android 12. Esto es impresentable, ya que sus dos hermanos mayores vienen con Android 13, y esta versión de Android ya va a caumplir un año desde su presentación.
El problema es que el Xiaomi 13 Lite no es otra cosa que un Xiaomi Civi 2 con otro nombre. Y como el Civi 2 venía con Android 12 el año pasado, la empresa ha decidido simplemente copiar este apartado, y quien sabe cuándo se va a actualizar a Android 13.
En cuanto a funciones, MIUI 14 nos ofrece un montón de opciones de personalización, partiendo por el launcher, donde nos encontramos la posibilidad de usar o no un cajón de aplicaciones en vertical, bastantes widgets propios de Xiaomi y opciones para ordenar los ajustes rápidos.
Tenemos, a la hora de ver videos, una pequeña opción para desplegar una suerte de caja de herramientas que nos permite grabar la pantalla, hacer captura de pantalla, emitir y escuchar el video con la pantalla apagada.
También tenemos la opción de activar el Dolby Atmos o de lanzar una pequeña ventana para usar WhatsApp, Facebook, Twitter o una que otra aplicación que queramos. Esto se puede desactivar, pero es útil.
En términos de bloatware no tengo demasiadas quejas, pues con el paso de los años, cada vez vienen menos aplicaciones preinstaladas, y casi todas se pueden desinstalar. Lo mismo ocurre con los anuncios de MIUI, los que cada vez son menos y menos intrusivos.
Hay cosas muy llamativas. Por ejemplo, cuando desbloqueamos el teléfono con la huella, si mantenemos presionado el lector, vamos a poder hacer una búsqueda o leer un código QR. Este tipo de cosas hacen que MIUI sea tan querido por muchos usuarios.
Como vemos, si queremos personalizar nuestro teléfono, en MIUI 14 vamos a tener bastantes opciones, y si no queremos usar ninguna, tampoco habrá problema alguno. Y es que en términos de rendimiento el dispositivo se comporta muy bien.
Su procesador es el Snapdragon 7 Gen 1, eso junto a sus 8GB de memoria RAM y la posibilidad de usar RAM virtual nos da como resultado un rendimiento óptimo. El mismo queda a la par de toda su competencia y que en ningún momento se siente lento, o con trabas.
Este procesador es especialmente bueno, y poco usado. No son muchos los terminales que lo han usado debido a su precio o que es hecho en colaboración con Samsung. Pero estamos ante uno de los chipsets más capaces de toda la gama alta.
En términos de aplicaciones, usando mensajería como Telegram, WhatsApp, aplicaciones de redes sociales como Facebook, Instagram o Twitter y entretención como TikTok, Twitch o Reddit no tuve problema alguno con las mismas, las aplicaciones funcionan fluidas y sin ningún problema en la multi tarea.
Uno de los juegos preinstalados es Solitario, juego que a pesar de ser muy básico es un clásico. Tanto es así que no lo desinstalé y lo jugué a diario, casi como si una aplicación de redes sociales fuera. Sin ningún problema vamos a poder jugar.
El otro juego preinstalado es Genshin Impact, y a pesar de que no soy muy fanático de jugar juegos en el teléfono, el smartphone mueve el juego sin ningún problema en condiciones medias.
Conectividad y batería
El Xiaomi 13 Lite cuenta con conectividad 5G, además de redes 4G y servicios de VoLTE y VoWiFi, tecnologías que funcionan sin ningún problema, lo mismo con sus redes WiFi 2.4, 5Ghz y WiFi 6. Usar su NFC no fue ningún problema y pude realizar pagos por Google Pay sin inconvenientes al enrolar mis tarjetas bancarias.
No tenemos radio FM, que es algo que se ha ido perdiendo en móviles últimamente, pero al usar una aplicación de la Play Store que la reemplaza para ser escuchada online no hay problemas tampoco en su uso diario.
A la hora de hablar de la batería, los 4.500 mAh del dispositivo se manejan bien. Eso sí, vamos a llegar al final del día con la capacidad justa si somos mucho de jugar con el teléfono. Lo mismo en jornadas donde usemos mucho la cámara.
Por suerte, tenemos una carga de 67W integrada por cable. Y el cargador viene incluido en la caja. Esto hace que el teléfono se cargue de 0% a 100% en menos de una hora. Específicamente, en 47 minutos tenía el teléfono cargado.
Vamos a poner como ejemplo 3 ciclos de carga. El primero la mayoría del día en WiFi y usando más que nada redes sociales y la cámara. El segundo, usando casi exclusivamente redes móviles y usando mucho la cámara, y el tercero como consumo mixto de solo redes sociales y ofimática.
