Qualcomm hace menos de una semana presentó la nueva tecnología que permite ubicar un lector de huellas ultrasónico dentro de la pantalla de smartphones, pero ahora algunos analistas creen que la tecnología tiene problemas y que está lejos de estar finalizada.
Por ejemplo, para Ming-Chi Kuo, los problemas radican en la velocidad y precisión del mismo, y los fabricantes que se atrevan a lanzar la tecnología antes que el resto, como Vivo, podrían tener problemas de no ser solucionados los mismos antes del lanzamiento de sus dispositivos, pues aún no es lo suficientemente rápido ni preciso según pudo averiguar.
Los problemas se explican debido a que para que estos lectores funcionen, la pantalla de los nuevos dispositivos tiene que ser más delgada de lo que acostumbramos hoy en día, pantallas que son extremadamente difíciles de conseguir actualmente.
De este modo, no sería descabellado pensar que los smartphones con lectores de huellas ultrasónicos dentro de las pantallas sufran retrasos y no alcancen a llegar este invierno, lo que concuerda con los reportes de los problemas que han sufrido productores como Samsung o Apple.