En un país donde los Esports apenas comienzan a encontrar su lugar, dos jugadores chilenos se preparan para representar al país en uno de los torneos más prestigiosos del mundo de los fighting games: EVO Francia 2025. Sus historias revelan no solo la pasión por una disciplina compleja, sino también las enormes barreras estructurales y económicas que enfrentan los competidores latinoamericanos para destacar en el escenario internacional.
Nicolás González (Kane Blueriver) lleva más de dos décadas en esta disciplina, convirtiéndose en uno de los pioneros del movimiento competitivo nacional. Su entrada al mundo competitivo se remonta a 2004, cuando tenía apenas 18 años, en una época donde la comunidad chilena de fighting games era prácticamente inexistente.
«Entré al competitivo de juegos de pelea a los 18 años, en 2004. Siempre me interesaron, pero no conocía a nadie que participara activamente. En un sitio web donde era moderador, otro usuario me mostró que existía una comunidad local y global ya establecida. Desde entonces comencé a involucrarme por completo».
Nicolás González
Por su parte, Christian Rosales quien es conocido en el circuito como Pochoclo 23, representa una generación posterior pero igualmente comprometida con la disciplina. Su conexión con los videojuegos nació en la infancia, en el negocio de peluquería de su madre, donde las máquinas arcade se convirtieron en su primera escuela y despertaron una pasión que definiría su futuro competitivo.
«Mi conexión con los videojuegos viene desde la infancia. Mi madre era peluquera y trabajaba cerca de unas máquinas arcade. Cuando era niño me subía a ellas para poder jugar, y eso forjó mi espíritu y gusto por el arcade. Empecé a tomarme los fighting games en serio hacia 2013 o 2014, aunque conozco a Nicolás desde 2008».
Christian Rosales
El encuentro de dos mundos competitivos
La historia de cómo estos dos competidores se conocieron ilustra tanto la naturaleza íntima de la comunidad chilena de fighting games, como la forma orgánica en que se desarrollan las influencias y mentorías dentro de este ecosistema.
Fue en un torneo en Melipilla donde sus caminos se cruzaron, unidos por Marvel vs Capcom, un juego que marcaría el inicio de una colaboración profesional y personal que perdura hasta hoy.
«Nos conocimos cuando entré a la comunidad jugando Marvel vs Capcom, donde Nicolás ya era reconocido. En un torneo en Melipilla me dijeron que alguien estaba usando el mismo equipo que él. Yo lo había visto jugar y por eso usaba su composición de personajes. Al principio comencé con ese equipo y después desarrollé mi propio estilo».
Christian Rosales
Esta anécdota revela algo fundamental sobre la escena chilena: es lo suficientemente pequeña como para que los jugadores se reconozcan entre sí y se influencien mutuamente, pero lo suficientemente apasionada como para generar vínculos duraderos y transferencia de conocimiento entre generaciones.
La relación entre ambos trasciende la simple coincidencia, convirtiéndose en una asociación estratégica donde la experiencia analítica de González complementa la dedicación y el enfoque de Rosales.
La preparación competitiva hacia el EVO Francia 2025
Uno de los mayores malentendidos sobre los Esports, particularmente los fighting games, es la percepción pública de simplicidad que reduce esta disciplina a “tomar un control y ejecutar combos”. La realidad que enfrentan estos competidores dista enormemente de esta visión superficial, revelando un mundo de preparación meticulosa, sacrificios económicos y dedicación que rivaliza con cualquier deporte tradicional.
González es directo al describir los desafíos históricos que ha enfrentado: la ausencia total de apoyo financiero institucional para dedicarse completamente a la disciplina. Sus experiencias en Japón y Estados Unidos fueron, en sus propias palabras, casi de mochilero.
«Históricamente, he enfrentado la falta de apoyo financiero para dedicarme a tiempo completo. Cuando pasaba largas temporadas en Japón y Estados Unidos, primero debía resolver mi sustento diario y luego usar el tiempo restante para practicar».
