Review Xiaomi 11T Pro

Hoy Xiaomi presentó en Chile su nuevo 11T Pro. El equipo gama alta de Xiaomi esta vez pierde la sigla Mi y nace como sucesor de los Xiaomi 10T y 10T Pro sucesivamente. Ambos equipos se instalan en la gama alta convencional de la compañía y comparten espacio con otros como el Mi 11i y Mi 11.

En términos generales estamos ante un equipo con grandes prestaciones. El nuevo Xiaomi 11T Pro incorpora una pantalla AMOLED de 6.7″ con 120 Hz de taza de refresco. Además de un procesador Snapdragon 888, 8 GB de memoria RAM, 256 GB de almacenamiento y tres cámaras (108 MP, 8MP ultra gran angular y un lente macro de 5 MP. Pero sin duda uno de los puntos más llamativos del equipo es su carga (ultra) rápida de 120 W y que promete llegar de 0 a 100% en 20 minutos.

Agradecemos a nuestros amigos de Xiaomi en Chile quienes nos facilitaron esta unidad para poder llevarte este completo review. Vamos a revisar cómo se desempeña el equipo, el que al menos en las características, promete. ¡Vamos con el review!

Diseño

Como es costumbre, comenzaremos hablando de la parte exterior del equipo. Tenemos un equipo construido en cristal y se nota, su acabado nos entrega una muy buena sensación al tacto y buena adherencia a nuestra mano, lo que se agradece. Pero además esta característica dota de solidez a la construcción del equipo, aunque se hace muy ensuciable si lo llevas sin carcasa.

Tampoco podemos hablar de un equipo pesado o grueso, tenemos 204 gramos de peso y 8.8 mm de grosor. Medidas que nos permiten tener una buena experiencia y comodidad del terminal en nuestras manos, a lo que se suma su parte trasera curvada y que entrega aún mayor facilidad de agarre.

Respecto al diseño, en la parte trasera -al menos en este color- tenemos un acabo gris que pareciera estar «cepillado», ya que esparce su color de manera lineal. Esta característica es bien llamativa, bonita y elegante, hace lucir al equipo como un terminal «metálico» y fino. Aquello también permite una muy buena tonalidad de colores y cambios según la luz, además de entregar una sensación de espejo.

En la parte trasera sólo tenemos un módulo de cámara que sobresale un poco, pero nada tan incómodo. Además, en esta parte encontramos en nombre de la marca y la sigla «5G», todo eso de manera horizontal como suele hacer Xiaomi. Los bordes del equipo están construidos en aluminio y siguen el mismo acabado brillante de la parte trasera.

En el costado derecho vamos a encontrar los botones de subir/bajar volumen y el sensor de huella dactilar, el que se aloja en el botón de encendido y apagado. En el borde izquierdo no tendremos nada y en el costado inferior nos encontramos con un micrófono, la entrada USB-C, la entrada Dual Nano SIM y un parlante. En el costado superior tenemos un sensor infrarrojo y otro parlante.

En general, el nuevo Xiaomi 11T Pro tiene una construcción muy cómoda, ligera y llamativa. A pesar de ser un terminal grande, el equipo resulta cómodo al tenerlo en las manos y su diseño sólo puede llevarse halagos. El acabado del terminal demuestra elegancia y solidez en este apartado. Muy buen punto para el equipo y para Xiaomi.

Pantalla y multimedia

En la parte frontal encontramos una pantalla AMOLED de 6.7″ con una resolución de 1080 x 2400 pixeles. Todo esto con un radio de 20:9, 395 ppi de densidad, cobertura P3 y tecnologías como Dolby Vision, HDR10+ y 800 nits de brillo los que pueden llegar a un peak de 1000 nits. En cuanto a la tasa de refresco, tenemos 120 Hz y 480 Hz de respuesta táctil.

También contamos con una cámara frontal que se presenta en este notch en forma de punto, además de bordes bastante reducidos y estilizados en los laterales. En la parte inferior tenemos un borde un poco mayor, aunque nada destacable. En total, la pantalla del equipo ocupa el 85.1% del frontal. Pantalla que además está protegida con Corning Gorilla Glass Victus.

Respeto a la experiencia de uso, una sola palabra podría definirlo: excelente. Estamos ante una pantalla que no sólo logra gran calidad en la imagen por su definición, también tenemos un gran balance entre los contrastes y brillos. Valores que nos permiten una gran experiencia ya sea en interiores o exteriores, además de lograr ajustarse de manera rápida.

