Review TV LG CX de 55 pulgadas

Introducción

Hoy en día existen televisores para todos los gustos. Desde equipos que te ofrecen una muy buena experiencia a un precio relativamente bajo, pasando por otros que te ofrecen lo último en tecnología, e incluso otros que tienen un fuerte enfoque en el diseño y en la experiencia completa de uso.

Nuestro protagonista del día de hoy corresponde al televisor LG CX de 55 pulgadas (modelo OLED55CXPSA), uno de los modelos pertenecientes a la gama 2020 de televisores de la compañía surcoreana, y que viene a ofrecernos una mezcla de estos últimos dos puntos: diseño y tecnología.

Por supuesto, se trata de un televisor de alta gama, y que a nuestro país llegó en versiones de 55 y 65 pulgadas. ¿Valdrá la pena? Eso y más lo veremos en el presente review:

Diseño

Partamos de inmediato con, probablemente, uno de los mejores aspectos de este televisor: su diseño.

Yo creo que este ha sido uno de los pocos productos que, al sacarlo de la caja, he dicho: “wow”, porque vaya que es impresionante a primera vista. Esta primera impresión es así por dos motivos: su pantalla que prácticamente no tiene bordes, y que la mitad de la parte trasera del televisor es extremadamente delgada.

Y es que claro, todos los puertos y las monturas están ubicados en esa suerte de “mochila” que tiene el equipo por atrás, que solamente ocupa la mitad de la parte trasera, mientras que el resto es una superficie lisa que básicamente corresponde a la base del panel OLED, entregando esa sensación de que el televisor es ultradelgado viéndolo desde casi cualquier ángulo.

El modelo de esta LG CX que probamos corresponde a la de 55 pulgadas, por lo que sus dimensiones son relativamente contenidas, aunque no deja de ser un equipo grande (mide 122.8 x 73.8 x 25.1 centímetros con la base, y su masa alcanza los 23 kilógramos).

A propósito de la base, esta consiste de dos piezas (una que va por delante, y otra que mantiene la mayoría del peso, va por atrás), y se ancla al centro del televisor. Esta es relativamente ancha, por lo que debe ser puesta en un mueble ancho.

En cuanto a puertos, tenemos un total de cuatro entradas HDMI 2.1 (de los cuales el segundo es eARC/ARC), tres entradas USB 2.0, un puerto Ethernet, audio óptico y obviamente una para poner una antena o el cable coaxial.

En líneas generales, es un televisor bastante redondo dentro de este aspecto. Se ve excelente estéticamente, y además cuenta con una muy buena selección de puertos, siendo el plato fuerte la inclusión de entradas HDMI 2.1, ideal para lo que hablaremos más adelante.

Pantalla y Audio

Al ser un televisor de alta gama, las especificaciones técnicas de esta LG CX son bastante portentosas, a saber: un panel del tipo OLED de 55 pulgadas con resolución 4K, compatible con HDR10, HLG, Dolby Vision, Nvidia G-Sync, entre otros.

¿Y qué tal es la experiencia de visualización? Pues, como se podrán imaginar, es excelente. La pantalla se ve espectacular gracias al panel OLED, el cual entrega imágenes brillantes, con excelentes colores, y unos tonos negros muy buenos. Todo tipo de contenido en HDR, como películas o videojuegos, se pueden aprovechar al máximo con este televisor.

Hablando de juegos, tuve la oportunidad de probar la nueva Xbox Series X en conjunto con este televisor. Gracias a que esta TV cuenta con HDMI 2.1, pude aprovechar al máximo todo lo que la nueva consola ofrece, como juegos en resolución 4K, o bien, la posibilidad de jugarlos a un framate máximo de 120 fps.

Podría decir que esta LG CX es ideal para videojuegos, porque las cosas no solo se quedan ahí. Como mencioné anteriormente, este equipo es compatible con Nvidia G-Sync, por lo que si cuentas con una PC o laptop con una GPU Nvidia, podrás conectarla a esta TV y aprovechar esta tecnología para disminuir el screen tearing que suele ocurrir de vez en cuando.

Además, — según LG — cuenta con un tiempo de respuesta de apenas 1 ms, reduciendo al máximo todo tipo de input lag que suele haber cuando jugamos con un televisor, algo que es ideal para quienes suelen jugar shooters y otros juegos más competitivos. Yo no cuento con algún instrumento para poder medir esto, pero sin duda se nota que las respuestas son prácticamente instantáneas, y al menos no me sentí incómodo mientras jugaba CoD: Black Ops Cold War o Warzone.

En general, la experiencia de visualización con este televisor es formidable, pero, ¿qué hay del audio? Aquí tenemos un set de parlantes de 40W de potencia, y es compatible con Dolby Atmos para mejorar la sensación de sonido envolvente.

La calidad del sonido, en general, es bastante buena, con tonos altos y medios muy bien balanceados, y unos bajos notorios (aunque no exagerados). Todo esto, por supuesto, es configurable en el menú de opciones, en donde podrás encontrar distintos perfiles de audio y otras opciones más.

Dolby Atmos también juega un papel importante a la hora de tener en cuenta la calidad de audio. El sonido envolvente es convincente dentro de todo, aunque obviamente está muy lejos de la experiencia que te puede entregar un sistema de audio dedicado para ello. De todas maneras, junto con esto, se puede escuchar su buena cantidad de detalles de lo que sea que estemos viendo o jugando.

