BlackBerry no quiso estar ausente en la fiesta más importante del año en lo que a móviles respecta y ha presentado la versión final del Mercury, que comercialmente se llamará KEYone. Pudimos probar el dispositivo por unos minutos y estas fueron nuestras impresiones.
Pese a que es un teléfono que se nota bien construido (como es clásico de la marca), no se siente muy cómodo en la mano. Su forma es bastante tosca y muy –muy– grueso, por lo que no termina de caber bien, ni siquiera cuando se toma con ambas manos.
Tiene algunas cosas interesantes y propias de BlackBerry, como su peculiar teclado y la posibilidad de deslizar sobre el para hacer scroll, aunque no estoy seguro que estas pequeñas características terminen por convencer a un usuario de comprarlo.
El teléfono difícilmente va a llegar a Chile, aunque siempre habrán importadores que permitan acceder a el directamente.