Todo lo anterior acompañado de un manejo y balance de colores, los que además son ajustables a través del software. Para eso contamos con cuatro tipos de ajustes (vivido, saturado, estándar y personalizado), además de los colores asociados (P3, sRGB y original) y los valores como el contraste, saturación, etc. Lo mismo ocurre con la tasa de refresco, podemos fijarla en 60 Hz o dejarla adaptativa según el uso.

Pero a todo esto debemos sumarle las tecnologías que integra, las cuales nos permiten una gran experiencia en el apartado multimedia. Tenemos HDR10+ y Dolby Vision, los que nos entregarán una gran calidad de imagen en el contenido compatible. Tenemos colores muy bien logrados, contrastes correctos y negros bien definidos. Pero eso no es todo, porque en el sistema de audio contamos con dos parlantes estéreos y certificados por Harman/Kardon, los que además cuentan con la tecnología Dolby Atmos.

Todo lo anterior nos permite tener un sonido muy bien logrado para tratarse de un teléfono. Tenemos bajos y agudos muy bien marcados y balanceados. En el caso de los graves, estos se ven potenciados aún más con la tecnología Dolby (la cual puede desactivarse desde la configuración). No tenemos sonido saturado ni metalizado bajo ninguna circunstancia. Otra cosa que no tenemos es entrada para auriculares.

Rendimiento y uso

Ya hablando del hardware más interno del equipo, el nuevo Xiaomi 11T Pro incorpora un procesador Qualcomm Snapdragon 888 5G, con una construcción de 5 nanometros, octa-core y con una velocidad máxima de 2.84 GHz. Si hablamos de gráfica nos encontramos con una GPU Adreno 660. A lo que debemos sumarle una memoria RAM que parte en 8 GB en la versión más baja y 256 GB de almacenamiento.

En materia de uso, se trata de un equipo que sabe responder muy bien ante toda situación. A lo fluido que ya parece el equipo con sus 120 Hz en la pantalla, el procesador también sabe moverse y adatarse de manera correcta. En ningún momento vamos a notar ni siquiera lentitud en algún movimiento o acción, sabe hacer frente incluso al mayor consumo como es el caso de los juegos.

No cabe duda que el uso diario el terminal responderá más que bien y mejor de lo que, incluso, podríamos necesitar. Si le exigimos más como es el caso de los juegos o grabamos con una alta resolución, como es el caso del 8K, sí notaremos un aumento considerable en la temperatura del equipo. No tendremos un retraso en la usabilidad, pero sí sentiremos el equipo mucho más caliente.

En conclusión, este apartado es otro más de los que el nuevo Xiaomi 11T Pro queda por sobre cualquier expectativa. En mi experiencia diaria jamás tuve un equipo que se moviera lento, tuviera algún lag o se cerraran las aplicaciones de forma inesperada. Respecto a la conectividad del equipo, este soporta Bluetooth 5.2 y WiFi 6, además de soporte para redes 5G e incorpora NFC.

Software

El nuevo Xiaomi 11T Pro incorpora Android 11, pero a eso debemos sumarle la capa de personalización de la compañía, MIUI en su versión 12.5.4 y con una última actualización recibida el 1 de septiembre de este año. En esa línea, Xiaomi ha anunciado que mantendrá actualizado su sistema al menos tres años, además del envío de parches de seguridad durante cuatro.

En términos generales lo que encontraremos en MIUI sigue la línea de lo que ya veníamos viendo en el sistema operativo de la compañía. Sin embargo, tenemos un sistema mucho más trabajado, elaborado y sólido de lo que encontrábamos en versiones anteriores. La capa de personalización de Xiaomi resulta ser muy visual, útil y por sobre todo personalizable.

Lo anterior, porque MIUI nos deja un amplio espectro de personalización del terminal, partiendo por la forma en que queremos ver el menú de aplicaciones. Respecto a lo visual tenemos un aspecto muy bien cuidado y con ciertos aires a iOS en el caso del «Centro del Control», el que también está bien logrado. El equipo cuenta con gráficos muy bien diseñados, amplias animaciones y efectos de vibración bien logrados.