Software

LG se ha mantenido firme con su propio sistema operativo para televisores — WebOS — con el pasar de los años, y a estas alturas ya es SO maduro, completo y muy amigable con el usuario.

Como siempre, me declaro fan de cualquier interfaz de usuario que solamente ocupe una sola parte de la pantalla. WebOS es así, pues su pantalla principal consiste de una tira que cuenta con acceso a todas las aplicaciones que tengamos instaladas, así como también las configuraciones y otros accesos directos que asignemos.

Me gusta que sea sencilla, pero que a la vez cuente con varias funciones integradas — como un centro de control para objetos de domótica, asistentes, y en general, varias otras soluciones que están bajo el alero de LG ThinQ AI.

Ah, y un detalle muy bueno que tiene este televisor — aunque desconozco si lo traen otros modelos de la marca surcoreana — es que, cuando no se detecta una entrada o se queda en stand-by, en vez de mostrarnos una pantalla negra, se pone un cuadro de fondo. Quizás no se ve tan bien como en el Samsung The Frame (porque debe simular los marcos), pero de todas maneras no deja de ser un muy buen detalle estético.

En cuanto a aplicaciones, tenemos todas las que podamos necesitar (por lo menos aquí en Chile). Netflix, YouTube, Amazon Prime Video y Disney+ ya vienen pre-instaladas, así como también otros servicios más “locales” como Movistar Play o Claro Video. Si falta algo, puedes recurrir a la LG Content Store para descargar más apps.

Por último, esta LG CX también incluye Google Assistant y Alexa como asistentes de voz, y pueden ser accionados a través del control remoto.

Control Remoto

Ya que tocamos el tema del control remoto, hablemos sobre el que viene con este televisor.

Al igual que en otras TVs de LG, este incluye el ya famoso “Magic Remote”, cuya principal gracia es que se complementa con el software del televisor para interactuar con el televisor moviendo el control, así como también para funcionar como puntero.

Honestamente, nunca he logrado acostumbrarme al funcionamiento de este control — más que todo porque nunca le atino a lo que quiero seleccionar, lo sé, soy muy manco —, aunque entiendo que a la gran mayoría de las personas les gusta esto, y por algo se ha mantido con el pasar de los años. Además, como puntero para hacer presentaciones está genial.

Lo bueno es que WebOS está muy bien adaptado, y usar esa característica o los botones no te pone en algún tipo de “ventaja” o “desventaja”, por decirlo de alguna manera.

Volviendo de nuevo al tema del control, obviamente que está construído en plástico, y tiene una forma bastante ergonómica, que hace que se siente bastante bien en la mano. Afortunadamente no está saturado de botones, y en el centro tenemos una rueda que nos sirve para poder desplazarse.

También tiene un botón que sirve para activar el micrófono para poder hablar al asistente, así como también un par de accesos directos para Netflix y Amazon Prime Video.

Conclusiones

Creo que está más que claro que esta LG CX me gustó bastante, y la verdad es que no hay nada malo que le pueda encontrar, porque es un televisor bastante completo.

Completo en el sentido de que en prácticamente todas las áreas cumple de manera excelente: su diseño es maravilloso, y llama la atención desde cualquier ángulo en que la miremos. La pantalla se ve muy bien gracias al panel OLED de resolución 4K, y el audio proveniente de los parlantes se escuchan bastante bien.

Lo mejor es que no solo es un muy buen televisor para disfrutar todo tipo de contenido multimedia, sino que también lo es para jugar.

Gracias a la inclusión de puertos HDMI 2.1, se podrán aprovechar al máximo las consolas de nueva generación — ya que permite tener una tasa de refresco de hasta 120 Hz –, mientras que el tiempo de respuesta de 1 ms hace que nos tengamos que olvidar del molesto input-lag en juegos más competitivos. Y bueno, si tienes una GPU Nvidia, podrás activar G-Sync con este televisor.

De igual forma, en el apartado del software y tecnologías cumple. WebOS ofrece una muy buena experiencia de uso gracias a su interfaz simple y a una amplia variedad de aplicaciones y funciones que tiene incluídas.

Ahora, como podrán imaginarse, nada de esto sale barato. De hecho, podría decir que este como el único “contra” que tiene: es bastante caro. En estos momentos, en diversas tiendas del retail de nuestro país, esta LG CX de 55 pulgadas está a un precio promedio de $1.150.000 (algunos más, otros menos), y obviamente el modelo de 65 sube aún más.

Pagar más de un millón de pesos por un televisor (y en general, cualquier objeto tecnológico) está lejos de lo que podríamos considerar como una decisión racional, y mas bien cae en la categoría de “lujitos”. Pero bueno, es el precio que hay que pagar para poder acceder a la tecnología más top que puede haber hasta la fecha.

Por supuesto, yo no estoy aquí para meterme en el bolsillo del otro. A estas alturas, el decir si vale la pena o no queda a criterio de cada uno, esto según las necesidades y/o usos que le puede dar. La verdad es que para alguien como yo, que veo casi todo el contenido a través de mi teléfono, y que suelo jugar con monitor, definitivamente no lo vale, aunque no puedo negar que quedé maravillado con esta tele.