Sin duda alguna que el coronavirus ha cambiado –a la fuerza– la modalidad en que muchas empresas se relacionan con sus trabajadores. En este contexto, Google ha comunicado a todos sus trabajadores que las oficinas no estarán abiertas hasta julio de 2021.
Así lo ha transmitido Sundar Pichai, CEO de Alphabet, a sus propios empleados en una nota:
Espero que esto les ofrezca la flexibilidad que necesitan para balancear el trabajo con cuidarse a ustedes mismos y a sus seres queridos en los próximos 12 meses.
Esta es una medida que, sin duda, será tremendamente beneficiosa para los más de 200.000 trabajadores de la compañía. Pese a eso, esto traerá consecuencias importantes para los planes de Google en el mediano y largo plazo.
Ya sabemos todas las dudas que se habían generado con respecto del futuro de la línea Pixel, y con esta noticia, muy probablemente, se verá un desfase en los planes. Retomando, el Pixel 4a debería ver la luz el próximo 3 de agosto (siendo que estaba pronosticado para mayo), mientras que el Pixel 5 podría verse aplazado directamente hasta el próximo año.
No solamente los teléfonos se verán afectados, si no que cualquier lanzamiento relacionado con hardware se verá desfasado por, al menos, algunos meses. Por ahora es incierto a que proyectos se les dará prioridad, pero suponemos que todo lo que tenga que ver con software tendrá sufrirá un impacto mucho menor.
Pese a esto, esta medida es un espaldarazo de Google a su equipo de trabajo, confiando plenamente en lo que pueden hacer de forma remota. Es de esperar que el resto de los gigantes tecnológicos en California anuncien pronto medidas similares o, al menos, sus intenciones de cara a la situación actual hasta que podamos superar esta pandemia.
Fuente: Wall Street Journal
