Cuando los teléfonos empezaron a migrar hacia cables USB-C en sus terminales, pocos pensaron que finalmente esto se transformaría una tendencia importante y que incluso llegaría a que firmas de gama media estén incluyendo este tipo de conectores en sus terminales.
Sea cual sea la razón que esgrimen las distintas marcas por cambiar a USB-C, que es lo lógico a esta altura, ha parado de incluir este adaptador de sus terminales, y prueba de esto son sus gama media de este año, hablamos de los Galaxy A8 (2018) y Galaxy A8+ (2018).
El caso es que estas iteraciones de teléfonos de Samsung no vienen con el clásico adaptador a USB-C, lo que marcaría un precedente, pues a partir de ahora la empresa no incluiría más este adaptador que algunas otras compañías si siguen incluyendo.
Ahora Samsung está incluyendo otras cosas en sus dispositivos, como lo son las carcasas o cables OTG, y dado que estos adaptadores vienen en los teléfonos de Samsung desde 2016, los consumidores habrían tenido tiempo suficiente para hacerse de uno en este tiempo. Tampoco es muy difícil hacerse de un cable USB Tipo-C hoy en día, por lo que estos adaptadores de Samsung viven ya sus últimos días.