El aspecto más negativo que encontré en este apartado es la cantidad de aplicaciones que trae preinstaladas. Sé que es algo recurrente en esta capa de personalización, pero no puedo dejar de mencionarlo porque nos sobrecarga el sistema de manera inicial. Encontramos a Facebook, Booking, TikTok, entre otras que ya vienen instaladas una vez encendido el equipo. A eso debemos sumarle una serie de aplicaciones particulares de Xiaomi. Lo positivo es que se pueden eliminar fácilmente incluso algunas propias de la compañía.

Salvo este último punto, creo que el sistema operativo y capa de personalización que carga el nuevo Xiaomi 11T Pro está a la altura del terminal y se pule cada vez más. Otro punto para el equipo.

Batería

Este aspecto, probablemente, sea uno de los más llamativos del terminal. El nuevo Xiaomi 11T Pro incorpora una batería de 5.000 mAh. Si nos vamos a la experiencia, estamos ante otro punto favorable para el equipo.

En términos personales y en uso diario por algunas semanas, el equipo me dio 10 horas de pantalla encendida. Utilizando el equipo para tareas diarias como el uso de redes sociales, aplicación de correo, pago a través de NFC, cámara en algunas ocasiones y utilizándolo para navegación web y lectura. Con todo eso, el equipo sin problemas me entregaba unas 18 horas de autonomía en este tipo de uso, aunque no me cabe duda que podría superar esa cifra antes de tener que volver al cargador.

Hablando de carga, el equipo incorpora (sí, incorpora) un cargador de 120 W de carga de 20V/6A. Tecnología conocida como HyperCharge y que lo realiza a través de un enchufe bastante grande y por medio de un cable especial, todo esto incluido en la caja,

La tecnología permite cargar el equipo en no más de 25 minutos pasando de 0 a 100%, aunque la carga suele lograrse cerca de los 20-21 minutos. Si realizamos la recarga con el equipo apagado, incluso podemos lograr la misma medición en 17 minutos. En sólo 5 minutos el Xiaomi 11T Pro logra recargar el 40% de la batería.

A diferencia de algunos equipos que hoy tenemos en el mercado, en el nuevo Xiaomi 11T Pro probablemente la batería deje de ser un tema. Estamos ante un equipo que logra muy buenos resultados respecto a la autonomía de su batería, pudiendo alcanzar sin ningún problema el uso durante toda una jornada. Pero aparte de eso, tenemos un sistema de recarga que convierten a este proceso en un mero trámite. En conclusión, la batería y su autonomía no son un condicionante para la usabilidad del equipo, al contrario, le dan un plus.

Seguridad

Al igual que todos los terminales Android, en el nuevo Xiaomi 11T Pro encontramos los típicos metodos de desbloqueo del sistema: PIN, contraseña y patrón. Pero a eso debemos sumarle los dos métodos biométricos del terminal, ya sea el desbloqueo facial y a través de huella dactilar. El primero de estos se realiza por software y tiene una taza de fiabilidad y respuesta muy alta cuando tenemos las condiciones óptimas. El desbloqueo ocurre bastante rápido.

Aunque sin duda el método más fiable que tenemos es a través de la huella dactilar. Tenemos un sensor ubicado en el botón de encendido y apagado y podemos configurarlo sobre si necesitas presionarlo o no para desbloquear el equipo. De manera predeterminado no es necesario presionar y basta con poner el dedo sobre el sensor.

El desbloqueo ocurre de manera demasiado rápida, a lo que se suma una animación muy reducida de desbloqueo, lo que hace aún más rápida la sensación de desbloqueo. Este es un aspecto muy positivo porque no ocurre frecuentemente en estos sensores. Pero si además tienes el desbloqueo facial activado, entonces tendrás una sensación constante de rapidez, porque si la huella llegase a fallar en su detección, de todas maneras, abrirás el equipo. Personalmente el lector de huella siempre respondió correctamente y no falló nunca en la detección de mi huella.

Cámara (s)

En la parte posterior del nuevo Xiaomi 11T Pro nos encontraremos con un módulo de cámaras el que cuenta con tres sensores. El primero de ellos es el principal, un sensor gran angular de 108 MP con apertura f/1.75 y enfoque automático por PDAF. Una segunda cámara ultra gran angular, incorpora un sensor de 8 MP con apertura de f/2.2. Finalmente, tenemos un sensor macro de 5 MP con enfoque automático a 3-7 cm con una apertura de f/2.4. No tenemos estabilización óptica ni una cámara teleobjetivo ni de profundidad.

