Introducción
Si quieres tener iOS en un teléfono, la respuesta siempre es demasiado obvia: un iPhone. En el mundo de Android la cosa siempre ha estado muchísimo más dividida, siendo Samsung y Huawei los reyes del segmento, pero desde hace algunos años que un nuevo competidor viene pegando muy fuerte en el horizonte. Hablamos del Google Pixel 3 XL.
Sí, se que a estas alturas están pensando: ¡pero no vende ni una décima parte que los otros fabricantes! Y es verdad, pero Google está apuntando cada vez más alto con sus dispositivos, marcando la pauta de como debería ser un teléfono con Android.
En su tercera generación el Pixel 3 XL viene a corregir muchas de las cosas que se le criticaron a su predecesor, logrando cubrir casi todas las casillas de los pilares de lo que quiere uno en un teléfono. ¿Ya tengo tu atención? ¡Vamos a revisarlo!
Especificaciones
FABRICANTE, MODELO Y DATOS DEL REVIEW
– Google
– Pixel 3 XL 64GB Clearly White, Versión US
– Autor: Pedro Segura
– Fotografías del equipo: Pedro Segura
– Periodo de prueba: 31 de octubre – 10 de noviembre
REDES MÓVILES
– 3G: 850 (Movistar/Claro), 900 (Entel), 1700/2100 AWS (WOM), 1900 (Entel/Movistar/Claro)
– 4G LTE: B1, B2 (Entel/Claro), B3, B4 AWS (WOM), B5, B7 (Movistar/Entel/Claro), B8, B12, B13, B17, B18, B19, B20, B25, B26, B28 (Movistar/Claro/Entel), B29, B32, B38 (Movistar), B39, B40, B41, B42, B46, B66, B71.
– Categoría LTE CAT 16 1024/75Mbps
– Compatible con 4G+
– Opera nativamente con Entel, Movistar, WOM y Claro.
HARDWARE Y SOFTWARE
– Pantalla OLED de 6,3 pulgadas con resolución QHD+, aspecto 18.5:9, compatible con HDR, Corning Gorilla Glass 5 y Always-On Display
– Procesador Qualcomm Snapdragon 845 octacore, Pixel Visual Core, Titan M
– Memoria RAM de 4GB y almacenamiento interno de 64GB
– Procesador gráfico Adreno 630
– Altavoces estéreo frontales
– Bluetooth 5.0 LE
– GPS, AGPS, GLONASS, GALILEO
– Puerto USB-C
– Pixel Imprint
– Cámara principal de 12 MP f/1.8 con estabilización óptica, HDR+ y video 4K a 30 cuadros por segundo.
– Cámara frontal 8 MP f/2.2 + 8MP f/1.8 con video Full HD 30fps
– Sistema operativo Android 9 Pie
– Batería de 3.430 mAh con soporte de carga rápida e inalámbrica estándar Qi
Diseño
¿Comenzamos por lo que todos tienen en mente? Si miramos de frente el Pixel 3 XL lo primero que vemos es un notch, mucho más alto que ancho, que cubre un porcentaje considerable de la parte superior. Primero aclaremos este tema: la parte frontal no tiene nada de bonita, es más bien simple, simétrica, pero aburrida y muy 2018.
Con «2018» me refiero a que prácticamente todos los teléfonos de este año han tenido este patrón, unos con más y otros con menos bordes, unos con su notch más grande y otros con uno más pequeño. Es muy probable que de acá al próximo año todos los teléfonos sean todo pantalla por delante, por lo que la única forma de diferenciarse será en la parte trasera.
Es aquí donde Google dio un nuevo paso en la dirección correcta. El diseño que vimos en la generación pasada de teléfonos Pixel fue bastante sobrio, sin arriesgar mucho en ningún aspecto. Este año seguimos la misma tónica, pero mejorando en detalles que comienzan a marcar la diferencia.
¿Y el resto del teléfono?
En primer lugar, pasamos de aluminio a vidrio –¡carga inalámbrica, yay!–, lo que da un tacto mucho más agradable al tomarlo en la mano. Además, da una sensación mucho más premium, aunque sin duda alguna será mucho más fácil que se raye si lo metes en el mismo bolsillo que tus llaves.
En esta ocasión todo se siente mucho mejor ensamblado, incluso dejando uno de los laterales del teléfono sin absolutamente nada, dejando así la bandeja para la SIM en la parte inferior. Al lado encontramos la entrada USB-C –que fue pintada en la interna de color negro– y por el lado derecho aparecen los botones de volumen y encendido, el cual en las variantes Clearly White y Not Pink es de color (y se ve hermoso).
Si bien no es el teléfono más hermoso e innovador del mundo por atrás, sí está dejando claro hacia donde va Google, que propone y nos da un vistazo de donde podría llegar en un futuro. Si me preguntan a mí, creo que sorprenderá a más de alguno al tenerlo en la mano.
