Samsung está listo para renovar su línea de gama alta accesible con el lanzamiento del Galaxy S25 FE, un dispositivo que mejora varios aspectos clave respecto a su predecesor, aunque con algunos recortes. Mantendrá una pantalla Dynamic AMOLED 2X de 6,7 pulgadas con resolución Full HD+ y tasa de refresco de 120 Hz, ahora protegida por Gorilla Glass Victus. En su interior integrará el procesador Exynos 2400 junto a 8 GB de RAM y hasta 256 GB de almacenamiento.
Una de las principales novedades está en su diseño más delgado (7,4 mm) y liviano (190 g), además de una batería ligeramente reducida a 4.500 mAh que se compensa con carga rápida de 45W. También ofrece carga inalámbrica de 15W y certificación IP68. En fotografía, apuesta por una configuración triple: sensor principal de 50 MP con OIS, gran angular de 12 MP y teleobjetivo de 8 MP con zoom óptico 3x, más una cámara frontal de 12 MP.
El Galaxy S25 FE debutará con One UI 8 basado en Android 16 y sumará funciones de Galaxy AI. Aunque el anuncio oficial se espera para septiembre, podría adelantarse a agosto o coincidir con la feria IFA. Su precio estimado será de 600 euros, posicionándose como una alternativa atractiva dentro del ecosistema Samsung.

