Fibra óptica portada

Conductividad Austral, empresa a cargo de la fibra óptica en Magallanes, está operando a pérdidas por falta de interés por parte de los operadores

En aprietos se encuentra la fibra óptica disponible en zona austral del país, la que se encuentra a cargo de Conductividad Austral, ya que están faltos de clientes y están operando a pérdidas.

Este cable de fibra óptica que conecta el interior de la Región de Magallanes, comenzó a operar en marzo del año 2020, en pleno inicio de la pandemia, por lo que obviamente no ha tenido el éxito esperado.

Pero no podemos culpar a la pandemia, ya que, pese a que este proyecto llevó varios años llevarlo adelante, los operadores Entel, Movistar y WOM siguen hasta la fecha sin ofrecer planes a clientes residenciales o comerciales.

El único que tiene activo sus servicios en esta red de fibra óptica es el operador mexicano Claro Chile. Sin embargo, solo utiliza el 5% de la capacidad que tiene disponible esta red, generando así los problemas económicos que enfrenta la empresa Conductividad Austral.

La empresa a cargo del proyecto, tenía previsto 12 meses sin contratos, lapso de tiempo en que se suponía se buscaría sumar a empresas como WOM, Movistar y Entel, entre otras y así funcionaría el negocio. Sin embargo, la cosa es diferente y no se ven futuras contrataciones por venir.

El Subsecretario de Telecomunicaciones, Francisco Moreno, se refirió a este tema en conversación con el Diario Financiero, agregando que se reunirá en las próximas semanas con los representantes de Conductividad Austral para ver la situación de la empresa para que se pueda empujar el uso del cable por empresas privadas y públicas.

“Estamos disponibles para propiciar una mesa de trabajo con Conductividad Austral, tal como lo realizamos con la empresa CTR, instancia que consiguió resultados muy positivos con las operadores que hoy ya están funcionando sobre la Fibra Óptica Austral. Somos los más interesados en incentivar el uso de la fibra óptica, y así beneficiar a miles de usuarios en la zona más austral del país”.

También se ha pensado en el caso de que la empresa se vaya a quiebra. En ese caso, la autoridad podría autorizar la enajenación de la concesión o infraestructura desplegada a fin de dar continuidad de servicio. De esta manera, se traspasaría todas las obligaciones que establece el contrato al nuevo titular de los derechos.

El ex Subsecretario de Telecomunicaciones, Pedro Huichalaf, agregó que, si en el caso de que la empresa abandone la red, la cartera podría levantar cargos y dejar sin efecto el contrato por incumplimiento del concesionario.

Con información de Diario Financiero