Ah, y antes que se me olvide, el motor de vibración es por lejos el mejor en cualquier Android, aunque sigue estando un pasito debajo de las nuevas generaciones del iPhone.
Pantalla
Este era uno de los apartados que más tenía preocupado antes de tener el teléfono en mis manos. ¿Por qué? Básicamente porque uno de los más grandes puntos débiles del Pixel 2 XL era su pantalla, que no es terrible, pero estaba considerablemente bajo la calidad de su competencia directa.
Una grata sorpresa nos encontramos al mirar el PIxel 3 XL, ya que Google ha optado por utilizar un panel OLED de Samsung, el cual se ve muy bien. Encontramos una imagen nítida, con una calibración de color exquisita y un brillo bastante decente, aunque creo que este es uno de los puntos que podría haber sido mejores. Mirando el teléfono directamente bajo el sol no se ve tan bien como un Galaxy Note 9, por ejemplo.
Creo que mi mayor crítica de la pantalla es que el ratio de pantalla sobre la parte frontal no es el mejor, dado que el borde de abajo sigue utilizando mucho espacio, lo mismo que el notch en la parte superior.
Google está tomando decisiones correctas respecto de las piezas que está utilizando, y está mejorando considerablemente en el diseño, pero todavía sigue teniendo detalles como este que lo distancian de un teléfono que le agrade a todos. Sin duda que está en el camino correcto, aunque todavía quedan varios pasos por recorrer.
Cámara
No creo que ofenda a nadie si digo que Google llevaba dos generaciones completas siendo el rey absoluto de la fotografía en móviles. Ahora la misión era clara: mantener el trono. En resumidas cuentas podemos decir que la cámara del Pixel 3 XL sigue generando fotos extraordinarias en todo contexto, simplemente con apuntar y disparar.
Hago énfasis en lo simple que es lograr una buena foto porque esa es la gracia. Mientras muchos siguen pidiendo el modo manual, este dispositivo logra el mejor resultado sin ningún paso intermedio.
Lo que hace tan buena la cámara es el software, y es aquí donde se han agregado aún más cosas novedosas. La primera es Top Shot, función que te ayudará a escoger la imagen perfecta tras una foto fallida. Esta funciona realmente muy bien, te entrega algunos fotogramas recomendados, pero puedes elegir entre varios distintos hasta escoger el que más te gusta.
Otro paso adelante gracias al software
La segunda es Super Res Zoom, la cual utiliza las vibraciones naturales de la mano para ir capturando varios ángulos de la imagen en tiempo real, lo que permitirá realizar un zoom digital muy parecido a lo que otorga un lente telefoto, por ejemplo. Si bien el resultado no es tan espectacular como el acercamiento que entrega el Mate 20 Pro, por ejemplo, si es absolutamente superior a cualquier zoom digital que podamos encontrar en el mercado.
Finalmente, Google anunció su propio modo nocturno llamado Night Sight, función que todavía no está disponible oficialmente para ningún dispositivo. Eso sí, los chicos de XDA pudieron realizar una modificación en la aplicación de Google Camera para lograr habilitarla «a la mala», y los resultados son realmente increíbles.
Además, este dispositivo incorpora doble cámara frontal. Este segundo lente nos permitirá tener un ángulo más amplio y poder, por ejemplo, tomar una selfie con mucha más gente sin tener problemas de que alguien salga cortado o de frentón no alcance a entrar en el cuadro.
Grabación de video
En el apartado de video tenemos puntos muy altos y puntos muy bajos. La estabilización es realmente sorprendente, tanto así que parece estar grabado por un brazo robótico. Además, la calidad mejoró considerablemente respecto del año pasado, logrando resultados bastante agradables de ver.
De ver…pero no de escuchar. Lamentablemente el audio que graba el Pixel 3 XL está muy lejos de ser bueno, suena algo tapado y poco natural. Esto es mejorable por software, seguro, pero el año pasado también lo era y Google no hizo nada al respecto.
Otro apartado en el que no termina por convencer es en la configuración, ya que el máximo permitido es 4K a 30FPS, dejando a mucho deseando una imagen más fluida y no tan cinematográfica.
Software
Como ya se podrán haber dado cuenta a lo largo (¡y bien largo!) de este review, el software es realmente el punto clave en el desarrollo de la línea Pixel de Google, esto porque realmente están tratando de innovar donde otras compañías solo intentan multiplicar sus especificaciones.
El sistema operativo está realmente a punto, funciona todo espectacular en el día a día, salvo un par de detalles, como la gestión de la memoria RAM. Hablemos de eso, desmintamos los mitos y aclaremos la verdad.
