El cuento Apple-FBI que ya lleva un buen tiempo apareciendo en los titulares de los principales sitios de tecnología, hoy día tiene una nueva cosa que contar. Se ha desvelado –más o menos– el precio que pagó el FBI a la compañía que les proporcionó el software necesario para poder acceder al iPhone 5C de Syed Rizwan Farook, el terrorista que perpetró un atentado en la ciudad de San Bernardino, California.
El Director del FBI, James Comey, fue consultado en el Foro de Seguridad Aspen sobre cuánto dinero pagó la institución para poder acceder al iPhone del terrorista, en donde Comey respondió que fue “Más de lo que ganaré en todo el tiempo restante en este trabajo, que son siete años y cuatro meses seguro”.
Anualmente, James Comey gana un poco más de $183.000 dólares al año, lo que se traduce en aproximadamente unos 1.3 millones de dólares de sueldo hasta que acabe su cargo. Con esto podemos deducir que el FBI ha pagado una cifra récord, siendo que la última vez que requirieron de una ayuda así, el monto fue de 1 millón de dólares.
Sea o no sea una noticia relevante, con esto nos podemos hacer una idea de cuánto está dispuesto a pagar un gobierno para poder descifrar un teléfono perteneciente a un terrorista, y a la vez, comprometer la seguridad de varios usuarios que no tienen nada que ver con el tema, a pesar de que el hack no funcione desde el iPhone 6 en adelante.
