Review Apple iPad (2025)

Las tabletas aún están vigentes. Al menos para ciertos casos y determinado público. Apple bien lo sabe y continúa con su apuesta en el sector. Su última propuesta radica en su iPad (2025), el modelo «clásico», o estándar, o básico, o de 11ª generación… llámalo como quieras.

Tuve el privilegio de probar este dispositivo durante unas semanas. Es por ello que quiero contar mi experiencia de uso. Describiré a este producto en sus diferentes ítems y facetas. La intención es transmitir al lector mi situación, reflejar el desenvolvimiento de la tablet y qué opino. Así, podrá evaluar si esta alternativa se ajusta a sus necesidades, gustos y preferencias.

Apple iPad (2025): ficha técnica

Diseño

En lo estético, este iPad (2025) tiene DEMASIADO parecido a su antecesor. A pesar de haberse hecho desear esta renovación, luego de meses y meses (o años) de espera, Apple decidió mantener el aspecto. Eso no es ni bueno ni malo en lo personal. Es una forma estratégica de reutilizar algo y abaratar costos.

Yo soy usuario de un viejito y querido iPad de octava generación. Si lo comparo con ese modelo, entonces sí hay cambios notorios. Y van más allá del diseño.

Es de agradecer la implementación de USB-C como puerto/conector cargador. Esto facilita el cargarlo. Ah, y atención, porque este iPad (2025) trae cable de carga y cargador incluidos en la caja. Dicho cargador admite carga rápida de 20 W.

Me gusta mucho cómo luce este iPad. La compañía mantiene el minimalismo y un acabado pulido y maduro. Al sostenerlo en la mano, uno creería portar un producto de mayor gama y precio. Por cierto, este color azul me convenció mucho. Es sobrio. Sale del plateado «clásico» de Apple, o del negro «monótono» que suelen tener otras propuestas.

Las teclas físicas se sienten de calidad. Tanto los dos de volumen (subir y bajar) como el de encendido/apagado, junto a su chasis, transmiten un feeling sorprendente.

Quiero comentarles algo por demás curioso en lo personal. Las teclas de volumen se ajustan según la posición en la cual uno sostiene al iPad. Es decir, si lo tenemos en vertical, el de abajo es para bajar el volumen y el otro para subirlo. Si lo invertimos, las funciones cambian: se baja con el otro botón y se sube con el opuesto (quedan al revés). Lo mismo aplica para cuando lo sostenemos en horizontal, según la (dis)posición.

Pantalla

Considero esto como el aspecto más relevante para una tableta en la actualidad. La gran protagonista es su pantalla. Su panel es IPS LCD, aunque de gran calidad. Será útil para la gran mayoría de usuarios.

Sí, todos quisiéramos un OLED, con una tasa de refresco adaptativa y bla, bla, bla. Ahora bien, ¿es necesario? ¿Este iPad apunta a todo lo alto? Esas preguntas creo son fundamentales para tener en cuenta su gama y su target.

La tasa de refresco permanece en 60 Hz. Algunos lo verán como algo imperdonable, otros (quizás) comprensible. Dado mi uso, puedo vivir con esos 60 Hz sin problema. La manía de una cifra elevada se pasa cuando eres consciente del uso que le das. Yo, por ejemplo, me aboco a consumo multimedia y streaming.

La nitidez de la imagen es MUY BUENA. Su luminosidad cumple a la perfección. El brillo automático se ajusta muy bien en todos los ambientes. Eso sí, si vienes de un lugar que exija mucho brillo y pasas a otro donde sea necesario menos, en muchas ocasiones deberás bajarlo de forma manual. Cuando pasas de un ambiente con poca luz a otro de mayor ahí sí se ajusta mejor por su cuenta.

Los marcos están muy bien. De hecho, hasta se tornan necesarios. El usar un display tan grande en mano suele requerir una zona para «apoyar» la mano. Ante ello, esos marcos reivindican su justificación.

Hardware

Su chipset Apple A16 fue lo que esperaba y más. En cuanto a la RAM, de manera oficial Apple suele omitir este dato. No obstante, según GSMArena contiene 8GB de RAM. Eso es una cantidad estupenda, más para su precio (y el tratarse un dispositivo de la manzana mordida). También es de agradecer comenzar en 128GB de almacenamiento interno.

Su hardware en sí permite muchas cosas: desde hacer actividades cotidianas como revisar redes sociales, correo electrónico y navegación web, como visualizar videos y hasta jugar videojuegos con gran exigencia. Voy a hacerla fácil: es un iPad para más público del que parece.

Tiene capacidades llamativas. En ningún momento percibí sobrecalentamiento. Cuando hice sesiones de videojuegos — en realidad no soy de jugar con tabletas, pero esta vez sí para el review — sentía la tablet a «temperatura normal» en mano. Dejaba de ser tan fría. Lo anterior podría haberse dado por dos factores: 1) El procesador se exigió y calentó un poquito o 2) mis manos absorvieron el frío de ese aluminio y ya lo percibía a temperatura ambiente para mí.