Primero, sí, efectivamente hay un problema que causa que las aplicaciones que uno tiene corriendo en segundo plano no permanezcan abiertas al invocarlas a través de la multitarea. ¿Qué significa esto? Que al abrir una aplicación que usamos hace un par de horas, esta tomará una milésima más de tiempo en abrir. En el día a día la verdad es que no afecta en absolutamente nada y si yo no te lo hubiese dicho, probablemente ni siquiera te darías cuenta.
Lo que sí les puedo aclarar es que el rendimiento del teléfono es espectacular, es realmente un lujo dentro del mundo de Android en este aspecto. Eso sí, crítica dura para los gestos nativos que incluye –que ya no se pueden cambiar–, dado que están muy lejos de resultar tan intuitivos como los de iOS.
Bienestar digital
Google ha hecho mucho hincapié este año en que están conscientes de la cantidad de tiempo que pasamos en nuestros teléfonos, por los que también ha incorporado algunas herramientas para que nosotros dimensionemos en qué ocupamos nuestro tiempo.
Pese a que todavía está en versión beta, Bienestar Digital nos entrega un gráfico con las horas que dedicamos a cada aplicación, además de la opción de limitar el tiempo que usas en cada una. También podremos configurar que la pantalla se vaya poniendo en blanco y negro a medida que llegue la noche, con el afán de dejar de utilizar el teléfono más temprano.
Quizás la función que más me gustó es «Flip to Shhh», con la cual el teléfono se pondrá en modo No Molestar cuando lo pongas boca abajo. Esto resulta muy conveniente cuando estás compartiendo con amigos o familia y tienes el Pixel arriba de la mesa.
Audio
Como ya se habrán dado cuenta, en muchos sentidos la tarea era mejorar los detalles que separaban al Pixel 2 XL de la gloria. Los parlantes de dicho smartphone resultaron ser buenos, pero con el pasar del tiempo me di cuenta que se fueron quedando atrás respecto de la competencia.
En el Pixel 3 XL tenemos parlantes estéreo frontales que suenan muy fuerte, tanto así que en los volúmenes máximo el teléfono vibra mucho más de lo que uno esperaría. Esto no molesta ni mucho menos, pero es extraño sentirlo. Cerca del 90% del volumen ya podemos comenzar a distinguir cierto grado de distorsión.
Respecto de la calidad general del sonido, es bastante buena, excelente para consumir contenido multimedia o jugar, pero el parlante inferior se escucha mucho más fuerte que el superior. Según Google esto está hecho así por diseño, pero a mi me resulta algo raro y me ha costado acostumbrarme.
Batería
Hablemos de la batería. En el interior del Pixel 3 XL nos encontramos con una de 3430mAh, lo que a muchos decepcionó al ver el anuncio en la página oficial, dado que es un poco más pequeña que el modelo del año pasado.
En la práctica el rendimiento de esta batería es prácticamente igual al Pixel 2 XL, pero ahora sumando una gran mejora: es compatible con carga inalámbrica con estándar Qi. Eso sí, solo podrás acceder a la carga de 10W si tienes el Pixel Stand u otro cargador autorizado (como el nuevo de Belkin, por ejemplo). De lo contrario, la carga estará limitada a 5W.
- Aplicaciones usadas: Twitter, Instagram, Facebook, WhatsApp, Spotify, Nest, Netflix, Android Auto, Hue, entre otras.
- Dispositivos Bluetooth: Bose Revolve, Bose Soundsport Wireless, Discovery Media en Volkswagen Polo
- Brillo de la pantalla: Automático
- Red móvil activa: Entel 4G y Wi-Fi activos
- Estado del GPS: Precisión alta
Uso total: 31 horas aproximadamente
Pantalla encendida: 5 horas y 27 minutos
Conclusión
Pese a que ustedes ya pueden estar sacando sus propias conclusiones, yo creo que Google ha hecho lo que todos esperábamos este año: mejorar todas las cosas que de una u otra forma fallaron en la generación anterior.
Con el Pixel 3 XL tenemos una excelente calidad de fabricación, una muy buena pantalla, mejores parlantes y, por si fuera poco, una mejor cámara. Al fin y al cabo es un muy buen teléfono, todo por un precio de 899 dólares.
Si hiciéramos una lista con todo lo que necesitamos de un smartphone, probablemente nuestro protagonista la cumpliría con creces. Quizás uno de los mayores problemas sigue siendo lo dificil que es conseguirlo, ya que en Chile no ha llegado de forma oficial y muy difícilmente lo hará en las próximas generaciones.
Si no te importa tener que importarlo y no tener soporte directo en Chile, el Pixel 3 XL sin duda que es una excelente opción a la hora de renovar un gama alta, ya sea siguiendo en Android o viniendo de iOS.
Disponibilidad
El Pixel 3 XL podrá ser obtenido en las próximas semanas en Chile a través de nuestros amigos en ProMovil, con un precio aún por confirmar.