La sequía y falta de agua es uno de los grandes desafíos a los que nos tenemos que enfrentar en esta década entrante. De hecho, la situación es tal, que ya no se descarta la posibilidad de que se tenga que racionar el agua en Santiago durante el próximo verano de 2021, esto debido a la gran sequía que azota la zona central de Chile.
Sin embargo, sabemos que el consumo humano de agua es bastante bajo en comparación al de las grandes industrias (agropecuaria, minera, energética, etcétera), las cuales, además de utilizar varios litros al día, desechan una enorme cantidad de agua. En general, se trata de un uso ineficiente de esta sustancia.
Para esto, la gente detrás de IBM Research en Latinoamérica desarrollaron una nueva tecnología llamada FlowDiscovery, la cual funciona mediante la Inteligencia Artificial, y apunta a optimizar el uso del agua en diversos procesos industriales.
¿Y qué hace? Básicamente, analiza el flujo de diversos fluidos, como el agua o el petróleo, dentro de medios porosos, principalmente rocas y suelos, todo a través de simulaciones. Las aplicaciones de FlowDiscovery varían en función de lo que se necesite. Por ejemplo, se puede utilizar para poder buscar una forma de limitar el uso del agua, y a la vez, poder mejorar la retención de este recurso en los suelos utilizados para la agricultura.
Además, IBM se encuentra trabajando con la empresa brasileña Solintec para poder aplicar esta tecnología en la industria petrolera. Aquí, FlowDiscovery puede ser utilizado para apoyar en la extracción del crudo ubicado en los pequeños capilares de rocas ubicadas en los yacimientos de petróleo. La idea es que a través de imágenes microscópicas de estas rocas, se pueda crear una simulación que permita recuperar de la mejor forma este recurso.
Por el momento, IBM Research está probando esta tecnología en algunas industrias y en el sector académico en Brasil, pero ciertamente tiene un uso que bien pronto podría ser llevado a más países y regiones del mundo.