La cámara principal, con capacidad de 108 MP, utiliza la tecnología pixel binnin que combina 9 pixeles 1 y que permite reducir el ruido. A pesar de eso igual podemos realizar tomas con toda la capacidad de la cámara. Con el modo por defecto, a 12 MP, tenemos un muy buen balance de colores, un rango dinámico bastante amplio y muy buen nivel de detalles. Siguiendo con los colores, estos están muy bien logrados, tenemos colores vivos y para nada saturados. Tampoco podemos decir que haya un alto nivel de exposición y el nivel de detalles es alto cuando estamos con las condiciones de luz correctas.

Para las fotografías nocturnas, podemos hacerlo con un «modo nocturno» automático y uno que podemos activar de forma manual y que permite tomar fotografías de larga exposición. Este último es el que ofrece los mejores resultados, obviamente. En cuanto a los resultados, estos logran reducir considerablemente el ruido y nos entregan un mayor rango dinámico del que teníamos normalmente con estas condiciones de luz. Tenemos zonas iluminadas y que no quedan oscuras al 100% sino que de manera gradual como ocurre normalmente. La mayor baja la vemos si acercamos la imagen, entonces ahí notaremos un efecto más distorsionado. La ausencia de estabilización óptica igual hace que no tengamos las fotos más nitidas durante la noche.

Ultra gran angular

Si estamos en buenas condiciones de luz, el sensor ultra gran angular del Xiaomi 11T Pro nos entregará muy buenos resultados. Tenemos un buen manejo de colores y nivel de detalles óptimos para este tipo de cámaras. Personalmente creo que el ultra gran angular del equipo entrega resultados destacables cuando tenemos las condiciones y escenario óptimo para esto, como paisajes y lugares muy abiertos.

En el caso de la fotografía con menos luz o durante la noche, el equipo igualmente nos deja emplear el modo nocturno. Sin embargo, notamos un poco más de ruido, aunque mantiene lo natural de la escena. Con un modo nocturno activado, gana mayor exposición, aunque considero que disminuye se balance de blancos o el manejo de colores disminuye.

Retrato

En primer lugar, nos encontraremos con una cámara que permite regular el efecto de desenfoque, ya sea antes o después de tomar la foto. Debido a que no tenemos una cámara dedicada para esta misión, vamos a emplear la cámara principal del equipo con un zoom 2x y generando el desenfoque. A pesar de eso se obtienen resultados óptimos en la fotografía del modo retrato, aunque los bordes tienden a costar un poco.

Tampoco tenemos el modo HDR en este tipo de fotografía, por lo que a veces podemos notar una pérdida del balance de colores o ajustes en estos últimos.

Macro

A pesar de que me cuesta encontrar una real y completa utilidad para este tipo de cámaras, más cuando funcionan sólo como macro y no como telemacro, podemos tener unos resultados destacables. La cámara macro del Xiaomi 11T Pro, considero, que está por sobre el nivel que encontramos en este tipo de cámaras.

En cuanto a resultados, tenemos una profundidad del campo bien estrecha -obviamente- y el enfoque se realiza por una porción bien pequeña de la imagen.

Cámara delantera

En el caso de la cámara frontal, tenemos un sensor de 16 MP con una apertura de f/2.5. En cuanto a la experiencia, los resultados son bastante óptimos, iluminados y con buen nivel de detalle. A eso podemos sumarle una serie de efectos y filtros de edición, a través de software, que suele ofrecer Xiaomi en sus terminales.

La cámara entrega resultados con una gran nitidez en la imagen. Lo mismo ocurre en el modo retrato con la cámara frontal, la que se comporta de manera correcta y nos entrega imágenes bastante realistas, con buen nivel de colores y balance de blancos.

Video

Uno de los aspectos más destacados por Xiaomi para su 11T Pro está en la grabación. Estamos ante un equipo que permite grabar en hasta 8K (7680 x 720) a 30 fps. Pero también lo podemos hacer en 4K (3840 x 2160) a 30 y 60 fps. Además de Full HD 1080p (1920 x 1080) a 30 y 60 fps, así como también en 720p (1280 x 720) a 30 fps.

En general, y en todas las resoluciones de video, tendremos resultados muy buenos. Hasta la resolución 4K tendremos estabilización eléctrica de videos, la que no está presente en los videos 8K. También podemos realizar videos en formato 2.35:1 como ocurre en las películas de cine.

