Generalmente, cuando una versión de Android es presentada, la adopción demora un tanto debido a la lentitud de los fabricantes por incorporar las nuevas características del sistema a esta nueva versión, y este año las cosas parecen no cambiar.
La ausencia de Pie
Según las cifras oficiales de Google para el mes de septiembre, Android Pie (9.0) no aparece en las cifras de distribución, mientras que el sistema anterior, Android Oreo, se encuentra instalado en el 14.6% de los dispositivos.
Android Nougat siegue siendo la versión con más adopción rondando el 31%, mientras que Marshmallow (22.7%) e incluso Lollipop (19.2%) se encuentran instalados en más dispositivos que Android Oreo, lo que no es sorpresa, pero que no es una buena noticia.
Así, lo que alguna vez se creyó que podía cambiar con la llegada de Project Treble, está demostrando nuevamente ser un fracaso, pues las distintas empresas y marcas no han logrado apurar las actualizaciones de sus dispositivos, y podemos contar con los dedos de una mano aquellos que han sacado al día de hoy alguna actualización a Android Pie en sus dispositivos.
Quizás las cosas puedan cambiar de aquí a un mes más con los anuncios que se esperan por parte de Huawei o incluso Google con los nuevos Pixel, pero el problema de fondo en Android sigue siendo el mismo, y es que las actualizaciones parecen ser demasiado, demasiado lentas.