Si miramos la historia de Apple y Google vemos que, a lo largo del tiempo, han ido coincidiendo en sus innovaciones para revolucionar el mundo de la tecnología. Claramente, eso no es nada malo, por el contrario, los únicos beneficiados hemos sido siempre nosotros, los amantes de lo nuevo. Teléfonos inteligentes, computadores portátiles, relojes inteligentes, pero hasta ahora Apple se había quedado afuera de algo que está en boca de todos hace un tiempo: las gafas.
Google marcó la pauta al presentar de forma temprana los Google Glass, revolucionando el mercado con un producto que otras empresas no pudieron imitar. Sony se subió al carro presentando su propio modelo, pero parecía que nadie podía destronar a la empresa del buscador. Pero llegó el eterno enemigo, el némesis y, evidentemente, el único que realmente puede competir con la gran G. Apple ha patentado su propia versión de unos lentes inteligentes.
El nombre clave de esta tecnología es Lifestream, y busca solucionar facilitar al usuario el manejo de la información en su dispositivo. Así, se entiende que los lentes de Apple podrían recibir notificaciones e interactuar con ellas. Pero esto no se queda ahí, la patente afirma que también contarían con reconocimiento facial, patrones de respiración, dilatación de las pupilas, lagrimas, parpadeos, gestos y otras cosas muy interesantes.
Se desconoce mayor información respecto al dispositivo, dado que debe estar en etapas de temprana fabricación a modo de pruebas. Tampoco tienen nombre definido, aunque no extrañaría que viéramos unos Apple Glass en el mercado en el mediano plazo.