Durante la noche los resultados también son buenos o lo que podríamos esperar en estas condiciones de luz. Sin embargo, en grabaciones 4K a 60 fps el resultado tiende a oscurecerse aún más. También tenemos, de manera transversal, la aparición de ruido en la grabación.

El equipo trae como video predeterminado la grabación en 1080p, aunque considera que la resolución más ideal es en 4K, ya sea en 30 o 60 fps. A eso debemos sumarle que esta grabación permite el modo HDR e incluso HDR10+. Los videos en 8K se agradecen su incorporación, pero la real utilidad, por ahora, es bien difícil de encontrar, por un tema de mercado.

Algo que me llamó la atención fue la estabilización de los videos, sobre todo si activamos el modo de super estabilizador. A esto también le sumo la serie de modos que ofrece la cámara para los videos. Por ejemplo, podemos encontrar modos para seguir objetivos, audio zoom, zoom mágico, obturador lento, time lapse nocturno, grabación dual, congelación del movimiento, Vlogs, entre otras características.

De todas maneras, te dejo unos pequeños videos en varias opciones para que puedes, tú mismo, ver los resultados del equipo.

8K

4K 30 fps

4K 60 fps

1080p 30 fps

Aplicación de la cámara

En primer lugar, vamos a hablar de las características de software de la cámara del equipo ligadas a este apartado. Por ejemplo, tendremos la posibilidad de guardar nuestras fotografías en formato HEIF y consigo reducir el gasto de recursos. Lo mismo ocurre con los videos que podemos tomarlos en formato HECV. Así como fotografías en JPEG y RAE por su posteriormente quieres editarlas.

Si eres de los usuarios que te gusta editar los parámetros de la fotografía, el nuevo Xiaomi 11T Pro incorpora un modo PRO que permite ajustar la sensibilidad del ISO, punto de enfoque, balance de blancos, tiempo de exposición y más. Si no quieres hacer eso, la compañía emplea un sistema de reconocimiento de escenas que ajusta los parámetros según lo que tenemos al frente.

Respecto a la aplicación de cámara del Xiaomi 11T Pro, considero que está muy bien construida. Primero porque es muy intuitiva, fácil de usar y por sobre todo personalizable. Me parece importante que los usuarios pueden ajustar como estimen conveniente, por ejemplo, los modos de cámara que quieren tener al alcance de las manos. Así como también de fácil acceso las configuraciones de resolución.

Te dejo con un video para que puedas revisar la aplicación de la cámara:

Conclusión y disponibilidad

No cabe duda que estamos ante un potente equipo. Por lo mimos, considero que en gran parte de los apartados el nuevo Xiaomi 11T Pro sabe destacar. De partida tenemos un diseño muy bien logrado y con terminaciones que llaman la atención. Si bien estamos ante un equipo más bien grande y robusto, sus prestaciones -la batería- justifican el tamaño de este.

Respecto a las prestaciones, la pantalla del equipo, la incorporación de tecnología como HDR10+, Dolby Vision o su tasa de 120 Hz entregan una experiencia excelente. Lo mismo ocurre con el procesador, el que salvo el aumento de la temperatura al exigirlo un poco más, responde de manera más que bien.

Punto aparte para la carga extra rápida que incorpora el equipo. Los 120 W son un acierto en su incorporación, no sólo por lo llamativo que puede sonar, sino porque los resultados son realmente sorprendentes y mejorar aún más la experiencia del equipo.

Más que decir lo malo que tiene el equipo, creo que podemos hablar de aquello que le falta al nuevo Xiaomi 11T Pro. Quizás en términos de construcción faltó incorporar protección IP67 frente al agua, ya que sólo es resistente a salpicaduras. Lo mismo ocurre con la parte trasera del equipo, el cual no tiene ninguna protección a diferencia de la pantalla que incorpora Gorilla Glass Victus. Tampoco tenemos una ranura para tarjetas microSD, carga inalámbrica, ni estabilización óptica en la cámara, lo que podría disminuir la experiencia durante la noche. En el caso de la cámara teleobjetivo, yo hubiese preferido esta por sobre un lente macro.

En conclusión, estamos ante un equipo que destaca. Me atrevería a decir que el nuevo Xiaomi 11T Pro es uno de los mejores equipos que he probado hasta hora durante este año.

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