Con la muerte de Windows Phone 8.1 y la poca vida que tiene Windows 10, parece que desde la empresa han elegido que los sistemas operativos móviles ya no van más, y ha sido el mismo vicepresidente de sistemas de Microsoft el que lo ha confirmado.
Mediante una serie de tuits publicados en su cuenta personal de Twitter, Joe Belfiore ha confirmado lo inevitable, argumentando incluso que han intentado revivir la plataforma pagándole a empresas, escribiendo código para ellas para poder incentivar el desarrollo, pero el volumen de usuarios es tan bajo que no se justifica la inversión.
We have tried VERY HARD to incent app devs. Paid money.. wrote apps 4 them.. but volume of users is too low for most companies to invest. ☹️ https://t.co/ePsySxR3LB
— Joe Belfiore (@joebelfiore) October 8, 2017
Ahora bien, Belfiore se ha encargado también de aclarar que seguirán dando soporte a la solución e errores y bugs que puedan aparecer para quienes aún lo usen. De este modo, desde Redmond están apostando ahora a la integración de nuestros smartphones con nuestros ordenadores de escritorio y portátiles.
También están enfocando sus trabajos a otras plataformas, pues como hemos visto, esta semana han publicado su navegador de escritorio, Edge, a plataformas móviles como iOS y Android, lo que hace que ahora su compromiso sea enfocado a mejorar el ecosistema de interacción entre teléfonos móviles y ordenadores.