Nicolás González
La complejidad de la preparación va más allá de los recursos económicos y se adentra en aspectos técnicos y estratégicos que requieren comprensión profunda de múltiples sistemas de juego.
«Los fighting games son como el atletismo: tienen distintas ramas que requieren habilidades específicas. Aunque todos sean juegos de pelea, cada título exige destrezas muy diferentes para alcanzar la excelencia, y el entrenamiento debe adaptarse según el juego disponible y los compañeros con quienes practicar».
Nicolás González
Superación personal
La historia de Christian Rosales añade una dimensión particularmente inspiradora a esta narrativa, demostrando cómo las limitaciones físicas pueden transformarse en fortalezas estratégicas cuando se combinan con determinación y método.
«Nicolás y yo compartimos un estilo basado en el estudio profundo de situaciones para obtener ventajas estratégicas. Mi enfoque surge de una condición de salud que afecta capacidades clave en los juegos de pelea, como los tiempos de reacción y la coordinación. Tengo una enfermedad neurodegenerativa llamada Charcot-Marie-Tooth (CMT)».
Christian Rosales
Lejos de convertirse en una barrera insuperable, esta limitación ha moldeado una filosofía de trabajo que trasciende las capacidades físicas inmediatas, enfocándose en el desarrollo de habilidades complementarias y una ética de trabajo que compensa las ventajas naturales de otros competidores.
«Esta limitación me ha ayudado a conocerme mejor y a buscar caminos alternativos. He desarrollado resiliencia mental y una ética de trabajo que compensan las facilidades naturales de otros jugadores. Con estudio intensivo y esfuerzo constante, puedo superar las ventajas innatas que otros poseen».
Christian Rosales
Preparación mental y manejo de presión para eventos como EVO Francia 2025
En el nivel competitivo más alto, la preparación mental se vuelve tan crucial como la técnica pura, determinando con frecuencia la diferencia entre el éxito y el fracaso en momentos decisivos.
Rosales identifica las expectativas como el principal enemigo de la performance competitiva, explicando cómo la presión autoimpuesta puede sabotear años de preparación técnica.
«La presión surge principalmente de las expectativas sobre los resultados deseados. La mejor forma de liberarse de ellas es dejar esas expectativas de lado y concentrarse en aplicar lo que se ha estudiado y preparado. En los torneos siempre pueden aparecer complicaciones imprevistas, como enfrentamientos difíciles o matchups desfavorables que desgastan mentalmente».
Christian Rosales
Por su parte, González comparte esta filosofía procesual, desarrollando una analogía médica que reenmarca la participación en torneos como un ejercicio diagnóstico antes que una búsqueda de validación.
«Comparo ir a un torneo con ir al médico: vas para identificar qué está funcionando mal, corregirlo y probarlo en el siguiente evento. Es un proceso constante de prueba y error. Los resultados son consecuencia de lo invertido, pero en la competencia debes concentrarte únicamente en resolver los problemas que plantea el oponente».
Nicolás González
Chile y los fighting games: una relación compleja
A pesar de los logros individuales alcanzados por estos competidores, ambos reconocen las limitaciones estructurales profundas que enfrentan en Chile. González es particularmente crítico sobre la ausencia de una cultura gaming sólida en el país, contrastando la situación nacional con ejemplos regionales donde los Esports han alcanzado un estatus de fenómeno cultural como en Estados Unidos o Japón.
Esta falta de cultura se traduce directamente en ausencia de apoyo económico y comprensión pública, creando un círculo vicioso donde la falta de entusiastas limita el financiamiento y, con ello, el desarrollo de nuevos talentos.
«En Japón, cuando un jugador de alto nivel hace streaming, atrae multitudes interesadas en aprender. Preguntan por torneos, estrategias y matchups, porque existe un deseo cultural de aprender de los mejores. En Occidente, incluyendo Chile, la mayoría de los espectadores busca entretenimiento, y no un desarrollo competitivo».
Nicolás González
Los fighting games enfrentan un desafío particular dentro del ecosistema de esports chileno, luchando contra la tendencia hacia experiencias de entretenimiento inmediato que caracteriza el consumo masivo de videojuegos.
