Hubo un antes y un después del Nexus 6. El dispositivo, co-creado por Motorola y Google, se lanzó de forma totalmente distinta a sus predecesores. Desde su diseño –inspirado en el Moto X– hasta su precio, se salían de lo que venía planteando la compañía desde hace muchos años.
Pero fue un pequeño gran detalle el que terminó por marcarlo como un fracaso: su tamaño. Esas 5.96 pulgadas no convencieron a todos aquellos usuarios –me incluyo– del Nexus 5. Era un cambio demasiado radical e incoherente, tanto así que parecía un terminal de una linea totalmente diferente.
Tras un año y medio de su lanzamiento, el fabricante americano ha salido a reconocer este error. En voz de Adrienne Hayes, encargada de Marketing de Motorola, explicó que:
Yo creo que fue uno de esos donde dices: ¿continuará creciendo? Creo que, desafortunadamente, ese fue uno de los productos ejemplos de un rotundo no. Ahora ya sabemos para una próxima ocasión.
También derivan la mayor parte de la responsabilidad a Google, ya que fueron ellos quienes insistieron en una pantalla de ese tamaño.
Ellos –Google– querían una pantalla de ese tamaño. Nosotros podríamos haberlo construido con el mismo tamaño de pantalla que el Moto X.
Pese a que el Nexus 6 tuvo un mal inicio, hoy en día –y gracias a sus bajas de precio– es considerado un muy buen terminal. Quizás si ese hubiese sido el precio desde un principio, toda la percepción de los usuarios y medios especializados sería muy distinta.
