Con el auge que han tenido los servicios en la nube en el último tiempo, también lo han hecho los nuevos modelos de negocios SaaS, PaaS y IaaS. Es por eso que hoy vamos a tratar de explicar en qué consisten cada uno.
SaaS: Software como Servicio
Partiendo con el más usado por nosotros diariamente, los modelos Software as a Service (o SaaS) es una forma de suministrar aplicaciones a través de Internet, pero como un servicio. Así, en lugar de instalar y mantener el software, basta con acceder a él a través de Internet. En este tipo de servicios, la nube aloja el software de la empresa, así como sus datos, en servidores externos a la misma, y la compañía paga una cuota por su utilización.
Su principal ventaja radica en que nos liberamos de la compleja gestión de software y hardware. Pero también ayuda a impulsar la gestión de clientes potenciales mediante una mejor identificación y seguimiento del ciclo de ventas, mejora la colaboración entre ventas y marketing, capturando y compartiendo mejor la información sobre clientes potenciales y clientes finales, así como también la automatización del marketing agilizando las campañas de marketing digital.
Mismo caso con la gestión de contactos mediante un mejor almacenamiento, organización y seguimiento de la información sobre sus clientes, clientes potenciales y clientes potenciales de ventas.
Las aplicaciones de modelos SaaS a veces también pueden tomar el nombre de software basado en la web, software bajo demanda o software alojado. Aquí, el proveedor gestiona el acceso a la aplicación, incluida la seguridad, la disponibilidad y el rendimiento.
Ejemplos: Google Cloud, Netflix, Office 365, Spotify, Buk o Zoom. Todas ellas podrían caber dentro de este modelo de negocios SaaS.
PaaS: Plataforma como Servicio
Quizás la más difícil de entender, el modelo de Platform as a service (PaaS) hace referencia a los servicios de computación en nube que proporcionan un entorno a la carta para desarrollar, probar, entregar y gestionar aplicaciones o un software determinado.
Está diseñada para facilitar a los desarrolladores la creación rápida de aplicaciones web o móviles, sin preocuparse de configurar o gestionar la infraestructura subyacente de servidores, almacenamiento, red y bases de datos necesaria para el desarrollo.
Este modelo incluye infraestructura -servidores, almacenamiento y redes-, pero también el middleware, herramientas de desarrollo, servicios de inteligencia empresarial (BI), sistemas de gestión de bases de datos y mucho más. También está diseñado para soportar el ciclo de vida completo de las aplicaciones web: creación, pruebas, despliegue, gestión y actualización.
Sus ventajas tienen que ver con reducir el tiempo de codificación, añadir funciones de desarrollo sin necesidad de contratar más personal, desarrollar para múltiples plataformas –incluidas las móviles–, con mayor facilidad, o utilizar herramientas sofisticadas de manera más accesible.
Los riesgos tienen que ver con una excesiva dependencia de proveedores y riesgos de seguridad. Vulnerabilidades de la plataforma y de aplicaciones, así como también el creciente desafío de detectar vulnerabilidades y amenazas y aprender cómo mitigarlas son un riesgo latente. Cada vez es más necesario darle énfasis a esto, pues está en constante evolución.
Ejemplos: IBM Cloud (IaaS y PaaS), Oracle Cloud Platform, Google app engine y OpenShift son los ejemplos más recurrentes de este tipo de modelo.
IaaS: Infraestructura como Servicio
La infraestructura como servicio (IaaS) o Infrastucture as a Service es otra forma de computación en la nube que proporciona recursos informáticos virtualizados a través de Internet. En el modelo IaaS, el proveedor de la nube gestiona las infraestructuras informáticas, como los recursos de almacenamiento, servidores y redes, y los entrega a las organizaciones abonadas a través de máquinas virtuales accesibles por Internet.
Este tipo de modelo proporciona a las empresas la tecnología y la capacidad de los centros de datos de alto nivel. De este modo, las empresas delegan los costes y la complejidad de construir y mantener los servidores físicos. Si las empresas quieren acceder a la infraestructura, generalmente se hace a través de un panel de control, o una API (Interfaz de Programación de Aplicaciones).
La IaaS puede tener muchas ventajas para las organizaciones, como hacer que las cargas de trabajo sean más rápidas, sencillas, flexibles y rentables. Migrar la infraestructura de una organización a una solución IaaS ayuda a reducir el mantenimiento de los data center locales, ahorrar dinero en costes de hardware y obtener información en tiempo real. También ofrecen la flexibilidad de ampliar y reducir recursos de TI en función de la demanda.
Al estar basado en el uso de infraestructura, el mayor riesgo de los modelos IaaS tiene que ver con la seguridad. Accesos no autorizados, Identidades comprometidas o desconfiguraciones de seguridad son los más típicos que encontramos en este tipo de modelos.
Ejemplos de modelos SaaS: Microsoft Azure, Amazon Web Services, IBM Cloud, servicios de Cloud Computing , Cloud Gaming y Google Compute Engine.
ITaaS: Servicios de IT como negocio
ITaaS, o IT-as-a-Service, es un modelo que permite a las empresas acceder y utilizar una amplia gama de recursos y servicios de TI bajo demanda, sin necesidad de inversiones iniciales en infraestructura. Este enfoque permite a las organizaciones pasar de los modelos tradicionales de gasto de capital a modelos de gasto operativo.
Sus principales ventajas tienen que ver con la reducción de costos, aumento de flexibilidad y aprovechamiento de tecnologías avanzadas. También está la escalabilidad, pues si si se necesitan más recursos o más servicios, se pueden añadir de manera muy sencilla.
Aquí, el proveedor presta un servicio de tecnología de la información a una empresa. El proveedor de servicios de TI puede ser una organización de TI interna o una empresa de servicios de TI externa.
El proveedor de servicios de TI, entonces, es el encargado de poner énfasis en las necesidades y los resultados requeridos por la empresa para mejorar la productividad de los empleados. El concepto de ITaaS como modelo operativo no se limita a la computación en nube ni depende de ella.
Sus riesgos tienen que ver con la falta de apoyo en persona. Pero ninguno es más grande que los riesgos de confianza y seguridad. Y es por esto que estamos viendo un auge en los incidentes de ciberseguridad actualmente.
Algunos ejemplos son: Servicios de ciberseguridad, protección contra ataques informáticos, inteligencia de negocios, o soporte remoto son los ejemplos más recurrentes de este modelo de negocios.
Fuentes: Microsoft, SalesForce, Red Hat
