No siempre el producto final termina cambiando la opinión generada a partir de los rumores, pero creo que en este caso de verdad es así. Tras muchísimas filtraciones sobre los nuevos Moto G5 y G5 Plus, llegué con más dudas que certezas al evento, pero una vez terminado, pude aclarar todo el panorama.
Lo nuevo de Moto parece una evolución lógica respecto de la generación anterior, pero al fin escuchando lo que los usuarios querían. Lo primero, gracias Lenovo por cambiar el diseño del lector de huellas, todos te lo agradecemos. Ah, y el Moto G5 “normal” también lo incluye.
La experiencia pura de Android permanece igual, incluso añadiendo un launcher muy parecido al de teléfonos Pixel. Gracias a esto, todo funciona muy rápido y fluido, al menos en primera instancia, pero Qualcomm está haciendo un muy buen trabajo optimizando sus procesadores de gama media.
El diseño general el equipo está bien, se siente cómodo en la mano, aunque eventualmente podría terminar siendo algo resbaladizo, como cualquier teléfono de aluminio. Solo el G5 Plus presenta una pequeña joroba en la cámara, mientras que el G5 normal no, pero su diseño es algo más tosco.
No sé, quizás no sea un salto de innovación, pero me parecen dispositivos muy competentes por el rango de precios en que viven. Sinceramente, creo que volverán a ser un éxito de ventas en nuestro país, tal como ha sucedido con cada una de las iteraciones anteriores de este popular producto.
