Ayer la compañía filial de América Móvil en Latinoamérica, Claro Chile, presentó su reporte financiero para el tercer trimestre de este año. En dicho informe, la compañía disminuyó un 3% sus ingresos respecto al mismo periodo en 2018, traducido en perdidas por $37.291 millones, más que los $17.115 millones del año pasado. Lo anterior lleva a la empresa a acumular $85.694 millones en perdidas hasta la fecha.
Según Claro la disminución en sus ingresos se debería a una caída del 40% en los ingresos del segmento de clientes prepago, reportando así una disminución de 9,6% en ingresos de su negocio móvil.
Para la empresa, la caída en los ingresos del segmento prepago se debe a la alta competencia en el segmento móvil y a la disminución de un 80% en los cargos de accesos que comenzaron a regir desde el 1 de enero. «En ausencia de tal cambio en las tarifas de interconexión, los ingresos del servicio móvil hubieran caído 3,2%», contrario al 40% que cayó realmente.
Los clientes prepagos bajaron un 5,3% en dicho periodo, pasado de 4.792 el 2018 a 4.537 en esta modalidad. Contrario a esto, los clientes pospago aumentaron un 10%, creciendo desde los 2.301 millones el 2018 a 2.242 millones de suscriptores.
A pesar de estas malas noticias, en el mismo reporte la compañía aumentó un 0,5% los ingresos en su segmento fijo, un 9% en los servicios a empresas y un 3,2% en televisión de pago.