Una noche de fiesta acabó siendo bastante cara para el joven Kenny Bachman, oriundo de Philadelphia, pero que se encontraba en aquel momento en la ciudad de Morgantown, en West Virginia, 300 millas (alrededor de 480 kilómetros) lejos de su ciudad natal. Lamentablemente para él, en su deplorable estado pidió un Uber para que lo fuera a dejar a su casa… Literalmente.
Como podrán imaginarse, Kenny recién se dio cuenta cuando le quedaban apenas unas cuantas horas de viaje para llegar a su hogar en el condado de Gloucester. Naturalmente, Bachman no tenía idea de donde ni con quien se encontraba, pero al momento se fijó en su error y decidió continuar con el viaje en vez de pedirle al conductor que volviera a West Virginia.
¿El precio final? $1,635.93 dólares –casi 975.000 pesos chilenos–, de los cuales poco más de mitad del precio corresponde a otro error más de él, ya que pidió un Uber XL (para más personas), y no un UberX.
De todas maneras, Kenny Batchman acabó pagando todo, incluyendo los peajes de vuelta para el conductor del Uber. Tremenda noche, me pregunto cómo habrá pasado la resaca después de haber pagado semejante cifra.
Fuente: NJ.com