Y como podemos ver, si lo usamos mucho tiempo en WiFi, vamos a llegar sin problemas al final del día. Esto es si usamos redes sociales, correo electrónico, llamadas de audio y uno que otro juego ocasional por sesiones de menos de 30 minutos.
Los resultados, entonces, en este apartado son buenos. No estamos ante la presencia de uno de los teléfonos campeones de batería ni vamos a hacer cifras récord ni nos va a durar 2 días. Pero si vamos a poder usarlo por un día cómodamente lo más probable.
Y en caso de que no lleguemos al final del día, la carga rápida de 67W es más que suficiente para cargar el smartphone mientras hacemos otra cosa.
Quizás una de las sorpresas más gratas del teléfono, eso sí, está en la conectividad. Contamos con una ranura doble para 2 tarjetas nanoSIM, pero si eso fuera poco, también contamos con la posibilidad de usar una eSIM.
Personalmente pude probar tanto la ranura de SIM normal como la eSIM, y en ambos casos los resultados fueron satisfactorios. En ambos casos pude obtener 5G dependiendo del operador con el que estaba conectado, sin ningún problema de cobertura o conexión.
Lo mismo con el WiFi 6, tecnología que ya se está adoptando de manera más masiva, y que en este teléfono se puede disfrutar sin ningún inconveniente.
La conectividad y multimedia de este equipo es, entonces, otro de los puntos fuertes.
Audio
Llegamos al apartado del audio, y acá tenemos uno de los problemas más grandes pues tenemos un solo altavoz en la parte inferior del dispositivo. Esto significa que no tenemos sonido estéreo.
A pesar de tener certificación Dolby Atmos, no podemos dejar pasar este punto, pues si queremos jugar o sostener el teléfono en modo horizontal, vamos a tener problemas pues vamos a tapar si o si el altavoz inferior.
El sonido, en todo caso es bueno, y su volumen es suficiente como para rivalizar a los teléfonos de su gama, pero siendo este quizás el único de todos que no tiene altavoces estéreo, los mismos se echan de menos en muchas de las situaciones donde lo pongamos.
Demostración
Conclusiones
El Xiaomi 13 Lite es un teléfono elegante. Y se nota que está destinado a algunos usuarios en particular, especialmente a aquellos que busquen de un teléfono delgado y que tenga las últimas tecnologías incorporadas.
Prueba de ello son sus cámaras traseras más que suficientes en el día a día, o la integración de tecnología eSIM para hacer llamadas y navegar. Lamentablemente, también tiene algunas trabas que no se pueden pasar por alto.
Su cámara frontal, a pesar de tener 2 sensores no es la mejor de la actualidad, y estas cámaras quitan espacio del panel frontal. Así que estamos sacrificando el consumo multimedia por la integración de una cámara que no aporta en mucho.
Lo mismo pasa con su sistema, el que, a pesar de haber mejorado, aún integra Android 12. Error imperdonable por el precio que tiene, ya que nos asegura una actualización menos de versión que sus hermanos mayores.
La competencia en este segmento es muy fuerte, y sus mejores rivales están en marcas como Samsung con el S21 FE del año pasado, o la misma Xiaomi con el Xiaomi 12 también del año pasado. Lo mismo pasa con flagships del año pasado como el S22 que ya están bajando de precio a este nivel.
Esto no quita que el teléfono tenga puntos muy fuertes. Sus cámaras principales son muy buenas, su pantalla es otro de los puntos más llamativos, con un brillo de 1.000 nits que son suficientes para cualquier eventualidad.
Con una batería que nos va a durar todo el día, y si no nos dura podemos cargarlo con 67W de potencia, el Xiaomi 13 Lite es uno de los contendores más fuertes de la gama alta. Será decisión tuya si lo que quieres es un teléfono delgado, elegante y con buena cámara y pantalla por sobre otros. Tendrás que poner en la balanza, eso sí, que en términos de actualizaciones Xiaomi no es una de las marcas con más pergaminos. Prueba de ello es que este terminal se encuentra aún en el parche de seguridad de enero, siendo que estamos en abril.
En definitiva, Xiaomi nuevamente nos ha entregado un teléfono con puntos muy fuertes. Pero esta vez se ven eclipsados por algunas cosas que echamos en falta y otras que no nos gustan tanto. De todos modos, el teléfono se desenvuelve muy pero muy bien en el día a día, que es lo que importa.
Disponibilidad y precio
El Xiaomi 13 Lite está disponible en colores azul, rosa y negro en Aliexpress con un precio que parte en los USD $469.00.
