Los wearables poco a poco comienzan a hacerse parte fundamental de nuestra vida, y no son pocos los fabricantes que se han atrevido a hacer ediciones especiales o nuevos productos centrados en los más pequeños del hogar, lo que para algunas empresas se acaba de convertir en un dolor de cabeza.
La agencia regulatoria de comunicaciones de Alemania ha denunciado a algunas empresas –cuyos nombres no han sido revelados aún–, de que estos relojes inteligentes, que cuentan con una tarjeta SIM con aplicaciones remotas, pueden ser usados por personas para escuchar a toda hora de las conversaciones que tienen los infantes, lo que a todas luces, corresponde a un delito.
La investigación también reveló que los padres usaban estos dispositivos para escuchar a los niños mientras estos estaban en la sala de clases, lo que está prohibido también por las leyes germanas.
Las acciones han dejado en entredicho el uso del internet de las cosas en el país europeo debido a problemas de privacidad, y mientras dura la investigación, el uso de estos smartwatches está prohibida.