«Hoy existe más reconocimiento que antes, pero todavía falta mucho por avanzar. Tras la pandemia los videojuegos se popularizaron masivamente, aunque la mayoría prefiere títulos casuales de entretenimiento inmediato y no experiencias altamente competitivas».
Nicolás González
La realidad económica
Quizás el aspecto más revelador y perturbador de esta entrevista es la descripción de las realidades económicas que enfrentan los competidores chilenos. González utiliza el ejemplo paradigmático de los gemelos Martínez para ilustrar la paradoja del ecosistema competitivo.
«Mira a los gemelos Martínez: en 2023 fueron campeón mundial y tercer lugar en EVO, pero entre ambos no lograron cubrir los gastos del viaje y terminaron en números rojos. Mientras tanto, streamers y casters tienen ingresos garantizados y aseguran su presencia en los eventos importantes».
Nicolás González
La diferencia de recursos con competidores de otras regiones no es solo significativa, sino estructuralmente determinante en las posibilidades de desarrollo profesional.
«Los jugadores estadounidenses, europeos o japoneses pueden permitirse resultados pobres en torneos sin consecuencias mayores: regresan a casa y continúan normalmente. Yo, en cambio, pasaba de seis a nueve meses en el extranjero entrenando, durmiendo en sofás, pisos o colchones inflables donde pudiera, buscando forjarme un camino en los torneos».
Nicolás González
EVO Francia 2025: una oportunidad trascendental
En este contexto de limitaciones estructurales y sacrificios personales extremos, la oportunidad de competir en EVO Francia 2025 con apoyo de patrocinadores representa mucho más que un torneo. Es la validación tangible de años de sacrificio, la posibilidad de competir en condiciones relativamente equitativas y una ventana hacia lo que podría ser una carrera sostenible.
«Por eso las oportunidades como esta son tan valiosas. Que una marca como Proton nos permita viajar sin el estrés de financiar todo hace una diferencia enorme y así solo te enfocas en la competencia. Los sacrificios son constantes: si pierdes, puedes perder tu carrera e incluso tu sustento básico».
Nicolás González
Para Rosales, EVO Francia 2025 también representa la oportunidad de demostrar el aspecto artístico y emocional de los fighting games, elementos que frecuentemente se pierden en discusiones centradas únicamente en lo técnico o lo económico.
«Me gusta jugar ante audiencias porque las reacciones del público fueron una de mis motivaciones iniciales para entrar a los fighting games. Elijo personajes vistosos y técnicos justamente para generar esas emociones. Mi expectativa es poder jugar en las transmisiones oficiales de EVO y entregar esa experiencia al público».
Christian Rosales
El futuro de una disciplina en evolución
A pesar de los desafíos y las barreras estructurales, ambos competidores mantienen un optimismo cauteloso sobre el futuro de los fighting games en Chile. González destaca el impacto transformador de la nueva generación de jugadores chilenos, cuyo éxito internacional comienza a cambiar percepciones tanto dentro como fuera de la comunidad.
«Creo que la nueva generación chilena de juadores de fighting games está cambiando la percepción. Los gemelos Martínez en Mortal Kombat, junto con Blaz y Craime en Street Fighter, han convertido este género en un referente más atractivo, especialmente ahora que otros Esports como League of Legends o los Battle Royale ya no generan la misma novedad».
Nicolás González
Las trayectorias de Nicolás González y Christian Rosales condensan lo que significa dedicarse a una disciplina poco comprendida en Chile: sacrificio, resiliencia y pasión genuina. Hoy, su presencia en EVO Francia 2025 no solo es el resultado de años de trabajo en silencio, sino también la oportunidad de mostrar que detrás de cada partida existe una historia de esfuerzo y de sueños compartidos.
Te recordamos que el Evolution Championship Series (EVO), el torneo de juegos de pelea más emblemático del mundo, se realizará por primera vez en Europa del 10 al 12 de octubre, evento que estaremos cubriendo acá en Pisapapeles.
