Las aplicaciones móviles hoy en día se están haciendo cada vez más pesadas, y desde Google lo saben, y en Android 8.1 una nueva característica llega para liberar espacio a los usuarios, claro que con algunas limitaciones.
Resulta que con la última versión del sistema operativo de Google las aplicaciones cuando son marcadas como inactivas por el sistema, bajan de prioridad inmediatamente haciendo que las mismas no generen archivos caché, impidiendo que se agranden inmediatamente en tamaño.
Ahora bien, Android sólo marca cono inactiva una aplicación cuando la misma no ha sido utilizada en segundo plano, ni otra aplicación la ha usado tampoco en segundo plano, por lo que esto tiene sus limitaciones.
A pesar de que el avance es notorio y el beneficio también lo es para los usuarios que tienen almacenamiento limitado, es difícil el poder ver los beneficios en el corto plazo, ya que no son muchas las marcas que actualizarán los dispositivos actuales a Android 8.1, y las empresas ya están subiendo el mínimo de almacenamiento a 32GB.