Habrá quienes tengan temor a quedarse «cortos» con esos 8GB de RAM. Es algo a comprobar con el paso del tiempo y la optimización de la empresa. Asimismo, otros experimentarán algo de «temor» por carecer de Apple Intelligence. Bueno… esto último viene atrasado. Los usuarios de Estados Unidos ya disfrutan de la inteligencia artificial (IA) de los de Cupertino. Sin embargo, la pregunta a hacerte es si requieres de IA en tu experiencia con una tableta.

¿Eres de usuarla para consumir contenido multimedial y streaming? Entonces podrías prescindir de Apple Intelligence. ¿La usas en ocasiones para estudio y/o trabajo? Bueno, hay alternativas según requisitos: ChatGPT, generación de imágenes con otras propuestas, Perplexity… a lo que voy: el alcance a la IA es posible. Sí, deberás recurrir a fuentes ajenas a Apple. Pero, si para lo tuyo es fundamental una integración con el sistema, ahí tendrías opciones como los iPad Air y Pro.

En mi caso particular soy del primer tipo de personas, como ya dije. Uso iPad para consumir videos, para ver YouTube, series, películas y hasta partidos (cuando me es posible). Sé una cosa: puedo vivir sin Apple Intelligence en una tableta. O sea, este iPad sería un modelo ideal para mí. Y de seguro para más de uno que lea esta review.

Software

Desde el inicio de los tiempos hace años, Apple se caracteriza por ofrecer una gran optimización en sus dispositivos. Y aquí estamos ante otro claro ejemplo de eso. Es curioso, porque voy usé una palabra ya implementada para un smartphone probado de Samsung, aunque ahora es necesario aplicarla de nuevo para quien podríamos considerarla como su némesis. Dicha OPTIMIZACIÓN es la mejor descripción de esta tablet. Todo funciona a la perfección. Experiencia fluida y sin ningún lag.

De fábrica vino con iPadOS 18. Recibió actualizaciones en poco tiempo y — al momento de redactar este review — quedó con iPadOS 18.5. Otra ventaja consiste en el soporte que suele dar la marca. Por lo menos recibirá updates durante 5/6 años. Eso se agradece.

Si en el diseño físico los cambios fueron pocos respecto a su antecesor, el hardware y, en especial, el software son capaces de justificar su actualización. Pasaron meses (quizás años, ya no recuerdo cuánto) desde el iPad estándar anterior hasta este de 11ª generación. El precio sigue muy contenido.

Por lo cual, si quisieras hacerte con un iPad para «pasar el rato», para consumir multimedia y un uso «normal», recomiendo desde ya esta versión. El lapso para renovarla fue bastante. En hardware la evolución ha sido esperable y coherente. No obstante, te aseguras una vida útil mayor gracias al soporte extendido. El haberse presentado en 2025 y con iPadOS 18 le asegurará una permanencia prolongada.

Oh, sí, cierto. Una cosa… me impresiona la cantidad de apps preinstaladas que trae. ¿Es bloatware? Interesante pregunta. Son aplicaciones propias de Apple y con determinado enfoque y utilidad. Ahora bien… habré usado 5 como máximo de todas ellas.

Seguridad, conectividad y audio

El método de seguridad más usado y práctico para mí fue el lector de huellas dactilares. Espera, ¿dónde está ese lector? Integrado en la tecla de encedido/apagado. A pesar de su forma «larga», para mi sorporesa funcionó MUY BIEN.

Años atrás yo era joven (?) y tenía otro iPad. Venía con Touch ID en el botón del centro-inferior. Andaba de diez. Después pasé a mi iPad de octava generación y la experiencia es muy diferente. Da varios errores y es necesario limpiar «cada dos por tres» ese lector. Y ojo, que es una tecla redonda y en donde cubre a la perfección cualquier dedo.

Este iPad (2025) dispone de un botón alargado. Así y todo, su funcionamiento es un 9/10. Muy pocas veces me dio error. Esos escasos inconvenientes los atribuyo tanto a la forma como la ubicación de la tecla. Y bueno, confieso extrañar el botón en el centro. Manejarme solo con gestos me produce algunos «roces» con la experiencia.

De la conectividad, comento muy breve: todo excelente. Desde su Wi-Fi, a Bluetooth 5.3 y demás tecnologías. El USB-C lo hace muy práctico para cualquier situación y cargador. Hubiera sido perfecto si tuviera una versión más nueva en vez de la interfaz 2.0, pero siempre existe un «pero» en la vida.

El audio es una delicia. Los cuatro altavoces suenan sorprendente. Hasta me impresionó la calidad de los bajos. Yo NO experimenté distorsiones ni nada de similar. Sí «vibra» al poner el volumen a tope. De todas formas, esto último lo hice solo para probarlo. Por lo general, o lo uso a volumen bajo o medio, o recurro a auriculares. La experiencia auditiva es otro de sus apartados en donde uno pensaría encontrarse con un producto de gama más alta.

