El gigante informático Intel ha dado a conocer novedades en relación con los controladores gráficos integrados de sus CPUs. Esto incluye procesadores para equipos de escritorio, como también las variantes para computadores portátiles.
Si eres usuario de alguna CPU Intel de 11ª, 12ª, 13ª y 14ª generación, te informamos que las GPUs de estos procesadores pasarán a formar parte del programa legacy (heredado). Es decir, los chips con arquitectura Tiger Lake, Alder Lake, Raptor Lake y otros, recibirán únicamente correcciones críticas y parches de seguridad. Por lo que no habrá mejoras de rendimiento, ni llegarán nuevas funciones o compatibilidad con nuevos juegos desde el día cero. También es importante indicar que bajo el programa legacy, los controladores se actualizarán de manera trimestral.

Lo anterior también queda en evidencia por la separación de los controladores gráficos con los modelos más recientes. Diferenciando los antes mencionados, de los nuevos drives para los procesadores Intel Core Ultra, las gráficas Intel Arc y Arc Pro. Con esto, Intel da prioridad a sus nuevos lanzamientos y mantiene las actualizaciones regulares y con nuevas funciones para estos modelos.

Los usuarios que cuenten con procesadores de la 11ª a la 14ª generación seguirán teniendo soporte, pero solo estará limitado la corrección de vulnerabilidades (seguridad). También es muy probable que los fabricantes de portátiles y equipos de escritorio (armados por una compañía) dejen de lanzar versiones personalizadas de controladores con funciones adicionales.
Igual es esperable que con la finalización progresiva del soporte, Intel «motive» a sus consumidores a que se pasen a las nuevas arquitecturas. Ahora bien, si te armaste un PC de escritorio y tienes una GPU dedicada de color verde o rojo, esto literal te puede importar 10 hectáreas.