Batería

Otro ítem omitido por Apple radica en especificar la batería. Y aquí ni siquiera voy a colocar lo dicho en sitios como GSMArena o similares. Iré directo a mi experiencia, sin la capacidad en sí. Spoiler: es MUY BUENA.

La autonomía es la esperada e incluso mejor. Además, destaco la optimización de la organización. Si dejas este iPad (2025) con un 75% en reposo durante horas… al recogerlo seguirá con ese 75% casi con seguridad.

Mi iPad de 8ª gen. por alguna razón que ignoro, no puede hacerlo. Y eso pasa desde el primer día. Raro, porque cuando tuve otra generación anterior sí sacaba provecho de esa optimización.

Más allá de eso, volvamos a este iPad (2025). Te otorgará una autonomía por demás satisfactoria. Un usuario intensivo podría contar una jornada completa de autonomía (salvo que juegues todo el día). Y uno intermedio alcanzará dos días con seguridad. Lo anterior aplicaría para consumir videos, ver streaming, visualizar redes sociales, navegar por la web y mandar correos electrónicos.

Si lo tuyo fuera juegos exigentes o edición multimedial, ahí tendrías mejores opciones. Lo anterior implica desde un iPad Air o iPad Pro… o hasta alternativas Android si quisieras. Este iPad (2025) va para un público masivo: el usuario de a pie, quien lo usa en su casa de forma casual. También serviría para trabajos «ligeros» o estudiantes sin softwares taaan exigentes. Ahí su uso, optimización y autonomía se lucen y relucen.

Cámaras

A ver… ¿quién(es) se ve(n) en la sitaución de sacar cotidianamente su iPad de su bolsillo bolso/mochila para capturar fotografías? El apartado de cámaras lo veo secundario. Para eso uno utiliza su smartphone, salvo que recurras a una cámara profesional. En cualquiera de los casos, se prescinde del iPad.

De todas maneras, es necesario mencionar su sensor principal de 12MP. De forma nativa captura imágenes en formato .HEIC. A continuación te dejo algunos ejemplos con esa lente. Los escenarios varían en exterior e interior:

Captura muy buen video. La estabilización implementada en ellos es impresionante. Aunque, aquí me remito a lo anterior: ¿filmarías con frecuencia con una tableta?

Otro detalle a destacar es simple: haber colocado la cámara frontal en uno de sus biseles para sostenerla en posición horizontal, en vez de vertical. Acá es cuando me pregunto por qué se demoraron tanto en hacerlo. Si realizas videollamadas, te será muy práctico.

Conclusiones

La tableta iPad (2025) es una estupenda opción para los usuarios casuales. Aquellos quienes la utilizarán para consumir contenido multimedial y streaming tienen la que puede suponer la mejor opción del mercado. Ofrece una impresionante optimización, un rendmiento muy capaz y la seguridad de soporte prolongado. Es últil, práctica y versátil. Y pareciera pertencer a una gama top por sus materiales de construcción y la performance. Trabajadores de oficina y estudiantes también cuentan con una alternativa seria.

Reitero una recomendación: si quisieras un iPad y te ajustas a alguno de los perfiles recién mencionados, entonces compra este modelo. Sí, un iPad de 10ª generación andará bien… pero el tiempo constituye el factor diferencial. Este iPad (2025) se hizo desear por mucho tiempo, valga la redundancia del término. El ser tan actual garantiza una vida mayor vida útil.

La competencia lo tiene muy difícil. Hay tabletas Android de precio similares. Aunque la experiencia dista de ser tan «redonda» y equilibrada como este modelo. Eso, aparte de poseer un soporte escaso. Algunas de Samsung sí brindan actualizaciones. Sin embargo, se tratan más de gama alta o precios de otro nivel.

Recomiendo este iPad (2025) ante muchas otras opciones, tanto de Apple como de la competencia. Incluso, invito a varios de Android a «sacarse el miedo». A modo de ejemplo: alguien que conozco y sabe de tecnología pensaba que varias apps cotidianas de Android eran de pago en iPadOS/iOS. Nada más lejos de la realidad. Sí, hay aplicaciones con suscripciones… tanto en iOS/iPadOS como en Android.

En iPadOS tendrás diversas aplicaciones gratuitas e incluso mejor optimizadas. Varias suelen crearse para iPadOS, lo cual asegura esa optimización. En Android un montón de veces es «estirar» la interfaz mobile a mayor tamaño para tabletas. O sea, en vez de ser diseñadas para tableta, son las de teléfonos.

¿Dónde la compro?

La tableta Apple iPad (2025) puede adquirirse desde la web de Apple Chile. Allí se vende a un precio de partida de CLP 439.990 para la versión con 128GB de almacenamiento interno.

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